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"Ganar un Amigo", el cortometraje que trata el bullying y que se grabó en la escuela El Palomar

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Para sensibilizar a la comunidad escolar y a las familias en general, se filtraron las ideas y Rodrigo Gijón actor de connotación nacional, transcribió al papel el guión de este cortometraje dirigido por el cineasta copiapino Octavio Meneses.

La comunidad está involucrada al 100% con las expectativas de verse en una pantalla grande y los actores debutantes de este arte dramático se motivan con la idea de participar en este desafío, la de proyectar el abuso y la fuerza de la amistad que rompe los límites y barreras.

El equipo se enfocó en plasmar un tema real y doloroso para muchos jóvenes. Se trata de Simón, el niño de 14 años víctima de bullying en su escuela, acosado por una infantil pandilla liderada por Byron, el bravucón del curso.

Simón, agobiado y debido a su timidez no se atreverá a contar su difícil situación para pedir ayuda y descubrirá que Byron, su agresor, vive en precarias condiciones económicas y que lamentablemente es víctima de la violencia intrafamiliar en su casa. Ambos niños guardarán el doloroso secreto. Simón participará de una importante festividad en su escuela, suceso que sellará la amistad de los niños y nos hará entender la fuerza transformadora del cariño y el amor.

Los protagonistas

Jorge Alzamora, estudiante del Colegio El Palomar, interpreta a Byron, el niño agresor del curso. "Antes he actuado, pero nunca frente a cámaras. Además conocí mucha gente y aprendí bastante, el interactuar con Catalina Saavedra y Rodrigo Gijón que interpretaron a mis padres me gustó mucho, son muy simpáticos y es diferente verlos detrás de la pantalla a estar con ellos. Además quiero decir que el tema que se trató en el cortometraje es súper relevante, el bullying es algo que se vive en los colegios y el personaje que hice, que era el agresor, lo he visto en el entorno, es algo real y lamentablemente sucede".

Jorge recuerda que dentro de la grabación causaba risas los olvidos de guión, "o se cruzaba gente en el cuadro de la cámara, a veces habían ataques de risa y eso creaba un ambiente entretenido, era parte de la experiencia".

Sobre su personaje y el análisis que hace de él Alzamora señala que "solo ven en el personaje de Byron, sus defectos y como es, pero no se dan cuenta del porqué. Siempre hay algo que lleva a que en este caso Byron actuara así, y era su familia disfuncional. Los maltratos y agresiones que habían en su entorno familiar".

Octavio Meneses director del cortometraje planteó el tema del bullying y la importancia de tratarlo y llevarlo al cine. "Después de observar la masiva y preocupante información que circula en las redes sociales de Internet, como Facebook, que nos muestra agresivos actos de bullying y violencia escolar que se suscita entre los jóvenes estudiantes, y sumado a esto el aumento de inmigrantes que se están radicando en nuestra región, donde uno puede ver a sus familias en las calles de la ciudad, caminando felices en la plaza con sus hermosos niños. Tomé la decisión de juntar estas dos realidades, en una historia de ficción y realizar un cortometraje. Con el cortometraje "Ganar un Amigo", busco desde lo audiovisual aportar a prevenir el flagelo del bullying y la violencia escolar, contando una historia local que se acerca mucho a nuestra realidad atacameña, donde el mensaje central es un llamado a los padres y adultos a escuchar a su hijos, a entregarles atención y por sobre todo amor".

Uberlinda Gutiérrez, directora de la Escuela El Palomar, explicó que la iniciativa nació el establecimiento donde se realizó el rodaje, una unión que partió cuando el director del cortometraje se acercó al colegio. "Yo participé como apoderada, hay una escena en la que me enfrento con Alejandro Goic. Es una escena muy fuerte y potente, además de este debut en la actuación presté apoyo desde la mirada pedagógica, lo que es importante para llevar a cabo un cortometraje que aborda el tema del bullying. Entiendo que es una película que puede resultar chocante, pero debe tener conflictos para desarrollar una historia, y es una historia que tiene un trasfondo muy interesante", señaló la directora, quien agregó que la producción generará un impacto en la comunidad copiapina.

Más de 4.000 juguetes fueron retenidos tras fiscalización en Copiapó

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Los fiscalizadores de la seremi de Salud, realizan inspecciones a grandes tiendas y locales en general de venta de juguetes, labor que se realiza durante todo el año dentro de un programa de fiscalizaciones y que se intensifica en celebraciones como el Día del Niño y Navidad.

En esta oportunidad se pudo constatar que más de 4.000 juguetes comercializados en Copiapó no contaban con sus certificados, exigidos por el decreto 114, el cual acredita la inocuidad de los productos de uso infantil. Tras ello, quedaron retenidos, con prohibición de venta. Esta medida, será absuelta, cuando los afectados, entregue los certificados exigidos por ley.

La seremi de Salud, Brunilda González, realizó un llamado a los padres al momento de comprar, para que adquieran juguetes en lugares establecidos y pongan atención en la rotulación de los productos.

"Nuestros equipos salen a fiscalizar que los juguetes cumplan con la normativa, especialmente con las indicaciones de riesgo que los juguetes puedan tener para los menores, pero lo más importante es que los padres y consumidores tienen que preocuparse de verificar que los etiquetados que nosotros estamos exigiendo en locales de venta cumplan, es decir, aparezca la edad a la cual corresponde cada tipo de juguete, que especifique si es un elemento tóxico y además es fundamental que diga si es de riesgo o tiene que estar bajo la supervisión de un adulto y que además esté en español".

Recomendaciones generales

Los aspectos controlados se refieren al rotulado de los juguetes que deben contener al menos la siguiente información obligatoria: Nombre o razón social y domicilio del productor o responsable de la fabricación o importación del juguete. Nombre genérico del producto, cuando este no sea plenamente identificable a simple vista por el consumidor. País de origen del producto. Leyenda o símbolo que indique la edad del usuario recomendada por el fabricante y la indicación de "Advertencia: Se debe utilizar bajo la vigilancia de un adulto".

Aquellos juguetes que, debido a sus funciones, dimensiones, características, propiedades u otros motivos, son claramente inadecuados y podrían resultar peligrosos para niños menores de tres años, deben llevar la indicación: "Advertencia, no apropiado para niños menores de 3 años".