Ayer abrió sus puertas al público la Feria de la Candelaria, con un total de 26.000 metros cuadrados (m2) sumando los dos recintos, los locatarios pondrán a disposición de la clientela diversas alternativas relacionadas con ropa, menaje, artículos para mascotas, cocinerías, food trucks, artesanías, artículos electrónicos, libros, entre otros.
En la competencia por captar la atención del consumidor, los vendedores de esta tradicional feria deben hacer uso del ingenio e innovar para lograr vender sus productos. En materia culinaria, la novedad emerge de un pequeño puesto que vende "helados roll", para capear el calor reinante en el verano copiapino.
Taylor Pérez, quien trabaja en el pequeño puesto, explicó la forma en que se prepara este particular helado. "Se le agrega la base de helado y la fruta que elige la persona y luego se tritura hasta dejarlo como una pasta". La mezcla se trabaja sobre una base de acero inoxidable que resiste muy bajas temperaturas, " se maneja aproximadamente a unos 20 grados bajo cero", comentó el vendedor.
"Luego se esparce para hacer los rolls de helado, de ahí se corta y van saliendo los rollos, se deja en un vaso y se adorna con crema chantilly, galleta y salsa a elección", señaló Pérez, quien dijo que los helados se venden a un precio de $2.000.
Además, el locatario afirmó que esta es la primera vez que trabaja en la Feria de la Candelaria y espera que le vaya tan bien como en el puesto ubicado en calle Atacama #406, sector centro de Copiapó.
Cómo todos los años, siempre hay una moda o tendencia de la cual los comerciantes sacan provecho para intentar generar ganancias. Es por ello que los artículos y sobre todo las poleras relacionadas con videojuegos tales como Fortnite y Minecraft, las bandas de K-Pop y series de animación como japonesa, como Dragon Ball, se encuentran por montones en las tiendas de ropa.
Al respecto, el locatario Guillermo Robledo - quien lleva ocho años consecutivos concurriendo a la feria - dejó muy en claro que "lo que no falla nunca es Dragon Ball, es sandía calada, el caballito de batalla que tenemos todos los años".
Además, Robledo agregó que este año "los niños piden muchas poleras de los videos juegos de moda, como Fortnite y Minecraft, en tanto que las chicas piden poleras de BTS, Black Pink, mucho K-Pop".
No solo hay poleras para los más pequeños de la casa, ya que hay artículos y poleras que apelan a la nostalgia de los adultos. "Para los más grandes tenemos poleras de Slam Dunk, Robotech y Star Wars, en síntesis, tenemos artículos y poleras para niños de 0 a 99 años", sostuvo el locatario.
Con respecto a los precios de las poleras, Guillermo afirmó que las tallas más pequeñas están a $5.000 mientras que las tallas más grandes se encuentran a $8.000.
Apertura Accidentada
En la Feria de la Candelaria, no todo es miel sobre hojuelas para los vendedores, porque si bien el periodo de ventas comenzó ayer , no todos los puestos se encontraban plenamente instalados, además se podían apreciar algunos comerciantes trabajando en la instalación de sus puestos y debido al poco espacio para realizar su labor, debían dejar sus implementos en el pasillo por el cual transitan los clientes.
"Básicamente se trata de un desorden administrativo, eso explica porqué algunos están instalándose recién ahora (ayer), además que vienen llegando de otras ferias", afirmó Pablo Troncoso, que vende artículos de menaje y cocina desde hace tres años en la Feria de la Candelaria y opera en el terreno 2 (el que está pavimentado).
Más delicada es la situación en el terreno 1 (donde no está pavimentado), ya que se nota aun más los retrasos en la instalación de los puestos. Sin ir más lejos, el comerciante Darwin Gutiérrez, que vende artículos de videojuegos y animación japonesa, se mostró crítico y detalló que "el gran problema es que el plano que está en la oficina, no se condice con la realidad del terreno, si tú ves el plano de la oficina, todo te cuadra, pero si vienes a terreno, no es así". Además, Gutiérrez lamentó que perdió el flete, por lo que perdió mediodía de ventas. "Todo tarde, todo atrasado porque me rebotaban de aquí para allá, en el terreno me decían una cosa, iba a la oficina y me decían otra", concluyó el vendedor.
Clientela
En medio de los pasillos que a ratos se tornaban estrechos por las escaleras, palos y uno que otro alambre, los clientes manifestaron diversas reacciones en torno a lo que observaron de la Feria en su primera jornada de ventas.
Francisco Araya, de ocupación informático, que vino a la feria acompañado de su pareja e hijo, comentó que "por lo que se ve, igual están un poco atrasados, en cuanto a novedades hasta el momento no he visto nada, pero espero encontrarme con alguna novedad, algo diferente"
Por su parte, Cesar Dorador, junto a su esposa, le pusieron nota 5,5 a la feria y en particular, el trabajador independiente argumentó que "están recién colocándose y a esta fecha ya deberían estar solamente vendiendo y no instalándose, porque uno va pasando, hay material y uno se puede tropezar, o se puede caer un menor, cualquier cosa".
Carolina Gómez, que circulaba junto a su esposo en el terreno 2, indicó que "a diferencia del primer terreno que está asfaltado, aquí hay mucha tierra y falta la mitad todavía, está fome, se nota que va a ser bien diferente a otros años".
Por su parte, a Juana Carvajal no le gustó lo estrecho de los pasillos, "no me gustó el camino, porque es muy incomodo para la gente, muy angosto, cuando estén los puestos instalados la gente va a estar más incomoda, solo queda esperar".
Por último, Milton Rojas, un ex trabajador de Codelco ya jubilado, espera que se instalen pronto los puestos. "Voy a traer a mi viejita en la noche, ella padece alzheimer, pero se entretiene porque ella lo encuentra bonito, la idea es cotizar y luego comprar", finalizó.