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Al final ...¿Quién se gana el Grammy?
Señor director: En general en la producción de un disco de música popular, después que el ó la cantante graban sus vocalizaciones, participan, Ingenieros de grabación, Asistentes de grabación, Encargados de la edición de audio, estos últimos son quienes "limpian" y reemplazan los sonidos de la canción que no están a la altura de lo esperado y lo más importante, también supervisan y mejoran la afinación vocal del ó de la cantante, Ingenieros de Mezcla, que buscan el optimo balance entre todos los instrumentos e incluida la voz y los Ingenieros de Masterización, quienes pulen los detalles que pudieran haberse escapado en la mezcla, para dejar finalmente la canción de calidad excepcional, muy comercial y muy competitiva con otras grandes producciones que se lancen al mercado en forma paralela...
De seguro usted ha notado que muchos cantantes que alcanzan la fama, ganándose todos los trofeos con sus primeros discos, los cuales son más productos de la esmerada y dedicada post producción con sofisticadas herramientas tecnológicas de un gran grupo de profesionales, que por méritos personales, nunca cantan en vivo, sin contar con un sólido apoyo de pistas pre-grabadas y/ó de afinados coros, los ejemplos sobran, basta con recordar algunos que pasaron por el Festival de Viña del Mar.
¿No le parece a usted que gran parte del ó de los trofeo(s) (Grammy) que se llevan para su estantería personal las y los cantantes, son de propiedad del inmenso equipo de profesionales del sonido que participaron filtrando las imperfecciones y desafinaciones en las grabaciones del disco en cuestión?
Caso similar ocurre con las muy arriesgadas, destapadas y comentadas fotos de famoso(a) s, en que lo más notorio, son las habilidades de los profesionales del photoshop, que las gracias naturales y originales del ó de la fotografiada...
Reflexión: No todo lo que brilla, es oro... ó "Un buen gallo, pero un buen gallo, en cualquier gallinero canta y muy bien afinado"...
Luis Soler Milla
Acero importado: reglas claras conservan la seguridad
Hace ya más de un año hemos venido advirtiendo a la opinión pública y a las autoridades competentes respecto al incumplimiento de la norma chilena NCh203 que presentan las estructuras prefabricadas importadas y algunos aceros estructurales importados que ingresan al país. Lo hemos hecho a la luz de un informe del Instituto Chileno del Acero (ICHA) que entregaba pormenores técnicos respecto a estas deficiencias y con la preocupación de que dichos materiales sean utilizados en la construcción de grandes proyectos.
Cuando hablamos de las principales características del acero mencionamos las propiedades mecánicas como tensión de fluencia y ruptura, ductilidad y certificación acreditada según la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones, OGUC. En el cumplimiento de estos atributos radica la seguridad y la correcta ejecución de un proyecto. Si estas condiciones no se cumplen, arquitectos, ingenieros, revisores, inspectores, prevencionistas, y todos los profesionales involucrados, no pueden garantizar -mediante las certificaciones de calidad no normadas- el correcto desempeño del acero estructural que atenta contra la seguridad de las construcciones y vida de las personas. Adicionalmente, de acuero a la norma NCh428 se debe confirmar la correcta correlación de los certificados con los productos terminados, asegurando la trazabilidad de los materiales en todos los elementos.
Con todos estos antecedentes y considerando que Chile tiene una de las ingenierías antisísmicas más exigentes del mundo, creemos urgente reforzar las fiscalizaciones aduaneras de las calidades y de las certificaciones y generar nuevos métodos de control. Si bien reconocemos avances en las conversaciones que se están llevando adelante con el Ministerio de Economía por este tema, creemos en la necesidad de ir más allá en pos de leyes y reglas parejas que garanticen el óptimo desempeño de las estructuras prefabricadas importadas y algunos aceros estructurales importados, así como el cumplimiento de las normas y leyes relativas a su uso.
Al igual como lo hicimos en 2019, volvemos a realizar un llamado a la rigurosidad en el cumplimiento de las normativas que son parte de nuestra Ley; creemos que es un imperativo de seguridad urgente ya que vivimos en el país con mayor actividad sísmica del planeta.
Dante Arrigoni, gerente general de Arrigoni Metalúrgica