Redacción
Nicolás Jarry (81°) se cobró revancha de la mejor forma. Pues ayer derrotó en un sufrido partido a Marcel Granollers (110°) -después de perder el domingo ante el mismo jugador en la qualy- y avanzó a la segunda ronda del ATP 500 de Barcelona.
El "Príncipe" venció al español por 7-5, 4-6 y 6-4 en dos horas y 30 minutos de un partido en que el chileno pudo ganar en sets corridos, pero que se le escapó por pequeños detalles y terminó sufriendo hasta el final.
Tras esta victoria, la cual consiguió en su calidad de "lucky looser", Jarry ahora tendrá un desafío muy duro: Se medirá ante el alemán Alexander Zverev, número tres del mundo.
El chileno comenzó algo lento y el hispano lo aprovechó para ponerse rápidamente 3-0 en el primer set. Sin embargo, de ahí en adelante Jarry subió su nivel, jugó agresivo y terminó ganando 7-5 el parcial.
En el segundo set Granollers comenzó quebrando de inmediato el saque del nacional, pero nuevamente Jarry revirtió la situación y alcanzó a ponerse 4-3 y quiebre arriba en el marcador.
En ese momento, aparecieron los "fantasmas" del partido que perdió ayer domingo en la qualy ante el mismo Granollers. El chileno no supo cerrar el duelo en sets corridos y el español lo aprovechó y le dio vuelta el parcial para ganarlo 6-4.
Con el duelo igualado, el tercer set asomaba como el más tenso y así lo fue. Jarry salvó dos puntos de quiebre en el inicio y después de eso se envalentonó.
Ahí, con el parcial decisivo estando el marcador 2-2, Jarry quebró en un juego que llegó a estar 40-0 abajo y finalmente pudo mantener esa ventaja hasta que terminó ganando el encuentro.
En el último punto, el chileno gritó mucho, en una clara señal de desahogo por el duelo que perdió ayer y por el difícil momento que atraviesa en el circuito.
