Gendarme denunció distribución de pornografía infantil y acoso sexual por parte de compañeros en Copiapó
ACUSACIÓN. Teniente Linda Cerpa llegó hasta la Comisión de Mujer y Equidad de Género de la Cámara de Diputados a exponer su caso.
Hasta la Comisión de Mujer y Equidad de Género de la Cámara de Diputados llegó ayer la teniente de Gendarmería Linda Cerpa Mena, para entregar su testimonio en el cual acusó ser víctima de hostigamiento y acoso sexual, además de denunciar distribución de pornografía infantil por parte de sus pares de la cárcel de Copiapó.
Todo comenzó en 2013 cuando la teniente llegó hasta la capital regional para ser parte del equipo de Gendarmería en el centro penitenciario, siendo la única mujer en un grupo de 15 funcionarios.
Al año siguiente comenzó a ser acosada por sus compañeros por el hecho de haberse casado con otro gendarme que conoció durante su formación. Esto le provocó diversos problemas físicos como caída de piezas dentales y trastornos del sueño.
Pero la situación se tornó más compleja para la teniente luego que denunciara a sus colegas ante las autoridades por distribución y almacenamiento de pornografía infantil, esto porque en un grupo de WhatsApp denominado "El Club de Tobby", integrados por gendarmes de su unidad, era comparada con la protagonista del material audiovisual de alto contenido sexual.
Malos tratos
En una carta dirigida a la directora Nacional de Gendarmería, Claudia Bendeck, la teniente Cerpa expuso que "día a día debía soportar burlas por parte de mis compañeros de trabajo sumado al acoso directo por parte del superior, quien de forma prácticamente diaria me llamaba a su oficina donde se encontraba viendo pornografía en su computador o su teléfono. Preguntándome si 'había hecho esa pose', o que me parecía tal o cual video respecto a mi vida sexual".
Ante las constantes burlas y comentarios denigrantes de sus compañeros hacia las mujeres (en su presencia), la funcionaria de Gendarmería se mantuvo firme, sin mostrar debilidad. De esa manera pensó que sus agresores se hartarían del hostigamiento que le generaban, sin embargo, la situación solo empeoró.
Cuando supo que sin importar la fortaleza que demostrara el acoso no terminaría, Linda Cerpa cambió su apariencia. De 58 kilos y midiendo cerca de 1,68 metros, la teniente llegó a pesar 98 kilos (con todo los problemas de salud que eso conlleva).
La llamaban "Peppa Pig" y la "cerda", en alusión a su apellido. En una ocasión recibió un sobre cuyo contenido era un compilado de fotos que mostraban la captura de pantalla de un chat de WhatsApp, revisando se enteró que varios de los números eran de sus compañeros e incluso estaba el de su superior.
En el chat había "links" que derivaban a imágenes sexuales y pornografía infantil, también se comparaba a la teniente con las protagonistas del contenido audiovisual.
Tras esta situación, Cerpa hace la denuncia correspondiente tanto a nivel regional como a nivel nacional en Gendarmería, pero fue desestimada.
Incluso, posteriormente la teniente sufrió el robo de sus uniforme y pertenencias personales desde su habitación fiscal, denunciando el hecho en Fiscalia.
Vulneración
La diputada Daniela Cicardini, quien invitó a la gendarme Linda Cerpa a la Comisión de Mujer y Equidad de Género de la Cámara de Diputados, criticó fuertemente la nula resolución de este problema por parte de Gendarmería.
"Acá hay una situación de vulneración de derechos de forma sistemática de instituciones públicas. Gendarmería no activó los protocolos que uno entendería que deberían existir en este tipo de situaciones. Además, ella relató lo complejo que era el funcionamiento interno en el día a día, con su trabajo y la convivencia con sus compañeros. Incluso, ella denunciaba que fue a hablar con quien estaba a cargo de la unidad de Gendarmería en Copiapó, pero él era quien también hacía alusión a alguna situaciones que debería hacer la teniente a cosas de connotación sexual", dijo la diputada.
Tras el cambio de la dirección regional de Gendarmería, se instruyó los sumarios administrativos por estos casos, además de llevar la situación a la justicia.
Ya en 2016 la teniente Cerpa se trasladó a una unidad de Valdivia, pero las investigaciones avanzaron y hubo otro hecho que llamó la atención, ya que denunció irregularidades en el proceso investigativo luego que personal de Gendarmería en Copiapó impidió el ingreso de la PDI a tomar prueba de huellas dactilares a la habitación en donde ocurrió el robo.
Esto fue catalogado como grave por la diputada Daniela Cicardini, quien además criticó la pasividad que es tomada la denuncia por las instituciones involucradas.
"Esta es una denuncia de tal gravedad, en donde se habla de pornografía infantil que es difundido al interior de Gendarmería por parte de los funcionarios y que nadie haya hecho nada. Hasta el día de hoy Fiscalía mantiene congelada la investigación. Han pasado cuatro años en donde nadie hace un pronunciamiento claro, ni Gendarmería, ni la PDI, ni Fiscalía. Cuando la PDI quiso ingresar a Gendarmería a hacer el conducto regular de estos procedimientos, no le permitieron el ingreso. Uno entiende que acá se quiso encubrir una situación grave de vulneración de derechos hacia una mujer", sentenció Cicardini.
Pero esto no queda ahí, ya que en 2017 la teniente Cerpa es denunciada por Gendarmería por el cargo de "divulgación de conversaciones privadas", en alusión a las conversaciones de WhatsApp que denunció, encontrándose actualmente imputada por ese delito.
En la carta enviada por la teniente Cerpa a la directora nacional de Gendarmería, solicita una mayor claridad sobre su caso.
"Hasta ahora solo he recibido negligencia y denegación efectiva de justicia por parte de la Dirección Nacional de Gendarmería. Es por esta razón que espero que de la actual Dirección que se restaure el derecho y se me repare todo lo que he sufrido por culpa de oficiales y autoridades de la institución, para lo cual sólo exijo que se haga justicia y se sancione conforme a derecho a los oficiales involucrados e individualizados en esta presentación", finalizó la gendarme Cerpa.
El Diario de Atacama se contactó con la Policia de Investigaciones para conocer su parecer ante la denuncia que señala el impedimento a realizar el conducto regular en este casos por parte de Gendarmería, sin tener una respuesta al cierre de esta edición. Igual situación con Gendarmería, donde este medio intentó conocer su postura y la de sus funcionarios involucrados, tampoco existiendo una respuesta por parte de la institución.
" Hasta ahora solo he recibido negligencia y denegación efectiva de justicia por parte de la Dirección Nacional de Gendarmería. Es por esta razón que espero que de la actual Dirección que se restaure el derecho y se me repare todo lo que he sufrido por culpa de oficiales y autoridades de la institución"
Linda Cerpa, gendarme denunciante"
"Cuando la PDI quiso ingresar a Gendarmería a hacer el conducto regular de estos procedimientos, no le permitieron el ingreso. Uno entiende que acá se quiso encubrir una situación grave de vulneración de derechos hacia una mujer"
Daniela Cicardini, diputada"