Donación de sangre en Chile, una deuda pendiente
Como cada 14 de junio se conmemora el Día Mundial del Donante de Sangre, una fecha que permite hacer una reflexión sobre la situación que vive el país en esta materia.
Las cifras nacionales siguen siendo bajas: la tasa es de solo 14 por cada 1.000 personas, pese a que se requieren al menos 20 donantes por cada 1.000 habitantes, según el Ministerio de Salud.
Si bien el gobierno ha suscrito compromisos para fomentar la donación voluntaria de donantes y educar a la población al respecto, hay un elemento inherente a toda persona que puede marcar la diferencia: la conciencia social.
Más allá de las donaciones habituales que se hacen cuando un familiar o persona cercana lo necesita, debemos entender que todos tenemos probabilidades de necesitar una transfusión en algún momento de nuestra vida. Más aún, ser capaces de entender el impacto que puede tener este simple y rápido proceso: la donación de una sola persona puede salvar hasta tres vidas.
Considerando que los bancos de sangre son claves en esta labor, es importante que estén dotados de equipamiento tecnológico y personal especializado, funcionando en red de manera ininterrumpida apoyando los procedimientos quirúrgicos o terapéuticos que requieren de transfusión de sangre y sus derivados, de manera rápida y segura.
A nivel del sector privado, es importante enfrentar este desafío. En RedSalud por ejemplo, contamos con una Red de Medicina Transfusional que une a la mayoría de las clínicas RedSalud, funcionando ininterrumpidamente como Banco de Sangre y apoyando para apoyar procedimientos quirúrgicos o terapéuticos que requieren de transfusión de sangre.
Dr. Marcelo Díaz de Valdés, director Técnico Red de Medicina Transfusional RedSalud
Funerales narcos
Insólitos pero comunes incidentes ocurridos en la primera mitad de este 2019 dejaron en evidencia un secreto a voces. El gran poder alcanzado por el narcotráfico en los barrios e, incluso, en las cárceles de nuestro país.
Los "funeralesnarcos" mostraron la impunidad con la que actúan las bandas y las celdas vip, las fallas del sistema carcelario y la precariedad en la que funcionan.
Luego de sólo algunos meses, de darse a conocer estos casos, las comunas están bajo la lupa por el narcotráfico, gracias a la gestión del actual Gobierno, quien desde una primera instancia mostró su compromiso por combatir esta clase de sucesos.
Una medida que, sin duda, debería ser aplaudida por los chilenos. Ya que finalmente, nos podemos jactar a nuestros pares latinoamericanos, que nuestro Gobierno lucha contra el narcotráfico, con medidas concretas de seguimiento y combate para proteger la vida y el futuro de las familias chilenas.
Patricio Saavedra Bahamondes
Patipelao
Durante nuestra historia -hasta 1950- la muchachada proletaria marcha descalza. El zapato fue hasta ese decenio inalcanzable, vi en mi escuela -de esas con número- a mis condiscípulos exhibiendo sus pies sin esa prenda hoy juzgada imprescindible. Hasta fútbol se jugaba en el patio a "pata pelá" Las familias vulnerables de entonces carecian de financiamiento para comprarlos. Otros los usaban sólo para salir y en la privacidad de la casa ocupan chalas.
Nace entonces la expresión que usa una senadora como insulto para referirse al privado de fortuna que, con audacia, critica los sobresueldos parlamentarios. Es un "recuerdo del pasado" como "pije" para referirse a un encumbrado miembro de la clase alta o "medio pelo" para aludir al integrante de los sectores medios. El origen del vocablo usado como injuria retrata una época, se usó sí como otra "piojento". Hasta finalizar la II Guerra Mundial esos insectos deambulan en la cabeza de todos los chilenos, pero son plaga en la testa de los pobres. El DDT marca el fin de los piojos, pero subsiste el denuesto.
Prof. Pedro Godoy, entro de Estudios Chilenos CEDECH
Malla curricular
Me gustaría saber si quienes se oponen al cambio de malla curricular sabrán cuál es la malla obligatoria de los colegios técnicos.
Hoy, los estudiantes técnico profesionales, están en desventaja para rendir a la PSU y acceder a la educación universitaria, por sus pocas horas de lenguaje y matemáticas, y la inexistencia de filosofía, ciencias y educación física. Por ello, esta modificación curricular crea un plan común general tanto para la educación humanista-científica como la técnico profesional y la artística, que brinde iguales oportunidades de acceso a la educación superior o a la vida laboral (la educación técnico profesional es más de un 40% de la matrícula).
Tomás Correa Ariztía