Con Claudio Bravo en la banca, Barcelona obtiene la Copa del Rey
españa. Pese a su ausencia, el chileno ganó su segundo título en el elenco culé.
El Barcelona de Claudio Bravo cumplió con la segunda parte de su cometido: alcanzar el triplete. Después de alzar la semana pasada el trofeo de la liga española, ahora fue el turno de la Copa del Rey.
La escuadra del chileno, que en esta ocasión estuvo de suplente, venció al Athletic Club de Bilbao por 3-1, en un partido marcado por un doblete de Lionel Messi y el examen previo a la final de la Champions League frente a la Juventus de Arturo Vidal.
Los dirigidos de Luis Enrique obtuvieron ayer el vigésimo séptimo título real de su historia, una vez más gracias a la actuación del tridente ofensivo de Messi, Neymar y Luis Suárez, este último visiblemente recuperado de sus molestias físicas.
Gracias a este triunfo, Bravo obtuvo el segundo título desde su llegada al Barcelona el año pasado.
Durante el encuentro en el Camp Nou, los "blaugranas" mantuvieron su superioridad frente a un Athletic sin mayores opciones, que sólo logró la diferencia en los últimos minutos del encuentro en un tiro que Ter Stegen no contuvo a tiempo.
Pero el protagonista de la jornada fue el goleador argentino. A los 20 minutos, Messi logró esquivar a cinco jugadores y encajar un balón en el primer palo para sorpresa de Herrerín y la zaga vasca.
A los 37 minutos y después de varios intentos fallidos, Neymar inscribió el segundo tanto a favor de los catalanes.
En el segundo tiempo, a los 74 minutos, nuevamente Messi superó la defensa rival gracias a un centro de Dani Alves. El partido finalizó sin mayores novedades.
El histórico y jugador saliente Xavi Hernández, en compañía de Andrés Iniesta, fueron los encargados de alzar la ansiada Copa del Rey. El resto de los jugadores, incluido Bravo, celebraron en los pastos del Camp Nou.
Ahora, el elenco "culé" deberá preparar la tercera parte de su cometido y el duelo más importante: la final de la Champions League ante una "Vecchia Signora" que también buscará el triplete en el Estadio Olímpico de Berlín el próximo sábado.
"Tenemos el triplete ahí, pero no mido la felicidad por los títulos. Es así de curioso esto del deporte de alta competición. Se mira el resultado y si es bueno, todo vale. Cuando uno llega a unos conclusiones, si el resultado es malo todo es un desastre, así se mide el fútbol profesional", expresó Luis Enrique tras el final de la Copa del Rey.