El seremi de Minería de Atacama mantendrá el trabajo con vecinos de Tierra Amarilla, que el año pasado denunciaron una serie de inquietudes.
Pasivos ambientales, tronaduras y hundimientos son, entre otras, las principales preocupaciones de los pobladores de comunas cercanas a faenas mineras.
Las críticas o análisis a priori caricaturizados por conceptos como las "retroexcavadoras" o "aplanadoras", hablan de realidades que se encuentran directamente relacionadas con un momento muy particular en la política nacional: un cambio de administración que dejó interrogantes respecto a qué continuar y qué dejar de lado, respecto al Gobierno anterior, que encabezado por Sebastián Piñera, tiene distancia lógicas y evidentes con lo que hoy propone la Nueva Mayoría, que lidera la Presidenta Michelle Bachelet.
Es precisamente este panorama con el que se encontró uno de los trabajos más interesantes realizados por la administración anterior en Atacama, cuando el Ministerio de Minería se propuso hacerse cargo de la relación que existía entre la minería, particularmente la gran y la pequeña industria, y las comunidades cercanas o adyacentes a las faenas.
La remoción del relave que se encontraba en El Palomar, en el sector donde hoy se ubica el Skatepark, se transformó en la primera solución concreta que se da en la región a un pasivo ambiental minero por parte del Estado, emplazado junto a un centro urbano.
Esto se suma a la labor iniciada a fines del año pasado con los vecinos de Tierra Amarilla para poder solucionar una serie de inquietudes relacionadas con los hundimientos, los efectos de las tronaduras y los temores de los vecinos respecto a eventuales galerías y túneles bajo el poblado. En este caso, el trabajo consiste en establecer estudios concluyentes respecto a estas dudas que tiene la comunidad, para que de una vez por todas exista certeza respecto a estas interrogantes que históricamente han manifestado los tierramarillanos.
Lo interesante en este caso es que el nuevo seremi de Minería, Reinaldo Leiva, lejos de hacer un lado este trabajo o descartar los avances que ya se han hecho, se manifestó dispuesto a continuar con las acciones tendientes a mejora la calidad de vida de los vecinos cuyas vidas se han desarrollado y se siguen desarrollando junto a las faenas mineras, particularmente en comunas como Copiapó y Tierra Amarilla.