El trabajo que efectúan el sector público, el privado y los vecinos en torno a la relación entre la minería y la comunidad, tiene alcances históricos.
Por primera vez los vecinos de la comuna de la calle larga tendrán la oportunidad de conocer detalles de la actividad minera que antes les eran desconocidos, y que les afectaban.
Chile está lleno de ejemplos de problemas sin solución, de mesas de trabajo que no completan objetivo alguno, de sumarios archivados o cuyos resultados no se conocen, y de diagnósticos que se quedan en eso, sólo en el reconocimiento de una dificultad, pero sin que se concreten los necesarios avances para superarla. Es en este contexto donde nuevamente destacan los resultados que hasta ahora tiene el trabajo que realiza la seremi de Minería de Atacama, junto a empresas mineras y los vecinos de Tierra Amarilla, con la idea de por fin aclarar la razón de los hundimientos que registra la comuna, algunos de los cuales son de grandes dimensiones, junto con despejar las dudas vecinales respecto a eventuales labores extractivas debajo del poblado .
El primer diagnóstico identifica específicamente a la actividad minera como parte responsable de los socavones más importantes, los que responden a la lógica de la explotación en la zona. Sin embargo, existen otros puntos en la ciudad, donde vecinos denuncian que se registran hundimientos que ellos, atribuyen a la misma industria.
Son estas dudas las que hoy se buscan despejar, mediante un trabajo que cumple plazos y etapas. Definido como un paso histórico, el esfuerzo conjunto del sector público, el privado y los vecinos ha permitido concretar una segunda reunión en donde las empresas mineras de la comuna mantienen su compromiso de realizar sus tareas de manera amigable con la comunidad, con mayor transparencia y con la voluntad de despejar mitos. Hoy, la Universidad de Atacama aparece como el vínculo que permitirá los acercamientos entre la comunidad y las empresas, a través de inspecciones y vigilancia que serán de pleno conocimiento vecinal y de las cuales la casa de estudios será garante. En las conversaciones se ha adelantado que los pobladores podrán saber las ubicaciones y características de las faenas, las razones de los socavones, horarios y características de las tronaduras, entre otros detalles antes desconocidos.
Hasta ahora, efectivamente se puede decir que en el lugar se cultiva una relación histórica entre los vecinos y la industria.