Más de cien "casinos del pueblo" funcionan en la ilegalidad en Copiapó
NORMATIVA. Algunos concejales consideran que deben ser clausurados.
Más de cien locales denominados "Casinos del Pueblo" están emplazados en la capital regional, a pesar que están funcionando en una ilegalidad.
Según informó la unidad de patentes de la municipalidad de Copiapó, se trata de almacenes o locales con máquinas de juegos. En el centro de Copiapó hay 10, ocho clausurados y dos autorizados. Para funcionar utilizan patentes municipales de juegos electrónicos, sin embargo el escenario podría cambiar luego de un dictamen de la Contraloría General de la República.
Según el organismo fiscalizador, las patentes de los locales que explotan máquinas de juegos de azar no pueden ser renovadas. Para que esto suceda, Contraloría señaló que los locales primero deben comprobar que las máquinas que poseen son de destreza, porque de lo contrario incurren en una actividad ilegal.
Este tema, ha sido debatido en el Concejo Municipal y quien ha levantado la voz en reiteradas ocasiones es el concejal Omar Luz, quien considera que estos locales deberían ser clausurados. "He solicitado que se haga una fiscalización a estos lugares, ya que ninguno tiene permiso realmente. Los locales que están funcionando están relacionados habitualmente a otro tipo de cosas, venta de otro tipo de productos. No tienen permiso para funcionar como casinos, hay más de cien locales que tienen funcionado casinos sin ninguna autorización. En perspectiva que tengan la autorización o no, es un detalle. Desde mi punto de vista, no debieran existir ese tipo de casinos porque en la práctica hacen pensar a la gente que pueden ganar dinero y es justo a quienes tienen menos recursos".
Agregó que "nadie sabe cómo funcionan esas máquinas, no están en control, están funcionando de manera ilegal. Uno no puede pensar que están haciendo una labor importante para gente, sino que funcionan haciendo que gasten dinero cuando no lo tienen".
El concejal volverá a plantear el tema para que se realicen las fiscalizaciones correspondientes.
La concejal Rosa Ahumada, también considera que deberían dejar de funcionar porque no son un aporte. "No tienen permiso, no pagan impuesto y vienen a empobrecer más a los vecinos en esta época tan compleja que tenemos en Atacama. Mi posición bien categórica es que deberían clausurarse".
Explicó que debido a la solicitud del concejal Omar luz, hace pocos días se hizo un proceso de fiscalización en algunos locales y uno de los locales retiraron el papel de clausura y volvieron a abrir.
El concejal Luis Orrego también considera que se deben cerrar, ya que "no son locales de juegos de destreza sino de azar". Agregó que "en Vallenar cerraron casi todos los locales en muchos lugares, porque eso en el fondo está llevando a una pobreza a los que menos tienen".
La fantasía de ganar
Respecto al juego y el peligro de la ludopatía, el sicólogo Maximiliano González explicó que los jugadores "se organizan desde la posibilidad de ganar, el punto está en que cuando ganan el nivel de satisfacción es similar a como cuando se toman una droga, es decir tienen un efecto adictivo. Después quieres volver a jugar, volver a jugar porque quieres repetir esa sensación de extremo placer que genera el juego. En definitiva es muy similar el juego para una persona que está en un casino establecido a una persona que está en un casino informal o del pueblo. El punto radica en la necesidad de sentir ese placer".
"Nadie sabe cómo funcionan esas máquinas, no están en control, están funcionando de manera ilegal".
Omar Luz, Concejal
"No tienen permiso, no pagan impuesto y vienen a empobrecer más a los vecinos en esta época tan compleja que tenemos en Atacama. Mi posición bien categórica es que deberían clausurarse".
Rosa Ahumada, Concejal
"En Vallenar cerraron casi todos los locales en muchos lugares, porque eso en el fondo está llevando a una pobreza a los que menos tienen".
Luis Orrego, Concejal
Locales en el centro
Solo en el centro de Copiapó hay 10 locales, ocho clausurados y dos con una autorización, informó la municipalidad.