El pasado 1 de junio la Contraloría General de la República oficializó el decreto que prohíbe a los municipios del país entregar permisos para la realización de bingos y facilitar dependencias para tales fines, autorizaciones que ahora entrega la Intendencia. La noticia causó disgusto entre ediles y ciudadanos de Atacama, quienes en la ocasión calificaron la iniciativa como un "disparate". Sin embargo, a esta medida se añadirían las fiscalizaciones del Servicio de Impuestos Internos (SII) relativa al cobro de tasaciones en kermeses y actividades en dependencias escolares, hecho que generó sorpresa en los apoderados de la región.
Descuento del 19% de la ganancia total y la emisión de boletas son parte de los requerimientos que hoy permitirían llevar a cabo la popular actividad realizada en los establecimientos educacionales, y que hasta la fecha no estarían de conocimiento por todos los centros de padres de la zona.
SII responde
Según indica el Código Tributario en el Título II correspondiente a las infracciones y sanciones de los contribuyentes y otros obligados, el no otorgar guías de despacho, facturas o boletas en los casos exigidos por la ley, y el fraccionamiento del monto de las ventas o de otras operaciones, implica multas que van del cincuenta al quinientos por ciento de los ingresos recaudados, con un mínimo de 2 unidades tributarias mensuales y un máximo de 40 unidades tributarias anuales.
Alejandro Cancino, jefe del Departamento de Administración del SII Atacama, señaló que todo tipo de entrada económica, sea por causa benéfica o por actividad lucrativa, está sujeta a la declaración tributaria. "Todo ingreso tiene que pagar el debido impuesto. La norma, que en este se refiere a la Ley de la Renta, exige que se cobre por concepto de ganancia en toda actividad comercial", explicó.
En este sentido, el funcionario agregó que de generarse este tipo de actividades, sin aviso previo a la entidad fiscalizadora, "lo que corresponde es ir a preguntar a los organizadores y pedirles que se acerquen el día hábil más próximo con todos los antecedentes para poder hacer la tasación respectiva de las ganancias".
apoderados molestos
Consultados por este motivo, apoderados de diversos establecimientos educacionales de la región, expresaron su desconcierto ante la medida que el año pasado motivó una multa de 800 mil pesos a un colegio en la comuna de Las Condes, en Santiago, por evasión de impuestos.
"Es algo muy injusto porque es un beneficio para los niños, no se lucra con esas actividades que, por lo demás, son una o dos veces al año", comentó Aurora Tapia, apoderada de la escuela Abraham Sepúlveda de Copiapó.
Juana Contreras, ex apoderada y presidenta del centro de apoderados de escuela La Estación en Paipote, agregó que siempre tuvo inconvenientes para conseguir los permisos correspondientes. "Siempre teníamos problemas para hacer kermesses, bingos, etc. Yo no sé qué está pasando hoy en día. Encuentro absurdo que le estén cobrando a la gente si esas actividades son sin ánimo de lucro. Uno no entiende porqué en vez de dar facilidades a la gente la perjudican", expresó.
Eduardo Chávez, apoderado de la escuela Aliro Lamas de Diego de Almagro, coincidió en la molestia transversal de sus pares. "Me parece mal porque uno trata de ayudar a los cursos para que reúnan los fondos que no tienen", aseguró. En cuanto a programas futuros de este tipo, Chávez añadió que "tendremos que hacer las consultas pertinentes para no tener problemas a futuro, porque hasta el momento desconocíamos completamente la información".