El Gobierno llamó ayer a las policías reforzar los trabajos de prevención e inteligencia a raíz de los recientes atentados y la quema de cinco vehículos en distintos puntos de la capital y del resto del país.
Así lo anunció el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, al término de una reunión extraordinaria del comité especial de seguridad a la que asistieron los directores de Carabineros, la Policía de Investigaciones (PDI) y la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI).
'Le he pedido a las policías aumentar el trabajo preventivo de forma importante y todo lo que tenga que ver con el trabajo de inteligencia para que el Ministerio Público pueda contar con todos los recursos necesarios para llevar adelante una investigación exitosa', dijo Peñailillo.
En la reunión participó el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, el general director de Carabineros, Gustavo González, el director de la PDI, Marcos Vásquez, y la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI).
La cita ocurre luego de los últimos atentados ocurridos en el Metro, la iglesia Santa Ana, un jardín infantil en el barrio República y el incendio de cinco vehículos en San Miguel y en Viña del Mar.
El jefe de gabinete añadió que al Gobierno 'no le va a temblar la mano' y recurrirá a 'todos los instrumentos que estén a su alcance' para poner a los responsables de las explosiones en manos de la justicia.
La seguidilla de atentados explosivos e incendiarios que se han registrado estos últimos días estarían ligados a grupos anarquistas.
El 13 de julio, un explosivo detonó en un vagón vacío del Metro y el Ejecutivo invocó la ley antiterrorista para investigar el suceso.
El martes se registraron dos nuevos atentados en Santiago, un atentado cometido 'en solidaridad' con dos anarquistas que están detenidos en España, acusados de detonar bombas en iglesias católicas.
Más tarde, expertos en explosivos de Carabineros desactivaron una bomba junto a un jardín infantil en el centro de Santiago, que fue encontrada por transeúntes.
Y la madrugada de ayer cuatro automóviles fueron quemados en San Miguel, donde los responsables de los hechos dejaron panfletos que aludían a casos de anarquistas detenidos en Chile y el extranjero. Un vehículo también fue quemado en Viña del Mar.
El general director de Carabineros, Gustavo González, anunció que su institución reforzará los servicios investigativos y las labores preventivas.
Respecto de una posible reactivación de los grupos anarquistas que fueron relacionados al 'Caso bombas', el general González rechazó un resurgimiento y sostuvo que 'tenemos sospechas de algunos grupos, los cuales indagamos y podrían estar organizados'.
críticas opositoras
Desde la oposición, el senador de la UDI, Víctor Pérez, dijo que el Gobierno tiene que demostrar que puede 'combatir a los terroristas y a los anarquistas'. El parlamentario agregó que el Ejecutivo 'tiene que adoptar una posición decidida de apoyo a las policías y al Ministerio Público'.
El diputado (UDI) y miembro de la Comisión de Seguridad Ciudadana y Drogas, Arturo Squella, recalcó que 'el Gobierno sigue bajándole el perfil a que efectivamente tenemos terrorismo en Chile'.
En la Nueva Mayoría, el senador de la Democracia Cristiana, Patricio Walker, dijo que estos hechos 'están generando temor en la población, entonces es procedente aplicar la ley anti terrorista'. El parlamentario apoyó la labor que ha desplegado en el tema el ministro Peñailillo.