Nuestro continente es uno de los más envejecidos del mundo. De acuerdo a un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en 2006, había 50 millones de adultos mayores y se estima que en las Américas la cifra se duplicaría hacia 2025, y volvería a hacerlo para 2050, cuando el 25% de la población continental tendrá más de 60 años.

Actualmente hay más de 150 millones de personas mayores de 60 años en las Américas y se proyecta que para 2020 serán unos 200 millones. En América Latina y el Caribe, alrededor del 50% de los adultos mayores no cuentan con los recursos suficientes para poder costear sus diarias necesidades, las que se hacen específicas y complejas conforme pasan los años.

Chile no está ajeno a esta realidad. De hecho, después de Uruguay, es el país que más envejece en la zona, dado por el aumento en la esperanza de vida, que en estos momentos es de 76,5 años para los hombres y de 81,7 años para las mujeres.

De acuerdo a estas consideraciones, hoy es muy importante no sólo la expectativa de vida que tienen chilenos y chilenas al nacer, sino que las condiciones en las llegan y enfrentan la llamada "tercera edad". Hace un tiempo, por ejemplo, se identificaba el alto nivel de endeudamiento de muchos adultos mayores, que en parte importante corresponden a la salud.

Muchos de los problemas de salud de los más adultos se pueden evitar con un estilo de vida saludable y una alimentación adecuada.

Una alimentación sana y variada, hacer ejercicio y evitar una vida sedentaria, evitar hábitos como el abuso del alcohol y el consumo de tabaco, por ejemplo, son condiciones importantes para una vejez más saludable.

Pero tan importante como la alimentación y actividad física, están los comportamientos sociales. El formar redes, participar en actividades ya sea de su generación como intergeneracionales, también aportan a vivir no sólo más, sino que mejor.

Si hoy Chile es un país que envejece más, es ideal que también envejezca mejor.

El año 2015 se realizará en Chañaral el último Encuentro Internacional de Escritores en el Desierto de Atacama, evento de prestigio nacional e internacional que finalizará después de transcurridos 22 años, y que este año se denominará "Los escritores ayudan a la Biblioteca", debido a que este centro bibliográfico destruido por el reciente aluvión, coordinó y programó durante dos décadas todas las actividades de este cónclave poético latinoamericano.

Este sorprendente suceso lírico se convirtió en el único encuentro que más tiempo ha perdurado en la historia literaria de Chile, lo que fue posible con el aporte generoso y visión de la empresa minera Angloamerican, División Mantoverde, asimismo del apoyo del municipio local, círculo literario, diversas instituciones y personas que han valorado esta docta acción que ha proyectado a Chañaral y a Atacama en el mundo de las letras.

Este relevante evento culminará con el reconocimiento de importantes organismos culturales nacionales, tanto del sector público y privado, como de notables entidades del extranjero. Este año la Universidad de Chile destacó en el mapa cultural del país al Encuentro Internacional de Escritores de Chañaral, resaltándolo como uno de los más significativos. Por otra parte, la Pontificia Universidad Católica a través de su congreso "Chile, mira a sus poetas", que se realiza en cuatro grandes ciudades de Chile, incluyó en su programa a Chañaral, lo que constituye un notorio respaldo y valoración a esta gestión cultural, concretándose, además, una potente alianza.

En efecto, el congreso de la Universidad Católica de Chile permitirá que una dilecta embajada de escritores de estatura mundial llegue a Chañaral en la semana del 26 de octubre, del mismo modo, una delegación de poetas invitados en la jornada poética chañaralina participará en un recital en Santiago.

El mérito de este encuentro latinoamericano gestado en nuestra región, es la difusión de la literatura nortina, el estimulo al hábito lector, la proyección de nuestra tierra en el exterior y el fortalecimiento de una eficaz integración cultural americana. Todo esto desde un pequeño puerto donde sólo habitan 14 mil almas. Felicitaciones a sus nobles gestores que han cumplido una feliz etapa.

Omar Monroy Escritor