Cobresal es el primer equipo en volver a entrenar en cancha
DE SUDAMÉRICA. Los jugadores explicaron el plan de práctica en medio de la pandemia.
En el campamento minero de El Salvador, distante a unos 10 kilómetros de Diego de Almagro y a 252 kilómetros de la capital regional de Atacama, el Club de Deportes Cobresal retomó las prácticas en el Estadio El Cobre, siendo el primer equipo en Sudamérica en regresar a los entrenamientos en cancha, tras la paralización del fútbol debido al coronavirus.
Planificación
El cuerpo técnico encabezado por Gustavo Huerta justificó la decisión en base a la tranquilidad que se vive en el campamento, sumado a la baja taza de contagio que muestra la Región de Atacama, la tercera más baja del país. Aunque en el club se toman las debidas medidas preventivas y de distancia que recomienda la autoridad sanitaria.
Por su parte, los jugadores detallaron algunos alcances del plan de entrenamiento, del mismo modo que reconocieron que la decisión de retomar las prácticas en cancha fue sometida a votación al interior del plantel.
"Son solo tres días, una hora, en grupos pequeños, no tenemos contacto con más gente y somos solo nosotros", afirmó el capitán del equipo, el zaguero Rodolfo González.
Por su parte, el lateral Marcelo Jorquera fue más allá y destacó que entrenan en cancha "en grupos de cinco, los lunes, miércoles y viernes en la mañana", en tanto que los entrenamientos en casa son "son los martes, jueves y sábado" y se conectan a través de la aplicación "Zoom".
El objetivo de todo este, según el atacante Felipe Reynero, "es más para mantener el estado físico, nosotros no tenemos las mismas condiciones que tienen los jugadores de Santiago o de otros lados, por eso decidimos entrenar así en el estadio" y agregó que el regreso a las prácticas en el Estadio El Cobre "lo sometimos a votación y al final la mayoría decidió volver a entrenar".
En relación a las medidas de prevención, González dijo que "llegamos cambiados de nuestras casas y tomamos agua en botellas distintas". Jorquera agregó que "nosotros nos vestimos en nuestras casas, nos bañamos en nuestras casas después de entrenar, no entramos al camarín y nosotros tenemos nuestras medidas ahí y se cumplen a cabalidad (...) ocupamos toda la cancha"..
El campamento
En El Salvador quizás las cosas se hacen a otro ritmo y llevan una vida diferente. Marcelo Jorquera en esa línea destacó que el campamento "es una ciudad súper especial, en otros lados a lo mejor puede estar la embarrada y acá no".
En tanto que Felipe Reynero señaló que la mayoría de los jugadores tienen a sus familias viviendo con ellos, lo cual representa un alivio dada la baja taza de contagios en El Salvador. "Esperemos que siga así, porque si llega a haber un contagiado acá se va a poner fea la cosa", cerró el jugador .