133 hogares han sido catastrados por la Ficha Básica de Emergencia en El Tránsito
COMUNIDAD. Bailes religiosos de diversos puntos de la Región de Atacama fueron parte de la jornada que se ejecutó con normalidad. Asistentes destacaron que en esta fiesta reafirman su fe, además de cumplir con mandas y promesas. CATÁSTROFE. El Ministerio de Desarrollo Social y Familia implementó este sistema para levantar información y gestionar ayuda a los afectados por el aluvión.
Apesar de los 26° que marcaron ayer la jornada en Copiapó, cientos de fieles se acercaron al Santuario Nuestra Señora de la Candelaria para festejar la tradicional procesión de la Virgen.
El encuentro católico comenzó cerca de las 17 horas, donde participaron 52 bailes que llegaron desde diversos puntos de la Región de Atacama y La Serena. Estas agrupaciones con sus tradicionales ritmos y coloridos trajes desfilaron frente a los fieles que se encontraban ubicados en la calle Los Carreras, acompañados de sombrillas y refrescos para sobrellevar la calurosa tarde.
Fieles jornadas
Según expusieron los asistentes, integrantes de los bailes e incluso el administrador apostólico de la Diócesis de Atacama, padre Jaime Pizarro, este año la festividad logró sobreponerse a todas las adversidades y con esto mostrar la fe de quienes cada año participan del encuentro.
"Contra todo pronóstico del miedo que a lo mejor podía haber en la gente de asistir y también en la situación interna de la iglesia por la crisis de los abusos, yo creo que ha habido mucha gente en la asistencia pero también ha sido una asistencia activa donde las personas se han involucrado, han participado y las hemos invitado a asumir compromisos propios de la fe", reflexionó el padre Jaime Pizarro.
De esta forma, quienes fueron parte de esta jornada como espectadores comentaron que una de los principales motivos para asistir al evento es la fe a la Virgen y cumplir con sus promesas y mandas.
Una de las asistentes a la jornada fue Xiména Gómez, copiapina que vive hace más de 20 años en Calama y quien cada año decide volver a su región para participar de esta fiesta. "Mi mamá realizó una promesa por mi hermana mayor, entonces todos venimos por ella, acompañamos a la Virgen todos los años", aclaró.
Por su parte, Karina Ibaceta acompañó a sus dos hijas que participan del Baile La Morenada y expuso que "para ellas (sus hijas) es fe, ellas hicieron una manda a su abuela que no está hace cinco años", dijo.
Juniz Resk, explicó que para ella es una tradición familiar asistir a esta fiesta ya que su familia está involucrada en los bailes. "Lo bueno es que también se pudo hacer la feria que es una motivación para la gente a asistir", mencionó.
Los Bailes
De esta forma, por más de dos horas copiapinos y visitantes disfrutaron de los bailes religiosos, sus diversos trajes y ritmos.
Carlos Cepeda, jefe de los Bailes Religiosos , confirmó que los bailes que se presentaron en Copiapó llegaron desde diversos puntos de la Región de Atacama y sumaron a los visitantes de La Serena. "Nosotros estamos con la tranquilidad en Dios y la Virgen porque gracias a Dios no nos ha pasado nada en este momento", dijo
Sobre la participación de los bailes, el padre Jaime Pizarro, aprovechó la jornada para agradecer su presencia y el trabajo anual que realizan para ser parte del evento, asimismo destacó su fuerza ya que a pesar de las altas temperaturas fueron capaces de presentar su trabajo ante la Virgen. Por otra parte, sumó elogios para los casi 300 voluntarios que apoyaron la celebración.
Un ejemplo de este esfuerzo con el que trabajan los bailes religiosos es Filomena Villalobos, quien es parte del Baile Virgen de los Dolores de Diego de Almagro. "Todos los años llegamos a este santuario a cumplir nuestras promesas. Yo tengo 50 años y creo que desde que mi mamá me tuvo estoy en el baile, es un orgullo pertenecer a un baile religioso, es una tradición de familia, la fe es tan grande que uno hace lo imposible para venir", con esto la asistente mencionó que para llegar a Copiapó cada año realizan actividades para poder financiar los pasajes.
"Decían que este año estaría malo, que habrían protestas pero nada, es una fiesta muy bonita", concluyó Filomena Villalobos.
La Ficha Básica de Emergencia se implementó con el objetivo de levantar información más detallada de los grupos familiares afectados por el aluvión del 27 de enero en la localidad El Tránsito. Para esto el Ministerio de Desarrollo Social y Familia con el apoyo de la Municipalidad de Alto del Carmen, dispuso un equipo técnico para aplicar la Ficha Básica de Emergencia en la denominada zona cero.
Gracias al método hasta el momento han catastrado 133 hogares, de los cuales se ha permitido identificar a 3 mujeres embarazadas, 16 personas en situación de discapacidad, 77 adultos mayores, 112 niños, niñas y adolescentes, y 66 hogares con jefatura femenina; dentro de este cálculo, 49% son hombres y 51% son mujeres.
Esta Ficha Básica de Emergencia (FIBE) se comenzó a implementar el 29 de enero en zona cordillerana, la cual contó con la presencia del subsecretario de Servicios Sociales, Sebastián Villarreal, quien tras conversar con las personas y monitorear la afectación de los hogares, señaló que "hemos desplegado la aplicación de la ficha FIBE, para medir la afectación de las viviendas y de los enseres para luego disponer de las ayudas que se canalizan desde el gobierno central".
Este proceso continuará durante los próximos días, por lo que es fundamental que los vecinos de El Tránsito, que no han sido catastrados por la FIBE, puedan acudir a sus hogares para activar este plan de ayuda del Gobierno, el cual les permitirá, posteriormente, recibir las ayudas necesarias con respecto a las afectaciones.
Además, durante este proceso de levantamiento de información, también se hizo entrega de un kit lúdico de apoyo para niños y niñas de hasta 9 años en esta situación de emergencia, correspondiente al subsistema Chile Crece Contigo. Este material tiene por objetivo favorecer la generación de actividades de juego y recreativas en niños y niñas que han experimentado una situación de emergencia y desastre, particularmente para quienes estén en situación de albergamiento y/o evacuación.