El Comité Ejecutivo de la World Rugby suspendió ayer a dos jugadores rusos de Rugby 7, Alexéi y Aliona Mijaltsov, por dar positivo por consumo de Meldonium, fármaco cardiovascular incluido el pasado 1 de enero en la lista de sustancias prohibidas.

Según el comunicado oficial recogido por medios locales, ambos deportistas, que son marido y mujer, han sido apartados provisionalmente de toda competición oficial, lo que les puede dejar fuera de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, donde el Rugby 7 fue incluido en el programa oficial.

La Federación de Rugby de Rusia había informado el viernes sobre dos positivos por Meldonium, aunque nunca llegó a informar sobre la identidad de los infractores.

"Recibir en vísperas de la Olimpiada la noticia de que te descalifican es muy duro. Lucharemos hasta el final para demostrar nuestra inocencia. A los Juegos hay que ir sea como sea", dijo Aliona Mijaltsova.

La atleta destacó que cuenta con el apoyo del entrenador y de sus compañeros. "Con toda seguridad, se está ejerciendo presión sobre los deportistas rusos. Debido a la política sufrimos los atletas", expresó.

El ministro de Deportes, Vitali Mutkó, aseguró que todas las federaciones, entrenadores y deportistas fueron informados en su momento sobre la inclusión del Meldonium en la lista de sustancias prohibidas.

"Si considerábamos que no es un estimulante, había que haber recurrido. Ahora, ya ha sido incluido (en la lista de sustancias dopantes). Todos han sido informados. Me causa sorpresa que algunos atletas lo sigan consumiendo", dijo.

El Gobierno ruso asumió ayer el control de la investigación sobre el escándalo. "Solicitaremos por los canales oficiales los resultados de las investigaciones científicas y los controles realizados por los colegas de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA)", anunció el viceministro Arkadi Dvorkovich.

Adelantó que las autoridades investigarán individualmente cada caso de positivo por meldonium para aclarar si se trata realmente de infracciones cometidas por los deportistas.

Faltan solo algunos meses para que Manuel Pellegrini deje la banca del Manchester City y los números actuales no están a su favor. El cuadro "ciudadano" empató ayer sin goles ante el Norwich y marcó lo que podría ser la distancia definitiva del título de la Premier League.

Pero el técnico chileno está lejos de rendirse, pese a que se encuentra nueve puntos lejos del puntero Leicester, que buscará asegurar su puesto mañana frente al Newcastle.

Si bien el ingeniero admitió que el empate frente al Norwich es un "paso atrás", insistió en que su equipo podría alcanzar el título que logró en la temporada 2013-14.

"Por supuesto que hemos perdido dos puntos importantes", sostuvo Pellegrini. "Mi cabeza siempre está pensando en el siguiente partido, y mientras tengamos opciones matemáticas debemos intentarlo".

El entrenador señaló que ahora "hay que pensar en el partido de la Champions League del martes y luego jugamos contra el Manchester United en casa. Trataremos de ganar los tres puntos y ver qué equipo tiene más puntos a final de temporada. Pero cuando quedan tan pocos partidos por jugar y pierdes puntos siempre es difícil".

Dos puntos menos

El Manchester City nuevamente mostró un juego de poco brillo y con claras faltas de precisión. Durante el primer tiempo, Sergio Agüero pudo haber cambiado el rumbo de su equipo, pero el meta "canario" John Ruddy fue diligente a la hora de mantener el arco en cero.

Lo mismo buscó Patrick Bamford al expirar la primera parte. Sin embargo, su balón y los intentos de romper el marcador terminaron en el travesaño.

El resto del partido fue de desempeño parejo e intentos de ataque por parte de la escuadra de celeste, aunque el desarrollo del encuentro ofreció más sopor que sorpresa y terminó con una igualdad sin goles.

Según Pellegrini, sus pupilos tuvieron el dominio de la pelota, pero no pudieron contra la defensa del Norwich. "Dominamos el partido desde el primer minuto hasta el final pero no fuimos claros en el último tercio donde necesitamos crear más espacio ante un equipo que defendió muy bien", justificó.

"Normalmente tenemos mucha posesión y creamos muchas oportunidades en el último tercio, pero hoy no pudimos. Jugamos con mucha concentración e intensidad, pero se necesita un poco más si se quieren marcar goles", agregó el ingeniero.

El martes, el City deberá medirse frente al Dinamo de Kiev como local por la Champions League. Mientras, el próximo domingo será el "derbi" de Manchester frente al United en el Etihad Stadium.

Claudio Bravo apenas necesitó una ocasión para resguardar el arco en el encuentro de ayer entre el Barcelona y el Getafe. Gran parte del trabajo se lo llevó la escuadra ofensiva de los catalanes, quienes golearon por 6-0 al elenco madrileño en una nueva fecha de la liga española.

Las intervenciones del capitán de la Roja fueron mínimas y recién a los 67 minutos recibió la pelota con las manos. Para Bravo, el resto del partido se fue entre juego con el pie y como espectador de las obras conjuntas entre Lionel Messi y sus compañeros.

El argentino no destacó precisamente por sus goles, sino por sus asistencias. Incluso tuvo una extraña acción a los siete minutos, cuando de cara al área envió un pase que no fue recibido por alguno de sus compañeros, sino por el pie de Juan Rodríguez. La pelota del centrocampista del Getafe terminó en arco propio y fue el primer tanto del Barça.

El autogol sería la antesala de una seguidilla de errores de los "azulones". Dos minutos después del primer tanto, la defensa del Getafe derribó a Neymar en el área y el árbitro cobró un penal. Messi fue el encargado de ejecutarlo, pero la suavidad de su tiro fue prevista por el meta Vicente Guaita.

Sin embargo, Messi se preocupó de opacar su error. La precisión de sus pases terminó en los goles de Munir El Haddad (18') y Neymar (31'). También burló la zaga del Getafe y a Guaita con un remate con efecto que alcanzó la red del rival con perfección. Era el 4-0 a los 39 minutos.

Durante el complemento, el Getafe aprovechó el descanso del Barcelona para intentar llegar al arco. Pero la defensiva y el mediocampo estuvieron prestos para robarles el balón. En medio de esta debacle, Neymar se matriculó con otro gol a los 50 minutos.

La diana más llamativa del partido y que a la larga cerró con broche de oro el desempeño del Barça fue a los 56 minutos, cuando Arda Turan envió una chilena al arco, inatajable para el portero Guaita.

Bravo vio acción a los 67 minutos con un remate de Moi Gómez que terminó en sus guantes. El relajo se apoderó del Camp Nou y el encuentro quedó sentenciado a los 92'.

Gracias a esta goleada, el Barcelona se acomodó en la cima de la Liga con 75 puntos. Su próximo partido será el domingo 20 frente al Villarreal, pero antes deberá defender su permanencia en la Champions League, el miércoles frente al Arsenal de Alexis Sánchez.