Otorgan el Nobel a la "psicología de la economía" de Richard Thaler
COMPORTAMIENTO. El estadounidense incorporó la irracionalidad humana, los valores sociales y el autocontrol a las finanzas públicas y privadas. En 2016, el economista se refirió al problema de la desigualdad en Chile.
El Premio Nobel de Economía reconoció ayer el trabajo del estadounidense Richard H. Thaler (72), quien formuló la teoría de la economía del comportamiento, conocida popularmente como "la psicología" de esta área o "teoría del empujón". Ésta mezcla las decisiones financieras y políticas con los sentimientos de las personas.
El nuevo galardonado planteó que las resoluciones individuales son afectadas por la racionalidad limitada, las percepciones sobre lo que es justo y la falta de autocontrol.
El académico incorporó, en 1985, "supuestos psicológicamente realistas a los análisis de las decisiones que se toman en economía", indicó la Academia en un comunicado.
Al explorar las consecuencias de la racionalidad limitada, las preferencias sociales y la falta de autocontrol, "mostró cómo estas características humanas afectan sistemáticamente las decisiones individuales, así como los resultados del mercado", añadió la organización.
Uno de los miembros del Comité Nobel, Peter Gardenfors, subrayó que Thaler "hizo la economía más humana".
Sobre si actuará de forma "humana" con el dinero del premio (US$ 1,1 millones), el teórico afirmó con humor que "¡trataré de gastarlo lo más irracionalmente posible!".
Mercado más humano
La principal conclusión del trabajo de Thaler es que "los actores del mercado son humanos", dijo el autor a la Academia, tras saber que había obtenido el Nobel. "Los modelos económicos tienen que tenerlo en cuenta", agregó.
Thaler explicó a "The New York Times" que un problema importante en la economía tradicional es que los profesionales "descartan todos los factores que no afectarían el pensamiento racional de una persona. Se supone que estas cosas son irrelevantes. Pero desafortunadamente para la teoría, muchos factores supuestamente irrelevantes sí que importan".
El planteamiento del actual docente de la Universidad de Chicago es usado por políticos, y otros encargados de tomar decisiones, para diseñar medidas e instituciones que incrementan los beneficios para la sociedad, por lo que se ha aplicado en áreas como la administración pública, los planes de pensiones, la donación de órganos y la política medioambiental.
Las decisiones económicas, sostuvo el académico, son tomadas a menudo con un foco "estrecho", sin considerar todas las alternativas y consecuencias.
Un ejemplo es la teoría de la contabilidad mental de Thaler, que describe cómo se organizan y formulan las decisiones económicas, creando cuentas diferentes en la mente y decidiendo según su efecto sobre cada una de ellas y no sobre los activos totales: así ocurre cuando se divide el presupuesto familiar en distintos apartados (gastos, vacaciones).
Las experiencias previas y la percepción de propiedad intervienen también en la toma de decisiones.
Las personas normalmente quieren más dinero por vender algo suyo que lo que está dispuestos a pagar por el mismo objeto: es lo que Thaler llamó "efecto dotación" y que entronca con la aversión a la pérdida.
Valores sociales
El académico también probó que las preferencias sociales juegan un rol decisivo en el mercado, razón por la cual la gente está dispuesta a renunciar a beneficios materiales a cambio de lo que considera una distribución justa.
Ejemplo de ello son los boicots de consumidores a empresas que violan las normas consideradas justas.
Desigualdad en chile
Thaler conversó con El Mercurio sobre la desigualdad en Chile, durante el año pasado, afirmando que "el factor clave es si el aumento de la desigualdad se debe, por un lado, a la creciente disparidad en la productividad de los trabajadores, con la parte inferior estancada y la parte superior cada vez más productiva; o si hay otros factores institucionales que están creando estas disparidades, como podrían ser las recomendaciones de las consultoras contratadas por los ejecutivos para subir el salario de los ejecutivos. Los que están a la derecha tienden a pensar que todos los resultados se determinan por el talento y el trabajo duro, no dando suficiente peso a factores como la suerte".
"Se tiende a pensar que todos los resultados están determinados por el talento y el trabajo duro, no dando suficiente peso a factores como la suerte". "(Sobre si actuará de forma 'humana' con el dinero del premio, Thayer sostuvo que) ¡trataré de gastarlo lo más irracionalmente posible!"."