Morosidad supera las 100 mil personas y las liquidaciones de bienes se duplican en Atacama
SOCIEDAD. La región presenta la mayor cifra de endeudados por cantidad de habitantes a nivel país. Además desde enero a abril de este año, subieron las personas que buscan pagar deudas con bienes.
El último informe de Deuda Morosa realizado por la Universidad San Sebastián (USS)-Equifax en relación al primer trimestre del 2020 arrojó que la Región de Atacama lidera el ranking nacional en torno a la cantidad de personas morosas versus habitantes, indicando que un 47% de sus habitantes se encuentran atrasados en sus pagos.
Además, de acuerdo a las cifras de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento (Superir) del Ministerio de Economía, en la región durante los meses de enero, febrero, marzo y abril, 28 personas optaron por el proceso de liquidación de bienes, es decir, acogerse a quiebra. Son 13 personas más que el año pasado, mientras que bajó la cifra de quienes optaron por la renegociación de sus deudas.
Los números reflejan el grado de endeudamiento que poseen las personas en la región y en el país, y ahora a ello se suma también el estallido social y la crisis sanitaria que se vive producto del covid-19.
Morosidad
El informe de la USS- Equifax señaló que a nivel nacional hay un 4,6% más de morosos en comparación al año pasado.
En Atacama de un total de 216.814 habitantes mayores de 18 años (ver gráfico morosos versus habitantes) un total de 101.921 se encuentran morosos. Sobre ello, Francisco Aravena, economista y académico de la Facultad de Economía y Negocios de la USS dijo que en las regiones del norte principalmente, donde la actividad minera cobra una gran relevancia, se pagan salarios muy altos en periodos de bonanza "por lo tanto existen ciertas sensación de estabilidad con respecto a sus salarios y resulta que muchos de sus bonos son transitorios, no permanentes, entonces ante cualquier situación vulnerable con respecto a la estabilidad del precio del cobre por ejemplo, eso puede inmediatamente cambiar", indicó el economista y académico.
"Las personas tienden a tener accesos a buenos créditos, porque en ciertos periodos recibieron buenos ingresos, pero resulta que muchas veces tienden a no poder cumplir con sus compromisos de deudas, eso pasa bastante", agregó.
Mientras que en relación al valor mora promedio real a precios de marzo de este año, la región pasó de estar en el cuarto lugar a nivel nacional con una mora promedio de $1.921.749 el año pasado, a estar ahora en sexto lugar del ranking con $1.819.966.
Si bien se podría pensar que es positivo que disminuya el promedio de la mora en la región, Aravena, advirtió que "lo que puede estar pasando y puede también explicar lo que pasa en Atacama (...) es que haya aumentado el número de nuevos morosos que tengan moras más chica, y eso en el promedio hace que caiga la mora, pasó en varios sectores".
En tanto sobre los motivos, el académico de la Universidad San Sebastián dijo que a la morosidad ya latente en los chilenos, se sumó ahora el estallido social y la pandemia del covid-19. "Los trabajadores informales fueron los primeros que resintieron esto y ellos tienen acceso a créditos formales bien pequeños, entonces yo no miraría con tanto optimismo que haya caído la cifra", señaló sobre la disminución en el valor promedio de la mora en la región.
Más personas liquidaron sus bienes
Recientemente se dieron a conocer las nuevas cifras de la Superir, en relación a la Ley N° 20.720, donde se indica las personas y empresas que por territorio se acogieron a proceso de renegociación o la liquidación de sus bienes (quiebra). Los datos indicaron que la región casi duplicó sus cifras en torno a quienes optaron por realizar procedimientos concursales de Liquidación de Bienes de la persona deudora (ver gráfico página 2) y disminuyeron quienes optaron por la renegociación de sus deudas.
Mario Espinosa, abogado y gerente general de DefensaDeudores , advirtió que estas cifras, "no son efectos de la crisis sanitaria sino que son efectos de la crisis social, del estallido social y por otro lado también el problema que se arrastra de sobre endeudamiento y morosidad de las personas y de las empresas".
Consultado sobre cuales pueden ser los factores que de hayan disminuido las renegociaciones y aumentado las quiebras, desde la Superir, Hugo Sánchez, superintendente de Insolvencia y Reemprendimiento dijo que "pueden ser varios los factores que lleven a una persona a optar por este procedimiento, en vez de la renegociación: no cumplir con los requisitos para renegociar o no cumplir con el acuerdo con los acreedores; no tener ingreso de liquidez por falta de trabajo; orientaciones de abogados que se especializan en esta materia o un problema financiero grave que le impida poder llegar a un acuerdo con sus acreedores".
