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Otra vez llegamos tarde

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Ya pasó en 2012 con la muerte de Daniel Zamudio, joven que murió producto de lesiones atribuidas a su orientación sexual y que recién después de ello, pudo ver la luz una ley.

Ayer el Gobierno anunció la imprescriptibilidad para los abusos contra menores, noticia que si bien todos esperábamos para bien de nuestros niños y jóvenes, no deja de cuestionarnos por qué ahora y no antes.

¿Acaso debemos esperar a que vivamos o presenciemos lo más bajo del acto humano para poder legislar y poner freno a abusos, discriminación, atropellos a los derechos humanos y ahí sí reaccionar?

Es de esperar que, de una vez por todas y con real sentido de urgencia, la sociedad en su conjunto, nuestras autoridades, legisladores, organizaciones civiles, fundaciones y quien esté por impulsar una mejora social y humana en el país, sea capaz de alzar la voz antes de, y así no sigamos lamentando actos o acciones que no sólo atentan contra una persona o grupo, sino que dañan el corazón de la sociedad.

Es hora de que como país dejemos atrás divisiones muchas veces sin razón y pongamos el foco en lo realmente urgente y en los problemas que realmente sufren, hora a hora y día a día, miles de chilenos.


Vargas Llosa y el liberalismo


Chile, país de inmigrantes

La negación de la diversidad ha generado un racismo constante y selectivo frente a aquel que no es parte o no debe ser parte de esta monocultura alimentada por la Educación y todas sus formas de proyección.

La llegada de inmigrantes, y sus innumerables acciones y construcciones culturales a lo largo de miles de años, plasmaron su cosmovisión del entorno, arquitectura, creatividad, arte y pensamiento. Su legado patrimonial, tangible e intangible, hoy es parte de nuestro acervo cultural e, indudablemente, forma parte de nuestra identidad, un "tesoro de la memoria del país".

Pero, ¿por qué alguien emigra? Por necesidad de refugio, como hace 79 años lo hizo un grupo de españoles llegados a las costas de Chile; por trabajo y sobrevivencia, debido a que su proyecto de vida se ha visto truncado en otras regiones del planeta; en búsqueda de posibilidades de estudio y mejores condiciones para el desarrollo de sus talentos; por catástrofes naturales, de salud pública o grandes cambios en la naturaleza que afectan a los asentamientos originales.

Emigro porque soy negado, invisibilizado, segregado, discriminado y considerado descartable para aquellos que instalan el relato oficial de una cultura. Todo aquel que ha llegado, por estas u otras razones, ha sido parte en la construcción de este país y lo que es hoy, con sus grandes bellezas y también atrocidades.

Mauricio Amster, un inmigrante que llegó a ser director artístico de la Editorial Zig-Zag, el sello editorial más grande de Chile y del continente en un tiempo, y que contribuyó al desarrollo del periodismo y la lectura de varias generaciones, decía: "Hay dos modos de considerar las letras en cuanto a belleza. La primera es más bien privilegio de los especialistas, artistas, calígrafos y tipógrafos que pueden gozar con la contemplación de una letra suelta de proporciones acertadas y hermoso trazado. Una letra puede ser bella al igual que cualquier otra forma abstracta... El otro modo constituye la experiencia común de las personas que leen. Es la belleza del conjunto."

El caso de la pequeña Ámbar, presuntamente violada y asesinada en manos de su tío cuidador, nos recuerda que otra vez llegamos tarde como país a cubrir y socorrer la necesidad de los más débiles.

Oscar Galaz

Señor director: La visita de Mario Vargas Llosa al país ha mostrado ciertas cosas en particular, una de ellas es la clara visión que tiene el liberalismo respecto a las dictaduras. Para él, toda dictadura es injustificable, independiente del "logro económico" ya que se pierden logros democráticos importantes. Esta frase es en el contexto de la defensa de Axel Kaiser a la dictadura de Pinochet, ya que para él hay dictaduras menos malas que otras(al compararla con Cuba). Deja en claro entonces de que en Chile hay bastante neo-conservador que se dice liberal, pero que a la vez defiende dictaduras como la militar sólo por los aspectos económicos de esta. Al parecer más que liberales tenemos un sector de anti socialistas y conservadores no asumidos. Obviamente, no se puede meter a todos los liberales en la misma bolsa, sólo va a aquellos que defienden dictaduras como la de Pinochet.

Javier Valdivieso, estudiante de College en Ciencias Sociales Pontificia Universidad Católica de Chile

Somos un país que niega su origen migrante. Existe un discurso nacionalista, basado en la exacerbación de las diferencias y en elites políticas, intelectuales, económicas y religiosas que niegan la diversidad, aplicando un lenguaje, simbología y ritos, que han logrado instalar una monocultura. Nuestro territorio, de hecho, tiene miles de años de construcción cultural, no 200 o 500 años como han tratado de persuadirnos.

José Albuccó, académico de la Universidad Católica Silva Henríquez