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Chañaral: "Lo que producirá esta emergencia nos quita el sueño"

Médico en terreno. La comunidad y los profesionales de la salud están preocupados por las implicancias que podría tener a mediano y largo plazo el contacto con los residuos.
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P edro Bustamante es médico en el consultorio de Chañaral desde hace 2 años, el mismo recinto que fue arrasado por el barro y que actualmente está funcionando en un liceo. El doctor explicó que las consultas que aumentaron en los días posteriores al alud, son dos: dermatitis y gastroenteriris. Aunque lo que más preocupa al joven profesional tiene que ver con los efectos a mediano y largo plazo de esta emergencia sanitaria.

El médico aseguró que este es un tema "que le quita el sueño" a los profesionales que trabajan en salud. "No sabemos qué significará seguir viviendo y trabajando aquí a futuro. En esta región hay mayor riesgo de cáncer vesical, pulmonar y de la piel por los niveles de arsénico, y eso es lo mínimo que tienen estos relaves. Que la gente se esté exponiendo sin medidas específicamente desarrolladas contra esto, es muy peligroso. Además, es la primera vez que tenemos una emergencia de esta naturaleza, donde se mezcla el alud con la contaminación. Según mi punto de vista, las enfermedades las empezaremos a detectar a mediano y largo plazo".

Irse o no

Oscar Varas llegó a cursar primero básico a Chañaral, permaneciendo en esa comuna hasta cuarto medio, cuando se fue a Antofagasta a estudiar Kinesiología. Una vez egresado, decidió volver y acá formó su familia.

Durante estos caóticos días, Varas, atiende principalmente los problemas respiratorios que los niños sufren debido al polvo en suspensión.

El kinesiólogo también está convencido que el alud, mezclado a los relaves de la playa, es un peligro para la población. "Todos saben que los relaves de Codelco nos contaminaron la bahía durante décadas. Los metales pesados están en la playa y cuando hay corrientes de viento llegan a la ciudad provocando bronquitis a los chicos, enfermedades pulmonares, crisis asmáticas, etc. Ahora ya estamos viendo un aumento en la demanda y a mediano y largo plazo creemos que vamos a sufrir el doble de lo actual".

El kinesiólogo también se refirió a la desconfianza creciente entre los habitantes de la comuna ante los muestreos oficiales. "El tema de la contaminación siempre está presente. Hay estudios que ratifican la contaminación. Lo que nos urge es que las ONGs que están en la ciudad hagan muestreos y los den a conocer lo antes posible, porque no sacamos nada con esperar los resultados del nivel central, siempre van a encubrir el tema. Chañaral ha sido engañado por décadas".

Tanto Varas como el doctor Bustamante dicen que abandonar la ciudad en un tiempo más es una posibilidad que barajan seriamente. "Las condiciones no están dadas", sentenció el segundo.

La enfermera Sara Guerrero tiene una visión similar sobre los problemas a futuro de la comuna. "Si bien Chañaral ya tenía altos índices de contaminación, a futuro hay que poner ojo. Ahora por la emergencia la labor principal es resolver lo inmediato, pero hay que promover una prevención de enfermedades".

La enfermera y magister en Políticas Públicas de Salud, es originaria de Chañaral. Regresó a trabajar como voluntaria en la emergencia. Reconoce que la posibilidad de irse es una discusión frecuente en varias familias desde antes del alud. "Así como a veces se piensa en abandonar Chañaral, la gente quiere el lugar".

Comunidad

Omar Monroy, presidente de la Corporación de Desarrollo de la comuna esta semana contactó a profesionales de la Universidad Católica para que tomen muestras de agua y tierra, debido a que, al igual que el kinesiólogo Oscar Varas, no tiene plena confianza en los resultados oficiales.

Junto a la corporación que preside, lanzaron ayer una declaración pública en que solicitan se tomen medidas adecuadas para proteger la salud de la población. "Sin ánimo de criticar o alarmar, sino con el afán propositivo de colaborar para encontrar soluciones, es que hacemos un llamado a las autoridades del país para que entreguen un pronto resultado del análisis de relaves presentes en los terrenos y aires de la bahía y no sólo de aguas de mar y del suelo en las calles", dice el documento.

