Con la presencia de autoridades civiles y de las Fuerzas Armadas y de Orden, ayer se desarrolló el cambio de mando de la III Zona de Carabineros durante una sencilla, pero solemne ceremonia realizada en dependencias del cuartel Copayapu.

La actividad comenzó al mediodía y contó con las palabras del director nacional de personal, general inspector Julio Pineda Peña, quien actuó de interventor.

Fue así como en medio de variadas muestras de cariño, el traspaso fue ratificado a través de la firma de acta que establece que el general Jorge Bohle le entrega el mando al nuevo jefe de Zona de Carabineros "Atacama", general Mauro Victtoriano Krebs, quien proviene de la Escuela de Suboficiales.

Victtoriano comentó que el primer desafío es elaborar un diagnóstico de la zona, analizar los planes de gestión institucional y luego articular una agenda de trabajo.

"Si bien tengo un feedback de la realidad de la zona, la criminalidad y el comportamiento, etc, debo ser una persona profesional en dar una respuesta categórica sobre ello", dijo en relación al detalle de los desafíos.

Bohle

En tanto Jorge Bohle destacó su agradecimiento al Alto Mando de la institución, que -dijo- le brindó la oportunidad de trabajar en esta región y emprender múltiples acciones impulsadas por el Gobierno y Carabineros, en pro "del bienestar y desarrollo de la comunidad de Atacama".

Destacó que deja una zona tranquila, de parajes hermosos y donde fue muy bien acogido junto a su familia. Fueron tres años donde logró conocer cada "rincón de la región y estrechar fuertes vínculos con la comunidad, autoridades y organizaciones sociales".

Al partir, consideró oportuno agradecer el apoyo permanente de las autoridades por el trabajo conjunto y coordinado que se realizó bajo su mando y que -dijo- significó disminuir los delitos de mayor connotación social a nivel regional.

También, destacó a "los medios de comunicación el apoyo que siempre" le brindaron para difundir los mensajes y campañas de prevención.

De igual forma, agradeció a la comunidad y en especial a las organizaciones sociales y comunitarias, el permanente interés de participar en los programas y actividades impulsados por el Gobierno y la institución.