Los yihadistas de Estado Islámico (EI) siguieron avanzando ayer sobre la ciudad siria de Kobane y se encuentran a dos kilómetros o menos de distancia, por lo que las unidades kurdas se preparan para enfrentamientos en las calles de la urbe, informó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos.
Estados Unidos y sus aliados árabes volvieron a bombardear hoy posiciones de la milicia cerca de la localidad en el norte de Siria. La coalición internacional atacó a combatientes de EI al sur y este de la ciudad, informó la web kurda Welati.
Los combatientes kurdos tuvieron que retirarse de zonas al oeste de la ciudad, donde la situación es "muy peligrosa", señaló a dpa el director del Observatorio, Rami Abdel Rahman.
Los enfrentamientos sobre el terreno se intensificaron esta mañana. Según el jefe del autonombrado gobierno regional, Anwar Muslim, entre 5.000 y 6.000 kurdos hacen frente a las fuerzas del EI. También siguen en la ciudad varios miles de civiles, aunque hoy había informaciones sobre un nuevo éxodo de refugiados.
El Parlamento turco votará hoy un permiso solicitado por el gobierno que lo autorizará a actuar militarmente en Siria e Irak. Ankara ha sido acusado de no haberse implicado lo suficiente en la lucha contra el EI.
AMENAZAS
En una declaración hecha pública por el partido pro-kurdo HDP, Öcalan llama a proteger la localidad y dice que una matanza en Kobane acabaría con el proceso de paz con Ankara. El PKK acusa a Turquía de apoyar al EI.
Estados Unidos y cinco aliados árabes iniciaron sus bombardeos contra el EI en Siria la semana pasada. Su objetivo es destruir a la milicia terrorista y dar formación a los rebeldes sirios moderados que combaten tanto al EI como al régimen de Damasco. El enviado especial estadounidense para la alianza, John Allen, dijo a la emisora CNN que el entrenamiento a los rebeldes podría "durar años".