La valiente batalla de Magdalena Pino contra un tumor cerebral
solidaridad. La copiapina de 4 años enfrenta complicados momentos junto a su familia que se las ingenia para tener altas sumas de dinero y lograr su recuperación.
Tatiana Sepúlveda es parte de una de las tantas familias que se vio afectada por el aluvión del 25 de marzo y por las precipitaciones en la región de Atacama. Pero le llueve sobre mojado y ahora necesita ayuda para poder pagar los costos de la enfermedad de su pequeña hija Magdalena Pino de cuatro años recién cumplidos.
"Yo tuve que salir con mis dos hijos caminando por el lodo hasta la casa de una amiga que nos acogió por quince días, mientras mi marido de alguna manera limpiaba la casa. En esos días mi hija comenzó a presentar un caminar tambaleante discreto, pero extraño, se lo atribuimos al estrés de lo sucedido y cuando pudimos volver a casa ella no mejoró por lo que fuimos a su pediatra, todo esto dentro del caos de Copiapó, sin agua, sin alcantarillas las calles destrozadas etc. El pediatra nos derivó a un traumatólogo que nos derivó de urgencia a un neurólogo. El día 21 de abril se le realizó un scanner y el 22 de abril llegamos con mi marido a la consulta y el doctor nos dijo lo que ningún padre quisiera escuchar jamás: su hija tiene un tumor cerebral", cuenta Tatiana Sepúlveda.
La copiapina explica lo difícil que se volvió todo desde ese día. "Nunca más volví a mi casa. Fuimos derivadas de urgencia al hospital de Copiapó que en ese momento no contaba con agua ni ascensor tomado por los militares. Mientras mi marido gestionaba un avión ambulancia a Santiago y tomaba las cosas de la casa, lo que se podía, para partir con mi otro hijo vía terrestre".
Sepúlveda además relata que fueron trasladados al Hospital Clínico de la Universidad Católica por ser enfermad GES (Garantías Explícitas en Salud). "Estuvo veintidós días en la Unidad de Pacientes Críticos, una cirugía de catorce horas y un diagnóstico horrible, Méduloblastoma, tumor maligno de cerebelo, no pudieron sacar más del 80 por ciento del tumor por su ubicación por lo que se comenzó la quimioterapia, ahí mi hija tenía sólo tres años, tras la cirugía tuvo que aprender a hablar y caminar nuevamente".
QUIMIOTERAPIA
La pequeña Magdalena ya tuvo tres ciclos de quimioterapia de preparación y ahora vienen los ciclos de intensificación.
"Tuvimos que traer una droga de 20 millones de pesos llamada Tiotepa, que la Isapre no cubrió, medicamento que paga IVA y paga impuesto aduanero. Para aplicar este medicamento a mi hija se le debió realizar un rescate de células madre, procedimiento que no lo cubre el GES y que son aproximadamente 3 millones cada medicamento y que no aparece en la canasta del GES es pagado particular y obviamente son todos los procedimientos o medicamentos de última generación. Logramos que el importe lo hicieran pasando el costo a la cuenta final que abulta muchos millones y como si el sistema no fuera lo suficientemente injusto la Isapre rechaza mis licencias como si yo pudiera volver a Copiapó a trabajar, cuando mi hija pasa hospitalizada con transfusiones y tantos dolores más que le producen la quimioterapia", relata Sepúlveda.
La madre de Magdalena recalca que ellos son una familia clase media y se han transformado en los reyes del bingo, rifas y colectas porque ya no tienen más alternativa. Para las personas que quieran ayudar, pueden llamar a Tatiana Sepúlveda al teléfono 78977929.