Esencia poética de Hernán Rivera
"Huérfano de títulos académicos, diplomas y otras yerbas, soy sólo un desterrado pampino que, además de manipular la dinamita arrugando pampa y pampa, siente la necesidad casi fisiológica- y no me pregunten por qué- de decir cosas en versos".
La reflexión de Hernán Rivera Letelier es para su primera publicación realizada el año 1987, "Poemas y Pomadas", en Ediciones Eléctrica Chilena de Santiago de Chile.
La reedición de "Poemas y Pomadas" la efectuó la Feria Internacional del Libro de Antofagasta 2013, con el riguroso trabajo de Sergio Gaytán Marambio, quien conoce a Rivera desde los comienzos de la década del 80 como integrante esporádico, el hombre de la pampa, de su Taller Recital.
Importante es conocer este trabajo porque en él está la esencia de poeta de Hernán Rivera que se volcó a la narración desde esa mítica novela "La Reina Isabel Cantaba Rancheras"(1994) y sus trece obras hasta "Historia de Amor con Hombre Bailando"( 2013).
Tratando de explicar la expresión "Soy un poeta que escribe para el Lado", Gaytán precisa en un trabajo reflexivo su paso del verso al cuento, inserto en "Poemas y Pomadas":"Hay un libro del poeta que todos conocemos y cuyo oficio de poeta- siempre tras la búsqueda del sentido exacto de las palabras- lo lleva en su narrativa breve a no engolosinarse con la frase de relleno y pedregosa. Cree que sólo lo conciso es fecundo".
Para confirmar lo anterior, esta ráfaga creativa (guiño de Sabella): "Epitafio a mi padre muerto el 73/ No levantéis de ese modo las cejas: / El viejo se murió de silicosis".
Y para que no quede dudas sobre el tema, esta declaración de principios de Rivera: "Soy un poeta: para ser poeta, no es necesario escribir versos. Un ensayista puede ser un poeta, he leído ensayos llenos de poesía y he visto poemas sin una gota de poesía. Me siento un poeta que escribe novelas. Soy un amante de las palabras, de su música, de su sabor, de su suavidad o aspereza".