Carlos Larraín reconoce que cita de RN "no va a ser una taza de leche"
En Renovación Nacional (RN) se alistan para reunirse el fin de semana en un consejo directivo, donde los dirigentes analizarán la crisis en que se sumieron tras la derrota presidencial y las renuncias de al menos seis altos representantes.
"No va a ser una taza de leche", reconoció ayer el presidente de la colectividad, Carlos Larraín, a radio Cooperativa.
Varios de los automarginados han señalado que una postura "conservadora" se ha tornado mayoritaria en el partido, lo que no le deja espacio a las ideas más liberales que algunos de ellos profesan.
Larraín, en tanto, aseguró ayer que las renuncias han sido "telecomandadas" por una tercera persona, sobre quién se negó a revelar su identidad, "porque me pueden declarar malo, malo", afirmó a radio Agricultura. Añadió que "hay personas que tienen serios problemas con el personalismo, que tienen dinero y que creen que el centro está en el mismo ombligo. Y hay mucha gente que se mira el ombligo".
El titular de RN es reconocido como uno de los principales "mecenas" del partido .
Los últimos en dejar RN fueron los diputados Karla Rubilar, Joaquín Godoy y Pedro Browne, que concretaron el lunes la renuncia anunciada la semana pasada.
Cuando se comunicó la determinación, el senador electo Manuel José Ossandón apuntó las responsabilidades del Gobierno.
El Mandatario deslizó antes del balotaje que no volvería a militar en RN cuando deje la Presidencia el 11 de marzo, pues desearía crear una fundación o un movimiento que defienda su labor. El lunes, Larraín comentó que Piñera le habría "mandado a decir" que él no ha afirmado que renunciará.
Larraín ha comentado que él cree que la mantención del actual jefe de Gobierno frenaría nuevas fugas, pero ayer matizó sus declaraciones.
"Yo no digo que el partido se salve sólo si vuelve el Mandatario, aunque tiene una inercia propia sensacional, porque ha tenido que enfrentar enormes dificultades. Sí quiero que nos venga a ayudar. Es una petición nada más, pero él ahora tiene muchas cosas que hacer", comentó a radio Agricultura.
Larraín afirmó que los militantes de RN están "muy tostados" con los tres diputados que emigraron, pues sentirían que ayudaron a elegir parlamentarios a personas que tienen "otras identidades políticas".
El senador solicitó que ante situaciones de este tipo "el aparato jurisdiccional chileno tiene que tomar nota", ya que para él no sería justo que alguien que postuló por un partido lo abandone tras una elección.
El dirigente llamó también como "Estrechez" al movimiento "Amplitud", que Rubilar, Godoy y Browne están gestionando. Sin embargo, aclaró que la diferencia con ellos no era "personal".
"Es un problema de fondo: cómo manejamos la vida política, con partidos políticos o así, armando grupitos de amigos de la alta burguesía, que van a universidades privadas, que tienen un lenguaje críptico que se entienden (entre ellos). Los partidos son abanicos muy amplios, donde hay toda clase de visiones, y ése es el partido político que a mí me gusta", expresó a radio Cooperativa.
Además de "Amplitud", otros de los que han anunciado sus renuncias han manifestado sus intenciones de sumarse al movimiento Evópolis, que estaría en proceso de formalización como partido. En esta entidad su principal líder es el ex ministro Felipe Kast, quien fue electo diputado en noviembre tras un cupo negociado con RN y la UDI en Santiago Centro.
Larraín asumió que es probable que "alguno más" se vaya de las filas y expresó su deseo para que el éxodo se frene, asegurando que "en el partido hay espacios para muchas visiones".
Para él, la creación de nuevos partidos podría favorecer la discusión en el Congreso de "un sistema electoral ultraproporcional", distinto al "moderado" que habían convenido con la oposición. "Yo creo que (eso) va a ser malísimo para el país", analizó.
"Mi temor es que estas renuncias le faciliten la labor a la Concertación precisamente ahí donde es más importante ofrecer una oposición inteligente: defender la Constitución", planteó.