Pamela Vásquez Fuentes
La Fundación Techo-Chile realizó una encuesta en campamentos -respecto de antecedentes previos- de la región y el país, con el propósito de determinar cuáles son las razones que llevan a las familias a vivir en una toma.
Se trató de un cuestionario de 70 preguntas que respondieron las familias de campamentos en los cuales Techo Chile trabaja. En la región, el tamaño de la muestra fue de 206 hogares y tiene un nivel de confianza de un 95 %.
Según los datos entregados por el estudio, un 51,50% del universo corresponde a hombres, mientras que un 48,50% a mujeres.
Respecto al nivel educacional, se estableció que un 28,2% contaba con educación media completa, un 20,3% con educación media incompleta, 19,8 estudió la educación básica completa y 20,3% incompleta, en tanto que un 3,5 no contaba con ningún tipo de nivel educacional.
En menor proporción, el nivel educacional de los encuestados, en un 1,0% había cursado educación técnica incompleta, un 4,0% estudió una carrera técnica completa y solo un 1,5% una carrera universitaria completa y la misma cantidad, incompleta.
Razones
En la encuesta se identificaron las principales razones por las cuales las familias llegan a vivir en los campamentos.
La primera de ellas, se debe al alto costo del arriendo, según el 63.9% de las familias. La otra causa es el deseo de dejar de vivir como allegado, esto quedó en evidencia en un 33.1% de los encuestados y la última de ellas, en menor grado, se basa en las pocas oportunidades laborales, respuesta entregada por un 18.9% de los encuestados.
En tanto, un 5,9% llegó al campamento porque tenía deudas, igual cifra fue por inseguridad del barrio, mientras que un 5,3% por que quería estar cerca de familiares y finalmente un 1,8 % llegó porque en su vivienda anterior había una lejanía con respecto a los lugares que frecuentaba.
El alto costo del arriendo da cuenta de la falta de oportunidades para adquirir una vivienda. "Detectamos que hoy el subsidio que se entrega desde el gobierno, es una herramienta muy útil, pero no da abasto. Como Techo estamos centrándonos en crear propuestas y con esta información de la encuesta de antecedentes previos tratar de tener una base para poder levantar e impulsar esas propuestas en pro de diversificar las soluciones y frenar un poco la llegada de estas familias", explicó Claudio Lazo, director regional de Techo.
Respecto a la situación habitacional anterior a la llegada al campamento, los encuestados informaron que el 50,7 vivía en una vivienda, el 41,4 en una pieza de una vivienda, un 6,9 vivía en otro campamento y finalmente el 1,0 en situación de calle.
Respecto al costo del arriendo que pagaban antes de ingresar al campamento, este oscilaba en promedio los $126.801. En el estudio se conoció que un 97,5% no paga arriendo en campamento y quienes lo hacen, pagan en promedio $80.400 pesos.
Familias jóvenes
Ademas, la encuesta nos indica que la mayoría de las familias de campamento están integradas por jóvenes, ya que un - 34.0% de los jefes de hogar tiene entre 18 y 29 años.
En tanto, el 21.6% de los jefes de hogar tiene una edad que va entre los 30 y 39 años. "Tenemos familias jóvenes que no pueden pagar un arriendo por los altos costos o que por la incomodidad de vivir de allegados decidieron tomarse un terreno y vivir en un campamento", explicó Claudio Lazo, director regional de Techo en Atacama.
Como se enteró
Ante la pregunta de cómo se enteró del campamento, un 36,6% supo a través de un amigo o conocido, a un 28,3% un familiar le contó, un 22% se enteró por vecinos del sector y un 13,2% se informó de otra forma.
Cómo llegó
A la pregunta respecto a cómo llegó al campamento, un 33,2% manifestó que le cedieron un terreno,un 26,2% lo ocupó por cuenta propia, un 24,8% le ofrecieron un terreno, un 8,9% llegó a la vivienda de un familiar, un 5,4% le cedieron una vivienda y un 1,5% llegó de otra forma.
Expectativas
Consultados por sus expectativas en el ámbito habitacional, un 49,0% manifestó que estas eran quedarse en el campamento, le sigue un 44,6% que busca tener una vivienda definitiva.
En menor proporción, un 2,9% respondió que su expectativa es tener una vivienda definitiva en otra comuna, un 1,0% arrendar una vivienda en esta comuna, un 0,5% arrendar una casa en otra comuna, un 0,5% le gustaría volver a su país y un 1,5% de los encuestados no sabe o no responde.
MIGRANTES
El estudio reveló que en Atacama el 65% de las familias que viven en un campamento son chilenas, los extranjeros representan solo un 35% , de los cuales la mayoría, con un 21.4% son de nacionalidad boliviana, un 9,2% peruana, un 2,4% de Colombia, un 1,0% ecuatoriana y un 1,0% otra.
Tanto para chilenos como para extranjeros, las tres principales razones para vivir en un campamento son las mismas, al igual que el rango de edad de los jefes de hogar, siendo familias jóvenes con jefes de hogar que en su mayoría tienen entre los 18 y 29 años.
63% de los encuestados, señaló que ha mejorado su vida a como era antes de llegar al campamento, un 21,72% indica que se ha mantenido igual, un 11,31% considera que ha empeorado y un 3,40% no sabe.