Monroy explicó que incluso se formaron socavones en el sector costero en que quedaron a la vista las acumulaciones de metales pesados. El hombre agregó que "nos preocupa está mezcla que se formó de los relaves que estaban en la playa, con el barro y los desechos de las alcantarillas".

Por su parte, el alcalde de Chañaral Héctor Volta aseguró que ya se solicitó a la ministra de Salud que se transparentara si desde Pampa Austral (Codelco) se vertieron relaves hasta Chañaral -lo cual es otra de las dudas permanentes en la comunidad- y que se realizaran muestreos en la playa. "Ahora lo haremos por escrito, porque sólo se lo pedí en una conversación oral cuando vino a la comuna. Si la ministra no me contesta, se lo enviaré a la presidenta", sostuvo.

Renace la esperanza con las primeras viviendas de emergencia

nantoco. Fueron levantadas 30 de 120 casas de emergencia que tendrán electricidad y servicios higiénicos.
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En sólo cuatro días se levantaron las primeras 30 viviendas que vienen a entregar una solución de emergencia para las familias azotadas por la enorme tormenta que se llevó sus hogares. Este es el inicio de todo un campamento que se instalará en el sector de Nantoco, en un terreno de cinco hectáreas que fue entregado en comodato por dos años por la minera Candelaria, período en el que convivirán 120 familias mientras construyen las que serán sus viviendas definitivas.

Para esta primera etapa se necesitó la colaboración de 210 jóvenes, quienes se dividieron en cuadrillas de cinco, todos voluntarios de la ONG Techo, los que trabajaron cuatro días para instalar cada una de estas casas hechas a base del material Smart Panel para los albergados.

Así lo explicó la directora social de Techo, Valentina Latorre, "como adelantó la Presidenta Bachelet, estas viviendas y a diferencia de las que armamos en otros sectores del país, cuentan con la oportunidad de agregar electricidad y se pueden ampliar. Sin embargo, necesitamos más voluntarios para las próximas semanas".

El alcalde de Tierra Amarilla, Osvaldo Delgado, se dirigió hasta el lugar para supervisar la construcción para entregar un mensaje a toda su comunidad afectada.

"Estas no son las obras definitivas, agradecemos la prisa con la que respondió el Gobierno en la instalación de estas casas, pero queremos que nuestros pobladores tengan dignidad así que no entregaremos ninguna hasta que estas cuenten con electricidad y servicios higiénicos que brinden calidad de vida a cada familia. Hoy fueron instaladas 30 soluciones, pero serán 120 las dispuestas en este sector y 130 en Los Loros, trataremos también de equiparlas con camas y algunos enseres básico gracias a la donación de particulares", dijo el edil.

Pobladores

Posterior a esto, nos dirigimos hasta el sector que fue arrasada por el río. Allí nos encontramos con algunos pobladores que quedaron en la calle, quienes cuentan con los requisitos para ser acreedores de un hogar provisorio, pero ellos dicen que no están conformes, puesto que de la propia Presidenta Bachelet escucharon que serían sacados de sus terrenos y reubicados en otro punto de la misma comuna.

"No me quiero ir, sé que el Gobierno no me entregará un terreno con las mismas dimensiones del que tengo ahora", dijo la presidenta de la Junta de Vecinos El Chañar, Marisol Barrios.

Una postura similar tienen los padres de Julia Gordillo, quienes llevan varios días en una carpa pernoctando y cuidando el espacio donde solía estar su casa, pero que ahora es sólo un terreno de barro que no quieren abandonar.

"Mis papás están mayores, tienen miedo que si se van a alguno de los campamentos les quiten su terreno, que para ellos es un símbolo de años de esfuerzo", dijo la pobladora.

Emoción

En un real contraste encontramos a Luis Humberto Rojas, quien junto a su esposa Rosario no ocultan su emoción de ser beneficiarios con estas viviendas, quizás los 24 metros cuadrados son estrechos para este matrimonio que convivía junto a la familia de su hijo, quienes ya son un núcleo de cuatro, pero que seguramente también se les entregará una vivienda de emergencia. Por eso están conformes.

"Uno tiene que estar agradecido de Dios por seguir vivos, lo que Él nos entregué más adelante es una bendición y aunque sea pequeño, para nosotros es un recomenzar, otra oportunidad", dijo Rosario.