Advierten a extranjeros que tienen que dejar las tomas
residencia. Hay familias extranjeras que ya están en búsqueda de una casa, pero hay otras que consideran que la carta fue sólo para infundir miedo.
La carta de notificación que recibieron los extranjeros que viven en el campamento Manuel Rodríguez hace un mes, fue una advertencia para que cumplan la ley de Extranjería y los que así no lo hagan se expondrán a que se les pueda revocar la visa de residencia.
Así lo informó el gobernador de Copiapó Eduardo Esteffan quien indicó que "nosotros vamos a seguir haciendo los trámites de pedir la caducidad de la residencia a toda la gente que no está cumpliendo la ley de Extranjería, eso se mantiene. Ese mes fue para advertirle a la gente que en vez de estar viviendo en una toma, colgándose de la luz, es decir robando luz, siendo un costo para el municipio con agua; en vez de estar incumpliendo la ley de Extranjería, la empiecen a cumplir. Es como una advertencia de tiempo".
En la misiva se señala que están en ocupación ilegal de terreno, por ello se indica que "se encuentra usurpando un terreno fiscal, el cual no se encuentra habilitado para la vivienda y carece de servicios básicos de energía y agua potable".
Agrega que "cae en la configuración de una carga social para el Estado de Chile de acuerdo al DL N 1094 que establece normas sobre extranjeros en Chile, su permiso de residencia en Chile, puede ser revocado y/o de acuerdo al artículo 64 del mismo cuerpo legal, rechazada su futura solicitud de renovación. Por lo anterior expuesto, se le otorga un plazo perentorio de 30 días corridos a contar de esta notificación, para regularizar su situación de residencia, incluyendo la obligación de notificación y registro de su nuevo domicilio en la Gobernación Provincial de Copiapó, lo que de no ser cumplido se considerará mérito suficiente para dar curso a las medidas administrativas señaladas en el párrafo anterior".
Esto causó preocupación en algunos grupos de inmigrantes que habitan en las tomas y algunos ya están buscando lugar arrendar, pero hay otros que piensan que sólo fue para intimidar. "A muchas familias les llegó la carta, hay gente que está preocupada aunque no tenía sello, ni venía timbrada. Hay otros que no le han dado importancia, que fue para dar miedo. Es para que no siga llegando más gente", explicó Rosa García, una de las vecinas extranjeras del campamento Manuel Rodríguez.
GOBERNACIÓN
Respecto del tema, el gobernador Eduardo Esteffan, fue enfático en señalar que "la solución es muy simple, arrendar una casa entre dos o tres familias o grupos de personas en la ciudad y con eso se resuelve su problema de inmediato. Si no lo hacen nosotros sabemos ya, quienes son muchos de los que están haciendo eso, y vamos a comenzar a hacer el trámite de pedir su revocación y para eso no tenemos que informárselo. No se confíen, preocúpense de cumplir la ley de Extranjería".
Además, según explicó, la carta emanó del Gobierno Regional, y el hecho que no haya tenido un timbre, no implica nada. "Agradezcan que se mandó la carta, porque podríamos haber hecho lo mismo sin avisarle a nadie, haberlos pillado a todos de sorpresa. Les estamos dando una oportunidad para que regularicen su situación. Chile es un país de leyes, un país ordenado. Somos orgullosos de ser un país ordenado. No podemos permitir que vengan extranjeros a no cumplir las leyes. Ningún extranjero puede estar fuera de las leyes chilenas y las leyes de Extranjería además. Así como ningún chileno puede no cumplir la ley".
TECHO
Cristian Cortés director de Fundación Techo para Chile en Atacama, calificó como grave que no exista un responsable del mensaje. "Me parece grave la carta que le llegó a familias vulnerables independiente de la procedencia, una carta que no tiene una firma, timbre, un responsable detrás".
La carta generó temor en los habitantes extranjeros, una incertidumbre que en algunos casos aún continúa. "Creemos que lo que generó la carta es sólo miedo, podemos tener políticas claras al ingresar al país, pero no generar una política de temor después que se ingresó (...) Seguramente los campamentos van a seguir creciendo con extranjeros y chilenos. Esto atenta contra varias cosas, y también contra los derechos humanos, uno no puede generar una carta que nadie firme, pero sí que genere temor a la comunidad, genera incertidumbre, las familias no saben si se tienen que ir. Esta carta llegó de manera aleatoria, hay familias que hoy tienen hijos de nacionalidad chilena y por eso no se puede revocar su visa".
El aumento en los campamentos ha sido significativo en los últimos años, y eso no ha sido correlativo a la solución. "No vemos muchas ventanas en alguna solución concreta, en los últimos dos años los campamentos han crecido casi un 50 % y en los últimos dos años se han construido dos proyectos sociales, nada".
Añade que "el problema mayor es que no hay solución ni siquiera para los chilenos hoy en día en Atacama. Hoy no se está construyendo, los pocos proyectos que vienen en camino, son proyectos muchos más caros de lo normal, en términos constructivos. El suelo tiene un valor inalcanzable para proyectos de viviendas sociales. Los paños disponibles son pocos".
PROBLEMAS
Clara Rojas, dirigenta del campamento Monseñor Juan Pablo Ariztía, señala que en este campamento es mayor la cantidad de extranjeros y chilenos, lo que ha generado problemas de convivencia. "Nosotros los acogimos, pero ellos van a Bolivia o a su país y traen a más personas, es algo que ya no se puede controlar".
Además, otros de los problemas es la situación de la luz y el agua. "Ellos sienten que tienen los mismos derechos que los chilenos. Tenemos 93 familias y de esas familias somos 26 chilenas. Las demás son extranjeros y ya es mucho. Hemos tenido problemas de convivencia con ellos".
"Regulariza su situación o se devuelve"
Según informó el gobernador Eduardo Esteffan "la carta tiene el valor de advertirle que nosotros vamos a hacer cumplir la ley de extranjería, todos extranjero que llega a Chile tiene que autosustentarse, esa es la condición. Aquí no hay ninguna discriminación para ningún país. Los que no lo hacen tienen que abandonar el país. Nosotros vamos a empezar luego, no es rápido, hacer la tramitación para que esa gente, o regulariza la situación en una casa normal o se devuelve a su país de origen. Son bienvenidos todos los que cumplen la ley, si no la cumplen aplicamos la ley que es pedir que se le caduque su residencia en el país".