Falleció Pascual Castro: jefe
DEVOCIÓN. Llevaba más de 70 años siendo parte de la festividad religiosa. Recientemente fue galardonado como "Patrimonio vivo" de Copiapó.
Una persona sabia, culta, amable y completamente devoto de la Virgen de la Candelaria. Así es como sus familiares y amigos recuerdan y describen a Pascual Castro, diaguita que durante más de 70 años mostró su admiración por la "Santa patrona", siendo parte de la Fiesta de la Candelaria. Quien fuera el jefe general de los bailes religiosos, falleció a los 89 años. Según sus más cercanos se fue en el sueño, acompañado de Dios y de su 'chinita'.
Sus últimos años de vida, Pascual presentó problemas en sus riñones, pulmones e incluso diabetes, a pesar de ello, hasta sus últimos días fue un miembro activo de la comunidad. Siendo incluso hace dos meses reconocido como "Patrimonio Vivo" de Copiapó.
Orígenes de una pasión
Pascual Castro nació en Copiapó en 1935, a los seis meses de edad, sus padres lo presentaron ante la Virgen de la Candelaria, debido a que el recién nacido presentaba problemas de salud. Los padres del pequeño eran grandes devotos de la patrona minera, por lo que desde los nueve años comenzó a bailar.
"A los nueve años él empezó, desde ahí empezaron muchas historias. Era un hombre muy culto y sabio", expresó Jhon Contreras (51) sobrino de fallecido.
Pascual a sus 25 años pasó de ser flautero a ocupar un lugar como tamborero. Donde conoció a Ramón Rojas (51), quien se transformó en uno de sus grandes amigos, o como mencionó Ramón, más que amigos, hermanos.
"Yo lo conocí a él cuando yo pasé a tambor y bailábamos juntos (...) más de 50 años fuimos compañeros, yo estuve siempre con él, en las buenas y en las malas, lo considero un hermano más, porque así nos decíamos y así nos tratábamos como hermanos", dijo nostálgico, quien actualmente es jefe de uno de los bailes tradicionales.
Recuerdos
Dos hijos tuvo Pascual junto a Urbana, quien fue su esposa hasta que falleció por una enfermedad . Juan y Orlando son el fruto de ese amor. Posteriormente, Pascual encontró en Violeta amor y comprensión. Ella fue su compañera de vida hasta el momento de su deceso.
Sobre los recuerdos que alberga de su padre, Juan Castro (53) comentó que "en mi infancia, siempre me tomaba de la mano y me sacaba a dar una vuelta y mi madre, me iba dejar al colegio, esos son los mejores recuerdos, porque los tenía a los dos, y teníamos todo, canal, río, la cancha y árboles", expresó Juan, quien reconoció que la partida de su padre lo tiene consternado, ya que cuando salió a trabajar el día de ayer a las cinco y media de la mañana estaba bien. Dos horas más tarde lo llamaron para comunicarle la noticia.
Un sitio vacío
Sobre el lugar que deja Pascual, su amigo, Ramón Rojas aseguró que "él estuvo activo hasta sus últimos días, bailó toda la vida. Ahora estamos sacando candidatos para que postulen al cargo de él, pero el que llegue ahí, no es fácil, él dejó la vara bien alta y nadie, se lo prometo delante de la Virgen de la Candelaria y ante Dios, que de todas las fiestas que hay aquí en Chile, no hay nadie así", sentenció Rojas.
Hoy a las 15.00 horas se realizará una misa en la Catedral de piedra del Santuario. A las 4 saldrá la caravana, deteniéndose en Avenida la Paz del cementerio, donde el féretro será cargado por sus cercanos a pie hasta el Parque del Recuerdo en compañía de los bailes religiosos que marcaron la vida de Pascual.