Consejos y medidas para seguir enfrentando esta catástrofe
AYUDA. Son diversas las recomendaciones que entregan los profesionales para superar el estrés luego de los aluviones que afectaron la región.
Julia Ortiz, la directora de la escuela de Salud de AIEP de la Universidad Andrés Bello, advirtió que es normal que en estas situaciones las personas comiencen a desarrollar cuadros de estrés, ansiedad o depresión. No es fácil lidiar con problemas que traspasan nuestras decisiones y acciones, por lo que la especialista da ciertos consejos para no perder la cabeza.
¿Qué hacer?
Haz un alto en tus actividades. Siéntate, respira y concéntrate sólo en la respiración profunda y mientras piensas frases inspiradoras y esperanzadoras.
Mentaliza positivamente los pasos a seguir y ponte metas pequeñas a corto plazo para que sean fáciles de manejar. Es recomendable pensar el día a día más que pensar en qué será de uno el resto del año. Verás que así te sentirás más tranquilo al poder realizar lo que te propones poco a poco.
Para ir recobrando de manera paulatina la tranquilidad, también se aconseja vivir el duelo de las pérdidas y no reprimir los sentimientos. Es bueno sacar las emociones llorando, hablando con alguien cercano y recordando momentos felices que viviste con los que ya no nos acompañan. Piensa que tu fuerza de ahora en adelante estará acompañada de la energía de tu ser querido.
Intenta mantener una alimentación saludable. Mezcla frutas y verduras que te darán vitaminas para recobrar el buen ánimo.
Recupera las horas de sueño. Es importante que tu cabeza esté en un estado de claridad para pensar tus metas y decisiones con más calma y precisión. El cansancio corporal mezclado con el dolor emocional hará que tu mente se sienta nublada, por eso dormir hará que recuperes fuerzas.
OCUPAR LA MENTE
Realiza ejercicios de relajación. Por ejemplo, tejer, bordar, trotar o elongar pueden ser de ayuda despejar tu mente en otras actividades. También leer, escuchar música o los juegos de mesa son recomendables. Además, buscar apoyo en grupos de ayuda local o en especialistas de salud mental disponibles.