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Educación y Día del Profesor

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Las últimas semanas han girado en torno a los desafíos de la gratuidad; las anteriores, a la bonificación para el incentivo al retiro de los docentes. Los ámbitos referidos a la calidad de la educación siguen, en cambio, en un segundo plano, y con ellos, los referidos al rol social primario de los profesores. Éste se da por descontando como premisa para cualquier debate y, por lo mismo, no se asume en su real dimensión.

Las cifras lo demuestran, reflejando un círculo vicioso que no asoma solución: la docencia sigue encabezando el ranking de las profesiones peor remuneradas y los puntajes de corte para la admisión a carreras de pedagogía son aún bajos.

La brecha entre el discurso y la práctica se mantiene, y los actuales proyectos no alcanzan para generar un cambio real, que pasa por una transformación cultural a largo plazo que oriente la toma de decisiones políticas y económicas. Mientras éstas se siguen debatiendo a nivel legislativo, la diaria labor de aula de los profesores, así como el entusiasmo y los proyectos innovadores de nuestros actuales estudiantes de Pedagogía se quedan en segundo plano.

En estos espacios cotidianos, hay ideas realmente propositivas y diferentes, orientadas a lograr un verdadero mejoramiento en la formación al interior de las salas de clases. Requieren, no obstante, de voz, consideración, visibilidad y apoyo político y social para su promoción, con el fin de hacer de los profesores, agentes reales de un cambio concreto en favor de la calidad de la educación de nuestro país.


Playboy vencido

El anuncio que pone fin a los desnudos en esta icónica publicación es una decisión radical, no temeraria, como resultado de la ubicua presencia de Internet en nuestras vidas. El descenso en la circulación de la revista es otra de las causas.

Algunos datos estadísticos de la Web ilustran la increíble penetración de Internet en el antes lucrativo negocio de Playboy. El 12% de los sitios de Internet son pornográficos (aprox. 24 millones de sitios), cada segundo U$3.075.641 son gastados en pornografía online, 40 millones de norteamericanos son visitantes regulares de sitios pornográficos (uno de cada tres son mujeres), en Estados Unidos se transan U$2.84 billones de dólares anualmente en sitios pornográficos, 2.5 billones de e-mails enviados cada día son pornográficos, 25% de todas las búsquedas en Internet están relacionadas con pornografía (eso es 68 millones de búsquedas diarias) y el 35% de todas las descargas de Internet son pornográficas.

El lector ya no es el mismo de antes, no hay tabúes sexuales ni de género, no hay escándalos por una foto, por lo que el atractivo erótico de sus contenidos no representa un motivo de compra, hecho fundamental para sostener una cierta ventaja competitiva. Y los avisadores, ya lo sabemos, son la sangre de cualquier publicación.

Como producto la revista Playboy está en una peligrosa etapa de obsolescencia y decidieron que hay que rediseñarla. Pero una nueva revolución mediática se ve muy lejana a esa primera edición de los años 50 con Marilyn Monroe en su portada.


Nueva Constitución

Una cosa es que se prometió en la respectiva campaña política y otra muy diferente es que dada la situación país de hoy sea lo más adecuado y pertinente, poner a la Constitución como moneda de cambio para subir en las encuestas podría tener impensados resultados en el futuro cercano de nuestro Chile…y agregar una gran decepción en el presente de tantos compatriotas que aún no superan las secuelas de las recientes tragedias naturales…y que esperan tener una personal y merecida atención del estado y de las instituciones cuyos miembros ellos mismos eligen y mandatan…

La celebración del Día del Profesor es un buen motivo para mantener nuestra atención sobre la educación en el debate público, advirtiendo, sin embargo, que su enfoque sigue sin mirar a lo esencial.

María Gabriela Huidobro, decana Facultad de Educación Universidad Andrés Bello

Señor director:

Cuando en 1953 se editó el primer número de la revista, nadie pensó en el efecto que tendría esta publicación en la cultura occidental, sobre todo en los rígidos esquemas morales que caracterizaban a los norteamericanos. El cine, la prensa, la publicidad y la televisión reflejaban el estilo de vida de la llamada sociedad de consumo, en donde el sexo era uno de sus principales tabúes.

Ricardo Sierralta, docente de escuela de Publicidad Facultad de Comunicaciones, Universidad Central

Tomando en cuenta las frías cifras de las últimas encuestas con que la ciudadanía juzga la gestión gubernamental y la de los parlamentarios, explícita sus urgencias más inmediatas para enfrentar el día a día doméstico y exige radicales cambios en la manera de hacer política en nuestro Chile en la forma y en el fondo, es válido preguntarse si el tema constitucional estará entre sus prioridades.

Luis Soler