En tanto, Espinosa, agregó que en los últimos años las familias chilenas "se han empobrecido, y no me refiero al nivel de ingreso, sino a la relación ingreso - gasto, hemos visto que cada vez más las familias chilenas destinan un altísimo porcentaje de su ingreso de pago a las deudas y por lo tanto su dinero disponible, es mucho menor. Dicho eso, no pueden enfrentar un procedimiento de renegociación, porque ya no tienen los flujos o los dineros necesarios para eso".
Empresas
Consultado respecto a si la normativa contemplaba algún 'limbo' legal que pudiese entorpecer los procesos, Espinosa opinó que "sí, hay vacíos que dicen relación con algunos requisitos que la ley establece, el criterio de definir entre persona deudora y empresa deudora fue un criterio contable, es decir, aquellas personas naturales que emitieron boletas de honorarios en los últimos 24 meses, son consideradas empresas a los ojos de la ley, a pesar de que sean personas naturales (...) por ejemplo un psicólogo o un profesor que trabaja en un 'pre' por ejemplo. Le impide acceder al procedimiento de la renegociación, entonces ahí se dejó fuera a un universo importante de personas", dijo el abogado junto con señalar que por lo mismo desde los legisladores se están trabajando mejoras y correcciones al respecto.
J.C es un copiapino que se encuentra desde finales de año pasado optando a la liquidación de sus bienes pero como empresa y no bajo la figura de persona, esto dado que contaba con emisión de Boletas de Honorarios. Este año solo cinco personas en la región se acogieron a ello y anteriormente fueron cuatro en 2019 y cuatro en 2018. Mientras que quienes optaron por reorganizar su empresa con deudas, han sido cero personas en los últimos tres años.
El copiapino comentó que "me acogí mediante un abogado particular y se ingresó al Tribunal, pasó un par de meses donde se acogió la solicitud en cuanto a la forma, no obstante fue rechazada por el Tribunal de primera instancia, por tanto la solicitud ingresó a la Corte de Apelaciones en el mes de marzo y desde ahí estamos a la espera que se pronuncien sobre esta solicitud, la demora imagino es por la contingencia del covid-19", detalló.
Sobre el motivo del porqué fue rechazada, J.C explicó que se debió a la falta de detalles en torno a sus ingresos y su imposibilidad de pagar deudas. "Ese requerimiento, esa resolución no está exigida en la Ley, que yo debo especificar eso, por lo tanto, ese es el principal motivo del porqué se ingresó a la Corte de Apelaciones".
En relación a los motivos de su endeudamiento, el hombre indicó que arrastra la deuda universitaria que adquirió para poder estudiar, gastos en tarjetas de créditos y dos procedimientos de salud. "Se transforma en un hostigamiento afectando a nivel emocional, todo lo que implica que te estén recordando mediante llamadas que tienes una deuda (...) en algún momento llegué a recibir entre 30, 40 llamados diarios", mencionó.
En tanto, el abogado de DefensaDeudores, señaló que si bien han aumentado las empresas a nivel nacional que han optado por reorganización, esto aplica más para empresas grandes que pymes, dado que "pueden acceder a los costos, pagar abogados, y además cuentan con redes de contacto para negociar de mejor manera con los bancos y eso las pymes no los tienen, y eso ha hecho que históricamente en estos 6 años de vigencia de la ley, las pymes hayan recurrido solo a la liquidación".
Por último, Espinosa dijo que lamentablemente aumentarán las pymes y personas que se opten por la liquidación en el marco de la pandemia. "Creemos que en el último trimestre de este año 2020, vamos a ver un número importante de pymes que lamentablemente van a tener que cerrar y van a optar a la liquidación a través de esta ley", sostuvo.
Opciones para deudores
Frente a la consulta de que opciones tienen quienes no pueden optar a la renegociación o liquidación, desde la Superir señalaron que "pueden ser la repactación directa con el acreedor o la solicitud de un crédito. La repactación es una negociación directa entre el deudor con la empresa a la que se le debe, y que busca nuevas condiciones de pago (...) mientras que el crédito es un préstamo de que un banco o casa comercial le otorga a su cliente, con el compromiso de que el cliente devolverá dicho préstamo en forma gradual (mediante el pago de cuotas) o en un solo pago".
47% de los atacameños mayores de 18 años se encuentra en estado de morosidad en la Región de Atacama acorde al ultimo informe de la Universidad San Sebastián.
28 personas liquidaron sus bienes este año en la región ( desde enero a abril). Mientras que el año pasado fueron solamente 15.