Lucha contra el cáncer I
Quizás en este mismo instante muchas personas están deseando tener una nueva casa, otros un mejor trabajo, un auto o un viaje. Sin embargo, como contrapartida y ahora mismo hay alguien que sólo quiere una cosa: ganar la batalla contra el cáncer.
Es por esto que el nuevo plan presentado por el Presidente Piñera se hace cargo de un problema real y urgente como lo es el cáncer, una enfermedad que representa la segunda causa de muerte a nivel nacional, con un 25% del total de los fallecimientos del país.
En la iniciativa se invertirá más de 20 mil millones de pesos anualmente, se fortalecerá la red oncológica nacional, el sistema de registro, de prevención y de vigilancia contra la enfermedad. Asimismo, se garantizará el acceso a cuidados paleativos y se formará a 130 oncólogos en dos años.
Y si bien aún no encontramos la cura a la enfermedad, el compromiso de Gobierno presta, por primera vez, un apoyo para que familias y enfermos puedan combatir de mejor forma una de las peores enfermedades que aqueja el país, el cáncer.
Lucha contra el cáncer II
Porque necesitamos mejorar la calidad de vida de las familias y de los enfermos que padecen la enfermedad, por lo que se requiere realizar mejores planes para reducir la mortalidad que provoca, realizar acciones para prevenirla, y de ser el caso prestar los cuidados paliativos necesarios al paciente que lo requiera.
Es que si el cáncer no discrimina por género, edades, niveles de riqueza, lugar donde vivimos, los acuerdos nacionales tampoco deberían hacerlo. Porque si se trabaja en conjunto, lo más probable es que tengamos más y mejores proyectos como éste.
Prohibido prohibir
La ley de etiquetado busca informar y no prohibir. Todos estamos de acuerdo que debemos, como sociedad, lograr bajar los altos índices de obesidad y sus patologías asociadas. ¿Sirven para este objetivo los sellos? Sí, e instala la necesidad de disminuir la ingesta de nutrientes críticos.
Pero más allá de prohibir el consumo o informar respecto de alimentos altos en sodio, grasas o azúcares, el desafío es que, a través de investigación, desarrollo e innovación en alimentos podemos ofrecer productos más sanos. En una reciente investigación con su desarrollo asociado en el CECTA de la Universidad de Santiago, logramos disminuir hasta un 58% de sodio en arrollado de huaso y 81% de disminución de azúcar en la tradicional mermelada cochayuyo-naranja, manteniendo la forma artesanal de producción de estos alimentos típicos.
Necesitamos mayor inversión en I+D+i, no solo del Estado, sino que también de las empresas involucradas para que esta política pública tenga un real impacto en la población.
Más que debatir sobre mediciones, validez de los montos y libertad de expresión, debiéramos estar trabajando colaborativamente para que el futuro de Chile sea libre de obesidad.
Viáticos
Con mucho esfuerzo las familias pagan sus impuestos, todos los días, con la compra del pan, con parte de sus remuneraciones, con el pago anual de sus impuestos territoriales y otros cobros adicionales que llegan a las arcas fiscales, todo esto con el objetivo de progreso, desarrollo, bienestar, seguridad social y justicia.
Los viáticos abultados son una nueva demostración que el Estado, como no tiene dinero propio, no cuida con "dientes y muelas" el dinero de todos los contribuyentes.
Señor director:
María Ignacia Garrido, enfermera con especialidad en salud pública
Señor director: El nuevo plan de salud contra el cáncer es una clara señal de que los acuerdos se realizan de la forma adecuada. Porque por más que tengamos desencuentros, el diagnóstico siempre es el mismo: hay que hacer frente a una enfermedad que está entre las primeras causas de muerte de los chilenos.
José Tomás Correa Ariztía
Señor director:
Dr. Claudio Martínez, director Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología en Alimentos (CECTA-USACH)
Señor director:
Gonzalo Valdés Lufi, ingeniero comercial