Secciones

un estudio explica el origen de las preferencias políticas

antropología. Las personas clasifican a otras de manera inconsciente por su opinión. Si bien no consideran la raza, sí toman en cuenta el género y la edad.
E-mail Compartir

Ser hincha, tener gustos musicales definidos y personajes de acción favoritos son elecciones que forman parte de las discusiones cotidianas. Estas diferencias de opinión rara vez terminan en peleas. Sin embargo, cuando se habla de partidos políticos, el desenlace del debate no siempre es pacífico.

Algunas personas evitan hablar sobre política durante una conversación, sobre todo cuando recién conocen a otros, ya que a menudo puede resultar incómodo y molesto para ambas partes.

Un estudio realizado por el Centro de Psicología Evolutiva de la Universidad de California intentó resolver y comprender cómo y por qué el cerebro humano suele categorizar los partidos políticos, bajo el nivel de conciencia.

formación de alianzas

A través de un comunicado institucional, los autores indicaron que las diferencias en las opiniones están relacionadas con la evolución de los circuitos cerebrales hacia la formación de alianzas y coaliciones.

"Cuando las personas expresan opiniones que reflejan las de los diferentes partidos políticos, automática y espontáneamente nuestra mente las asigna a coaliciones rivales", explicó David Pietraszewski, autor principal del estudio, publicado en la revista Cognition.

El especialista añadió que, en cuanto al cerebro, "la afiliación política es vista más como la pertenencia a una pandilla o camaradería que como una postura filosófica desapasionada".

factor "raza"

El estudio agrega que cuando el cerebro lo nota y rescata información sobre las alianzas políticas de una persona, comienza a ignorar otras claves posibles sobre quién está aliado con quién. Una de esas señales es la raza.

Según John Tooby, académico de antropología de la Universidad de California, "nuestros cerebros no están diseñados para atender la raza".

"En cambio, están diseñados para atender a la coalición, y la raza sólo se recoge mientras se predice quién está aliado con quién", agregó.

Esto explicaría por qué el Presidente estadounidense Barack Obama puede compartir una misma ideología -pertenece al Partido Demócrata- pese a su ascendencia afroamericana, ya que su padre es de Kenia.

Tooby señaló que los seres humanos provienen de una historia evolutiva que incluyó conflictos entre grupos o facciones. Las personas suelen armar alianzas de acuerdo a factores en común, tales como la edad y el tipo de actividades que realizan.

Leda Cosmides, también académica de la Universidad de California, complementó que cuando estos factores están ausentes, recién las personas empiezan a categorizar por raza. "Durante muchos años, los psicólogos intentaron muchas maneras diferentes de reducir la categorización racial. Ellos pensaron que podría ser irreversible. Pero la investigación previa mostró que hay un contexto social que disminuye fácil y de manera fiable la categorización racial", sostuvo la especialista.

conclusiones

Los autores recalcaron que, en una primera instancia, la pertenencia a una coalición no produce categorización en cuanto a género y edad. Este hecho sólo ocurre cuando las personas omiten sus preferencias políticas. De todos modos este ítem se mantuvo en alza.

En resumen, la razón por la que una conversación sobre partidos y contingencia puede resultar incómoda para algunas personas tiene un origen histórico y antropológico. Es porque el ser humano, desde nuestros antepasados hasta la actualidad, siempre tuvo la tendencia de generar alianzas y apuntar a otras como "rivales" si éstas no coinciden con sus puntos de vista.