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Fiesta de nuestra señora de la candelaria, comienza la celebración

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Ya está todo preparado para dar comienzo a la fiesta de Nuestra Señora de La Candelaria, principal festividad religiosa de la diócesis de Copiapó.

Las celebraciones comienzan mañana con las misas a las 6, 7, 8 y 9 de la mañana al interior del templo. En la tarde, a las 19 horas empieza la novena y a las 20 horas la misa. Este esquema se mantiene a lo largo de los días de fiesta. Se destacan algunas celebraciones especiales, como el traslado del Cristo, procesión en que la figura de Cristo crucificado que habitualmente se ubica a un costado del patio, es trasladado hasta el altar de piedra, lo que se realizará el primer día, jueves 29 a las 21.30 horas.

El domingo 31 de enero a las 21.30 horas tendrá lugar la tradicional procesión de las candelas, la vigilia en espera del día de la fiesta, y "el alba", homenaje de los cantores y bailes religiosos, toda la noche hasta el día siguiente.

La bendición de los enfermos se celebrará el miércoles 4 a las 17 horas. Allí, las personas con alguna enfermedad, discapacidad, o muy mayores, reciben la unción de los enfermos. Para esto se pide a la comunidad inscribir a sus enfermos, y a quienes tengan vehículo, inscribirlos para ofrecer traslado a quienes no se pueden desplazar por sí mismos hasta el Santuario.

El sábado 7 a las 21.30 horas será el Encuentro con los trabajadores, donde además se recuerda a los mineros fallecidos en accidentes de trabajo. El domingo 8 a las 10 horas se celebrará la Misa Solemne, presidida por primera vez por el nuevo Obispo, Monseñor Celestino Aós Braco. Finalmente, la procesión de los bailes comenzará a las 17 horas.

El último día, lunes 6 de enero, se mantienen las celebraciones a las 6, 7 y 8 de la mañana. Se celebrará la misa por los chinos difuntos a las 11 de la mañana, y la procesión de despedida con los bailes que permanezcan en el Santuario comenzará a las 17 horas.

HISTORIA

La historia de este santuario comienza en 1780, cuando Mariano Caro Inca, vecino del pueblo de San Fernando regresaba de la cordillera cuando una tormenta lo obligó a refugiarse en unos peñascales. Estaba a la orilla del salar de Maricunga y allí encontró una piedra de unos 14 centímetros de alto con la imagen de la Virgen con el Niño Jesús en brazos grabada. Caro Inca, lleno de respetuoso fervor, tomó la imagen en sus manos, llamó a sus compañeros para participarles del hallazgo y luego de colocarla cuidadosamente en la alforja de su mulo, siguieron el camino.

El 2 de febrero de 1780, día consagrado a la fiesta de la presentación del Niño Dios al Templo y de la Purificación de la Virgen, día en que la Iglesia bendice las candelas en honor de Cristo, Luz del Mundo, llegó Caro a la hijuela que tenía en San Fernando. Mientras él arreglaba el altar para venerar la imagen con el nombre de Nuestra Señora de la Candelaria, los arrieros divulgaron la noticia del encuentro.

Todos los años al acercarse esta fecha, las familias vecinas del pueblo se reunían para rezar la novena a la Virgen. A la muerte de Mariano Caro, su esposa Josefa Guzmán continuó aquella tradición y levantó un pequeño oratorio en cumplimiento del testamento de su marido.

En el año 1800, veinte años después del hallazgo de la imagen, el cura de la villa de Copiapó, padre Domingo Carmona, hizo levantar una capilla a la Virgen cerca del primitivo oratorio, estos terrenos los había dejado doña Josefa, quien había fallecido.

En el año 1910 se dio comienzo a la construcción de un nuevo edificio en los terrenos adyacentes a los de la primera capilla que habían sido comprados a la familia Caro por don Bruno Sergio Pizarro, parlamentario de la zona, y que los donó para que allí se levantara el santuario de la Candelaria. La primera piedra fue colocada por el cura de Copiapó, padre Pedro Thelis, que dio comienzo a los trabajos.