Gonzalo Contreras: No me gusta Piñera, pero tiene razón en esta. Esta nueva necesidad de tener que cuidar lo que decimos para no "herir" la sensibilidad del resto, está haciendo que todos los espacios en donde debiera primar la discusión y el diálogo para poder llegar a consensos en donde prime la razón, desaparezcan.

Patricio Labraña: que tiene que ver la estupidez de un chiste malo y machista con la posibilidad de dialogar?

Seba Valenzuela: Muy bien que pare con sus chistes machistas punto para él.

Ramón Fuentes: Toda la razón, Presidente. Nos estamos poniendo fomes.

Juan Fontecilla: Hay gente, entre ellos el presidente Piñera, que no parecen haberse dado cuenta que los tiempos han cambiado, y que las tallitas de estadio de fútbol ya no son cómicas.