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ENTREVISTA. Rodrigo Ubilla Mackenney, Subsecretario del Interior:

"El desborde (del fenómeno migratorio) es objetivamente una realidad en Chile"

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El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla Mackenney, bromea y califica de "interesante" su regreso al mismo cargo que ocupó entre 2010 y 2014. Sostiene que la instancia es como una especie de continuación de los "estudios" que ya realizó en su anterior paso por La Moneda. Tiene en la seguridad uno de sus focos; sin embargo, está de cabeza en el fenómeno migratorio y la propuesta del gobierno para reemplazar la normativa actual, que data de 1975.

- ¿Qué caracteriza, según su juicio, a la migración que llega a Chile?

- Creo que, en los últimos cuatro años, el país pasó una etapa distinta. Teníamos preferentemente una migración de países vecinos. Hoy, claramente los flujos son de la región, no de países fronterizos. Me refiero a Venezuela y Haití. Hablamos de un país atractivo no solo para los vecinos, sino también para la población de la región con flujos realmente significativos: 130 mil haitianos que se quedaron en los últimos 14 meses es algo que no se había visto y una cifra parecida de venezolanos.

- Este es un fenómeno mundial, no sólo ocurre en Chile...

- Está bien, el fenómeno mundial es la migración, lo particular es que somos un país atractivo para el migrante. Entonces, la definición que deben tomar los países atractivos es cómo ordenan esos flujos y eso es lo que pretende el proyecto de ley y las medidas administrativas propuestas.

- ¿Qué significa y qué objetivos pretende la idea de "ordenar"?

- Significa ser responsable al momento de recibir extranjeros. No podemos ignorar a quienes vienen con un legítimo interés de instalarse con su familia, pero hay otro grupo que utiliza esta fragilidad que tiene el país, de frontera, para traer sus conductas delictivas. Un control de frontera efectivo para que los delincuentes no vengan a Chile es una cosa que cualquier país del mundo hace. Creo que hoy tenemos una gran fragilidad. También significa que estas personas no terminen viviendo en una condición de precariedad social y laboral o de instrumentalización por grupos sin escrúpulos. También significa hacer una reflexión de cuáles son las condiciones que queremos ofrecerles a los extranjeros. El hecho que se haya aumentado de 400 mil a más de un millón de extranjeros en cuatro años denota que hay una situación desbordada.

-¿Cree que el fenómeno migratorio en Chile se "desbordó"?

- Cuando tenemos flujos que ejercen presión sobre servicios básicos como la educación preescolar, la salud primaria, uno dice 'lo que pasa acá es que en tan corto tiempo llegó tal cantidad de extranjeros que como país no fuimos capaces de adecuarnos a esta nueva realidad'. En esa lógica creo que el desborde es objetivamente una realidad.

- ¿El nuevo marco legal apunta a disminuir la cantidad de extranjeros que está ingresando al país? ¿Tendrá un efecto en ese aspecto?

- Con el proyecto de ley y sus indicaciones y las medidas administrativas se apunta a ordenar. Esto va en el camino de lograr un orden, no de cerrar fronteras.

- ¿Lo estiman así?

- No, yo no hago esa reflexión. Usted me pregunta si puede tener ese efecto: sí, probablemente pueda tenerlo, pero no lo estimo y no fue hecho con esa intencionalidad tampoco. Sí con la intencionalidad de ordenar.

- Su análisis hace concluir que el número de inmigrantes podría ser excesivo.

- Esto es dinámico porque hoy se produce esta situación. En cuatro años más que se dobló la población extranjera en el país. Una afirmación como que hay muchos o pocos grafica relativamente lo que estoy tratando de explicar. El país tiene que tener una capacidad de absorción en cuanto a los servicios que se demandan.

- ¿Se van a establecer cuotas migratorias para otros países?

- No. Estamos en una línea distinta en el proyecto definitivo; por ejemplo, planteamos que no se puede cambiar de visa turista a temporal en Chile. Es decir, el que quiera venir a trabajar tendrá que pedir la visa en el consulado respectivo. Segundo, planteamos la creación de visas con características distintas a las actuales, lo que de alguna manera estamos recogiendo en la visa de oportunidades. Esa visa dice que el país va a definir, una normativa que estará en todos los consulados del país y donde se dirá 'señor: si usted quiere venir al país y reúne estas condiciones, nosotros lo queremos recibir, ya sea para desarrollar un emprendimiento, una inversión'. No tiene que ver con nacionalidad, va a ser en función de las necesidades, del tipo de migrantes que quiere el país.

"Cuando hablamos de una política (migratoria) como instrumento de planificación, es hacernos cargo de una realidad que llegó para quedarse"."