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El Gobierno argentino defiende el acuerdo para frenar la inflaciónCómo quedará la canasta

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El secretario de Comercio Interior de Argentina, Augusto Costa, defendió ayer la canasta oficial de productos básicos con precios pactados entre el Gobierno, los proveedores y los supermercados, en vísperas de que entre en vigor el acuerdo, y aseguró que servirá para "disciplinar" el valor de los productos.

"Los consumidores no van a validar precios que no tienen relación con los de la canasta de referencia. Estoy convencido de eso. Sólo se validan precios desproporcionados cuando no hay suficiente información", aseguró Costa, entrevistado por el diario Página 12.

La canasta de productos básicos, que fue presentada el viernes por el nuevo equipo económico del Ejecutivo de Cristina Fernández, comprende una lista de 194 precios -un centenar de productos básicos distintos de diferentes tamaños y marcas- que entrarán en vigor a partir de hoy y regirán hasta marzo próximo.

Se trata de productos de almacén, bebidas, carnes, lácteos, artículos de limpieza, perfumería, verdulería, panadería y librería. Rige desde hoy sólo para la ciudad de Buenos Aires y el conurbano de la capital argentina.

Para el nuevo secretario de Comercio Interior, quien sucedió al polémico Guillermo Moreno en noviembre, los consumidores deberán adquirir un papel activo e informarse para tener los precios de la canasta oficial como referencia al hacer sus compras.

"El objetivo con esta canasta es atacar un problema que se deriva de la estructura de mercado oligopólica y que tiene que ver con la pérdida de referencia de los consumidores sobre precios relativos y de productos de consumo diario", explicó Costa en la misma entrevista.

"La dispersión de precios responde a la capacidad para fijar condiciones de mercado por parte de los actores concentrados", añadió.

Los precios acordados por el Ejecutivo, los proveedores y los supermercados se someterán a revisiones periódicas en las que el Gobierno planea admitir sólo alzas justificadas por variaciones objetivas de costos, para "limitar la capacidad de los formadores de precios de apropiarse de lo que no les toca", subrayó el secretario.

A la hora de negociar, el Gobierno estudiará, para cada caso, el impacto en la actividad empresarial de factores tales como el alza de los salarios, los costos logísticos o la devaluación de la moneda sólo en el caso de que haya importaciones. "Como toda política, se irá perfeccionando en el tiempo y habrá subidas y bajas de precios", declaró Costa a la agencia oficial Télam.

Con el convenio para 2014, el nuevo equipo económico del Gobierno, con el ministro Axel Kicillof a la cabeza, da continuidad a la estrategia de intervención en los precios que comenzó el 2005 con los primeros acuerdos para congelar los importes de algunos productos y paliar el efecto de la elevada inflación.

Según datos oficiales, en los primeros 11 meses del año 2013, los precios al consumidor en Argentina acumularon un alza del 9,4%, pero para consultoras privadas la inflación "real" acumulada llegó al 26,8%.

El acuerdo por los precios no ha estado exento de críticas políticas. El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, dijo al diario Clarin que esta herramienta "ya fracasó". Para el opositor al Gobierno de Cristina Fernández, "hay que cambiar la tendencia económica y no quedarnos en la espiral inflacionaria".

El diputado, a través de su equipo económico, propuso que el eje de la discusión económica sea la posibilidad de tomar inmediatamente medidas que reduzcan la inflación y tener un 2014 con un cambio de tendencia.

Dos diputados de la Unión Cívica Radical (UCR), Ricardo Alfonsín y Miguel Bazze, cuestionaron la política: "Sólo podría tener efectos positivos en el marco de una serie de medidas y anuncios orientados a atacar las causas de fondo de la inflación; me refiero a decisiones no sólo económicas, sino también institucionales", dijo Alfonsín al diario argentino La Nación. Para Bazze, la medida oficial demuestra "la incapacidad" para frenar la inflación.

La población podrá enterarse del nivel de precios a través del sitio www.precioscuidados.com.

La organización "Consumidores Libres" informó que la canasta de alimentos que mensualmente informa se encareció en diciembre 3,67% y cerró el 2013 con una alza acumulada de 23,77%.

Según el representante legal de la asociación, Héctor Polino, el valor de la harina encabezó el año pasado el ranking de precios, con un alza de 102,66%. Ese incremento habría impactado en el precio del kilo de pan, que se ubicó en el segundo puesto -según la entidad- con un incremento de 70,49%.

De acuerdo a la información detallada por el organismo- a través de levantamiento en supermercados y centros de abastecimiento de diversos barrios bonaerenses-, el precio de la yerba habría ocupado el tercer lugar del ranking, al encarecerse 69,93%.

Según la información contenida en www.precioscuidados.com, un kilo de papas se venderá desde hoy a 6,91 pesos argentinos ($ 558), mientras una lechuga quedará en 11 pesos argentinos ($ 888). Una Coca Cola en supermercados costará 12,5 pesos argentinos ($ 1.009), mientras un jugo en polvo será comercializado a 1,6 pesos argentinos ($ 129). Un kilo de carne costará 49 pesos argentinos ($ 3.957), mientras el kilo de pan no superaría los 18,5 pesos locales ($ 1.494).

El Senado de EE.UU. designaría hoy a Yellen al frente de la FEDEl perfil de la nueva presidenta

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El Senado de EE.UU. tiene previsto confirmar hoy a Janet Yellen al frente de la poderosa Reserva Federal (FED) después de que la votación se retrasara en diciembre por los reclamos de los legisladores de una mayor transparencia por parte del organismo, señalaron ayer fuente políticas.

La mayoría demócrata en la Cámara Alta y los republicanos no lograron un acuerdo para agilizar el proceso antes del receso navideño, por lo que tuvieron que retrasar el procedimiento de confirmación hasta el 6 de enero.

El senador republicano por Kentucky Rand Paul, uno de los más críticos con el papel de la FED, lideró las conversaciones con el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, para evitar un largo debate en el pleno que retrase aún más la importante confirmación de Yellen.

Paul ha amenazado con debatir las 30 horas máximas que le permite el reglamento del Senado para retrasar la confirmación de la economista, a no ser que se le prometa que se votará una de sus iniciativas para auditar y conocer mejor el proceso de toma de decisiones de la FED.

Según la agencia EFE, el senador, conocido por sus ideas conservadoras, pide que, además de las auditorías internas y las comparecencias en el Congreso del presidente de la FED al menos dos veces al año, el Banco Central explique al Poder Legislativo las razones de cada una de sus decisiones sobre política monetaria.

Yellen contaría previsiblemente con apoyos suficientes en ambos partidos para que se lleve a cabo su confirmación, que además se ha visto retrasada por el malestar ocasionado entre los legisladores republicanos tras la decisión demócrata de limitar las técnicas denominadas de "filibusterismo" o bloqueo legislativo, cuyo uso ha aumentado durante el mandato de Barack Obama.

Yellen es vista como un símbolo de continuidad en la FED, donde es vicepresidenta y ha trabajado en el diseño de la política de estímulo monetario tras la crisis. La prestigiosa economista (67) está llamada a convertirse en la primera mujer al timón de la política monetaria de EE.UU.