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ENTREVISTA. juanita parra, baterista de Los Jaivas:

"Uno a veces se cuestiona si seguir, pero la respuesta del público nos ha convencido"

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Nathalie Varas Centellas

Juanita Parra lleva 27 años como baterista de Los Jaivas (entró a la banda en 1990, pero debutó cinco años después), sucediendo a su padre, fallecido en 1988, quien originalmente ocupó ese lugar durante 25 años.

Cuatro años antes del trágico episodio, la agrupación había lanzado un disco al que llamaron "Obras de Violeta Parra", el cual actualmente los mantiene en gira por todo Chile, incluida Antofagasta, donde estarán el 30 de noviembre.

¿Cómo nació su pasión por la música?

-La verdad es que el hecho de convivir con Los Jaivas y haberme criado en torno a la música, hizo que en mí despertaran estas ganas de ser músico. Y por diversas circunstancias terminé llegando a la batería, que da la casualidad que es el mismo instrumento que tocó mi padre en el grupo durante 25 años antes de fallecer.

¿Cuál fue la influencia que tuvo su padre en su carrera musical?

-La influencia es total, en el sentido que yo asumí su lugar, su instrumento y en su grupo. Por lo tanto he tenido que respetar su forma de tocar, he tratado de igualar lo más posible dentro de mis propias capacidades, la forma de interpretar el ritmo latinoamericano en la batería.

¿Cómo fue su primera presentación ya formando parte de Los Jaivas?

-Fue muy impactante, fue en el año 1996 en la Quinta Vergara, menos mal no era el festival y no estaba el "monstruo", aunque para mí también era un monstruo el público seguidor de Los Jaivas. Porque todos ellos venían por primera vez a ver a esta niña que decía ser baterista y que quería estar en el lugar de su padre.

Tras la muerte del vocalista Eduardo Alquinta, ¿en algún momento pensó en disolverse el grupo?

-Por unos segundos algunos de nosotros pasamos por la sensación de sentir que esto ya no podía continuar, pero lo que nos ha ayudado y convencido es la respuesta del público. Esa muestra de amor y de apoyo ha sido incondicional y nos ha permitido continuar.

Homenaje

¿Qué significó para usted participar en esta obra de homenaje a Violeta Parra, que data de 1984?

-Yo creo que es como haber hecho un master, esto me ha hecho crecer mucho. Siento que por un lado es un homenaje a Violeta Parra, y por otro lado también a mi padre, que dejó hecha y creada una obra majestuosa en la batería, aparte de la dificultad de llegar a interpretarla lo más parecido a lo que él hizo .

¿Cómo fue el proceso de producción y ensayo de esta presentación?

-Fue muy intenso, fueron cuatro meses de ensayo, donde paralelamente el equipo técnico está creando distintas reuniones. Creo que desde que estoy en el grupo nunca antes habíamos hecho la preparación de un trabajo tan específico, porque implica tener un vestuario, iluminación, vídeos, etcétera.

¿Cuál cree que es el mayor legado cultural que dejó Violeta?

-El mayor legado es su amplitud. Siento que todo Chile ha estado homenajeándola durante este año de manera increíble, en los colegios y en centros culturales. Entonces nos damos cuenta ahora de la importancia de Violeta, que ella forma parte de toda nuestra cultura y nuestra enseñanza, no sólo para los músicos que la interpretamos, si no que para todos los chilenos.