El debate se ha abierto en torno a las profundas transformaciones que propone nuestro gobierno, lo que sin duda nos parece positivo en un momento y en un gobierno que promueve ante todo la democracia.Es una mirada que pretende definir el futuro de nuestro país con plena conciencia de que a través de estas grandes y profundas transformaciones forjaremos ojalá el país que queremos ver en 20 años y que vamos a heredar a nuevas generaciones.
Se trata de ser proactivos, de ser capaces de anticiparse y evitar por ejemplo que una constitución con ideas del pasado mandate nuestras acciones en el futuro, que sigamos creciendo como país y tengamos un sistema educacional de mercado y de pésima calidad y que por si fuera poco sigamos permitiendo que la desigualdad suba como la espuma.
Las transformaciones que hoy se proponen son ante todo una invitación a cambiar el rumbo sin perder de vista los principales objetivos. Habrá quienes opinen distinto, habrá quienes estén de acuerdo, algunos aportarán y mejorarán las ideas propuestas y otros tantos trabajarán para que las acciones se cumplan, ese es el país que queremos construir, un país diverso que discute, que evalúa, que se equivoca también, pero que no pierde de vista los objetivos y trabaja en conjunto para cumplirlos sin importar ideologías políticas, profesiones, orientaciones sociales, sexuales, sin importar las diferencias de ningún tipo.
Hemos recorrido nuestra extensa región de Atacama y pudimos palpar la desigualdad y visto de cerca lo urgente que es una reforma educacional que entregue mas oportunidades y calidad a nuestros niños. Sabemos que el gran culpable es el centralismo. Sí, en regiones también somos centralistas y giramos en torno a una capital que parece dejar en el olvido las necesidades de las comunas de la cordillera y ni hablar del borde costero. Nos hemos propuesto entonces gobernar desde las comunas, conocer realmente las necesidades y particularidades de cada localidad dejando algo de lado las estadísticas que poco dicen de las personas y nos hemos concentrado en promover los cambios, cambiando la forma, gobernando con las personas desde sus hogares, pero sobre todo buscando que las respuestas o soluciones que entreguemos consideren por sobre todo particularidades y que hay necesidades que no pueden seguir esperando.