Una tormentosa madrugada de día jueves tuvo la suegra del senador Baldo Prokurica (RN), quien fue contactada a través de su teléfono de red fija por un desconocido que le aseguró tener secuestrados a su hija y al parlamentario. La mujer estuvo durante ocho horas al teléfono escuchando las amenazas de muerte que realizarían a sus familiares sino entregaba el dinero que le solicitaban.

Hecho

"La delincuencia en nuestro país no respeta nada. En esta oportunidad le tocó a un familiar mío, una persona que tiene 80 años y vive sola, por lo tanto fue así como a las una de la mañana por teléfono fijo se le transmitió el mensaje de que me tenían secuestrado a mi y a su hija, amenazaron con matarnos si cortaba el teléfono o si no daba una cantidad de recursos para pagar el rescate. Ella por la edad que tiene se asustó y creyó esto", comentó el senador.

En cuanto a la suma entregada por su suegra, señaló no querer "entrar en detalles porque es lo menos importante de esto, lo más importante es a lo que está expuesta la gente en Chile hoy día en que los delincuentes no respetan anda". Sin embargo, a través de medios nacionales se publicó que la suma ascendería a más de 10 millones de pesos.

El parlamentario agregó que bordeando las nueve de la mañana del día jueves fue contactado por su suegra mientras se encontraba en Diego de Almagro para consultar cómo se encontraba, en ese momento quedó al tanto de la situación y se dirigió de forma inmediata hasta Santiago, donde vive la madre de su esposa, para darle apoyo ante la dramática situación que vivió durante horas.

Análisis

A raíz de lo sucedido, Prokurica mencionó que esto "ocurre porque muchos de estos llamados se hacen desde la cárcel, los que reciben el rescate son de afuera, pero quienes hacen el llamado y tienen una capacidad impresionante para envolver a la gente y engañarlos se encuentran adentro de la cárcel. A mí me parece que se deberían instalar inhibidores de señal en los recintos para efecto de no utilizar los teléfonos".