La Fiscalía de Atacama acaba de rendir, de forma detallada, su Cuenta Pública anual relativa a la gestión 2019, periodo en que durante el segundo semestre nos enfrentamos a una nueva realidad social, que involucró efectos directos en la función investigativa que lidera nuestra institución. En esta actividad, informamos a la comunidad sobre el aumento histórico en el ingreso de casos que experimentó Atacama el año pasado, en que las denuncias recibidas llegaron a 28.413, equivalente a un alza del 16% en comparación al año anterior.
Frente a este panorama, los fiscales de la región debieron doblegar sus esfuerzos para tramitar dichas denuncias y avanzar en las investigaciones penales, contando para ello con el importante apoyo de ambas policías.
Sin embargo, debemos plantear algunas necesidades logísticas y humanas que dificultan la obtención de medios de prueba, que permitan concretar una indagatoria aún más efectiva al momento de obtener evidencias e identificar a imputados que cometen delitos.
Como encargados de dirigir las investigaciones, durante la exposición planteamos la necesidad regional de contar con un equipo de OS-9 de Carabineros con quienes trabajar aquellos casos complejos de corrupción. Esto porque en la actualidad recibimos un apoyo limitado y circunstancial de esta unidad policial, la que es facilitada generalmente con funcionarios que tiene su centro de operación en Santiago. Del mismo modo, señalamos la necesidad de potenciar la dotación de la Bridec de la Policía de Investigaciones, a objeto de mejorar la calidad y los tiempos de tramitación en delitos económicos y funcionarios.
En cuanto a delitos comunes, hicimos presente la ausencia de cámaras de seguridad, tanto en el sector público como privado, las que, en muchas ocasiones resultan determinantes para lograr el esclarecimiento de delitos y establecer la identidad de sus responsables.
La función del Ministerio Público comienza a operar una vez cometido un hecho delictual. No contamos con facultades en materias de prevención, ni de orden y seguridad. Sin embargo, a partir de la detección de estas necesidades, estamos seguros de aportar a la disminución de la delincuencia en la región, tema que es una preocupación general y en la que todos debemos intervenir.
Alexis Rogat
Fiscal regional