Madonna, la multifacética "Reina del Pop", llega a las seis décadas
MÚSICA. La "chica material" cumple 60 años el jueves y se ha manifestado "lista para el próximo capítulo" de su vida.
Este jueves cumple sesenta años Madonna Louise Veronica Ciccone, denominación civil de la "Reina del Pop", quien usó su nombre de pila para encontrarse con las audiencias y someterlas a su juego antes que cualquier Britney, Beyonce o Taylor apareciera.
Recién cumplidos los 20 años saltó a un bus con destino a la ciudad de los sueños: la peligrosa Nueva York de 1978 donde la violaron y asaltaron, donde supo lo que era comer de las sobras de los restaurantes.
Como cientos batalló desde la segunda línea por el estrellato musical que finalmente llegó en el verano de 1983 con "Holidays", una dulce canción bailable, pop seductor encarnado en unos ojos almendrados y un lunar de verdad en la comisura de la boca. Con crucifijos, lazos en el pelo y tutús de ballet, la pequeña bailarina cantaba a la par que se movía con una gracia nunca antes vista.
Hace ya 35 años de ese verano, en el cual también pasó la prueba del hit solitario gracias a "Borderline" y "Lucky Star", otro par de clásicos de la pista de baile que parecen no envejecer.
En ese tiempo ha lanzado 13 discos de estudio, el más reciente "Rebel Heart" en 2015. También ha desplegado una faceta como actriz a lo largo de 22 películas y ha sido una trabajólica empresaria en rubros de todo tipo. Además, tiene una fundación de ayuda para niños y niñas de Malawi.
Amores y familia
En 1985 se casó con el actor Sean Penn, un amor grande y tormentoso que plasmó en el disco "True Blue", dedicado a él, de quien finalmente se divorció en 1989.
Sucesivas parejas siguieron a Penn, entre las que está el actor Warren Beatty, la estrella de la NBA Dennis Rodman y el rapero Tupac Shakur.
Madonna tardó su maternidad hasta los casi cuarenta años cuando en 1996 nació Lourdes, hija del bailarín cubano Carlos León, y luego llegaría en 2001 Rocco, hijo del cineasta inglés Guy Ritchie. En 2008 adoptó a David, su primer hijo de Malawi, a quien seguiría Mercy James y las mellizas Stelle y Estere.
En su Instagram se la ve como dedicada madre que acompaña al adolescente David a sus partidos de fútbol al borde de la cancha, o bien hinchando por su nuevo hogar, Portugal, en el último mundial del balompié.
También se la ve muy entusiasta y acompañada de las mellizas, en sus constantes viajes hasta Malawi para apoyar hospitales y refugios para huérfanos.
Hace ya diez años que Madonna se divorció de Ritchie y en esa década ha tenido algunos novios, todos veinteañeros y que despiertan ácidas críticas a las cuales la diva no responde, más interesada en practicar la cábala o leer los diarios de Anais Nin.
Discurso
También desde Malawi sube fotos donde comenta que ya está lista para pasar a una nueva página, "lista para el próximo capítulo" advierte la "chica material" que juega y baila como niña, mientras se aplica filtros con caras de animalitos para divertir a los millones de seguidores que tiene.
En los Billboard de 2016, al momento de entregársele un reconocimiento como mujer del año, se plantó con las piernas bien separadas ante el micrófono, vestida de azul oscuro y dorado, para dar un discurso donde habló desde su condición de mujer en el negocio de la música.
Un terreno que le ha sido propicio a pesar de la misoginia, dijo, donde nunca escribió pensando en un género específico y reconoció el influjo de David Bowie y cómo encarnó una fuerza que sobrepasa lo femenino y masculino.
Nada de mal para un patrimonio que según Forbes bordea los 600 millones de dólares y que ha vendido casi 65 millones de discos.