Ayer finalizó la popular Feria de la Candelaria, efectuada en el marco de la celebración de la conocida fiesta religiosa. Fueron seis los días donde la ciudadanía visitó el lugar, aunque, según lo locatarios, sin grandes ventas. Incluso esto los llevó a solicitar a la municipalidad un día más, a lo cual accedió el ayuntamiento.
Este año la gran diferencia fue el sitio dispuesto para la realización de la feria, ya que se mudó desde el conocido sector abierto de Circunvalación hacia dos terrenos dispuestos en calle Carrera. El cambio de sitio generó que la feria quedase dividida en dos terrenos separados por locales comerciales, lo que desencadenó la molestia de algunos locatarios, ya que uno de los terrenos contaba con asfalto, mientras que el otro era un lugar sin pavimentar.
Al respecto Alfredo González, jefe de patentes de la Municipalidad de Copiapó, realizó "un balance positivo de lo que hemos hecho, obviamente siempre van a haber comerciantes que van a estar disconformes con sus ventas, no les gustó la nueva ubicación porque dice que está muy encerrado, con mucho calor y que los puestos son chicos, sin embargo siempre han sido 3 x 3, en sí son consecuencias de un cambio".
Por otra parte, Hardey Mansilla, mayor de Carabineros de la Segunda Comisaría Copiapó , destacó que existieron situaciones menores en torno a la seguridad, sin embargo se cursaron infracciones de tránsito.
"Hubieron situaciones menores las cuales se dan en un lugar con aglomeración de personas (...) se han cursado bastantes infracciones al tránsito ya que hay mucha gente que se estacionaron sin saber y dejaron sus vehículos, obstaculizando así el ingreso a la misma feria", señaló.
La disposición de espacios y la asignación de puestos generó diversas opiniones de los locatarios. Debido a que por primera vez los feriantes fueron divididos en dos grupos, el primero fue dispuesto en un terreno con asfalto, donde también se encontraban los retenes móviles de carabineros, bomberos y municipio, mientras que un segundo grupo fue ubicado en en el otro lugar sin tanto protección policial.
De acuerdo a la información entregada por el municipio fueron 1.116 los puestos que este año dieron vida a la Feria de La Candelaria.
Ventas
Olga Chañilla, se dedica a la venta de artículos de ferretería y lleva diez años asistiendo como vendedora a la Feria de La Candelaria. Su molestia es evidente, ya que su puesto quedó ubicado en un terreno baldío cuyo suelo es de tierra, situación que asegura no fue informada.
"A mi no me dijeron que había tierra, los otros locales tienen asfalto, aquí nos tiraron al potrero como se dice", dijo.
Chañilla hizo uso de los espacios libres a su alrededor en el día extra de la feria, ya que muchos de sus colegas se retiraron el día 5 de febrero, como estaba dispuesto en un comienzo. Todo ello con la finalidad de generar más ventas y así recuperar el dinero invertido, ya que "este es el año que más mal me ha ido, ni siquiera he recuperado el dinero para irme y pagar al señor que me trae, todos los días ha circulado poca gente, como estamos alejados, la gente no entra y se devuelve".
Así mismo, Brisneiths Gutiérrez de 21 años junto a su hermano tienen la tienda de animé "Mi Pequeño Tokio" y en esta oportunidad quedaron alojados en el sector si pavimentar, lo que ha afectó significativamente la ganancia económica a la que estaban acostumbrados, ya que " hemos visto mucha menos gente. Todos pasan a la grande y después se van, años anteriores no se podía ni pasar, antes contratábamos más personas, ahora no fue necesario, sólo dos de nosotros bastaban". La joven decidió hacer uso del día otorgado ya que "sólo estamos recuperando lo invertido, si invertimos 500 mil pesos, hemos ganado $600 mil. Años anteriores llegábamos incluso al millón de pesos o millón y medio".
Walter Ogalde se dedica a la venta de ropa femenina y ha participado de manera aleatoria en distintas versiones de la feria. Al respecto, destaca que el nuevo espacio ha perjudicado sus ventas ya que "sólo he recuperado la inversión, pero no ha salido ganancia ya que hubo mucha menos gente en comparación al año anterior" El comerciante destaca que el producto que más vendió fue el popular y veraniego kimono. Una experiencia distinta es la de Pedro Castillo, su tienda "Jamboree" de artículos de camping quedó ubicada en el perímetro dispuesto con asfalto, por lo que el flujo de gente ha sido mayor en comparación a sus colegas, sin embargo no lo suficiente como para generar un balance positivo ya que, "tenemos un 30% menos de ganancia en comparación a años anteriores, aunque igual nos vamos conformes por haber venido".
Asegura que es consciente de la situación que viven los feriantes ubicados en otro terreno.
"A nosotros no nos ha ido mal, pero otros han andado muy mal, por ello se dio un día más de alargue", agregó.
Por otra parte, Digna Carvajal es más optimista a la hora de realizar un balance de la jornada. "Ha andado mucha gente y al igual que todos los años me ha ido bien, no en extremo, pero bien". Su mayor venta se traduce en cosméticos y artículos de belleza y aunque está conforme con las ventas, asegura que existieron problemas en torno a la disposición de los puestos ya que "la organización fue mala, por ejemplo pusieron las cocinerías antes, siendo que la gente primero mira novedades, quedó muy desordenado", señaló.
La gente opina
Francisco Gutiérrez asistió al último día de la feria y asegura que la ubicación anterior era la más adecuada: "Es un poco desordenado este lugar, no hay donde estacionarse, por ello prefiero el sector de circunvalación, donde las cosas no estaban mezcladas".
Por otra parte, Susana Astudillo destaca lo organizado de la ubicación actual y el resguardo existente.
"Me gustó el cambio por que se nota más organizado y resguardado para todos". Además, menciona que pudo asistir a la feria gracias al plazo extra: "Vine hoy por que antes fue imposible por mi trabajo, así que me sirvió la extensión de un día más", esgrimió.
Opinión similar es la Marcos Rojas, quien asistió el último día ,"Llegué recién el día martes de mi trabajo, por lo que sólo pude asistir el último día". Rojas es crítico respecto a la ubicación de los puestos ya que, "están muy juntos todos los locales, por ejemplo venden anticuchos y al lado dulces y los olores se mezclan".
Gabriel Rojas quien asistió junto su pequeño hijo destacó lo importante que es para él como padre circular por un espacio seguro.
"Es mejor esta nueva ubicación ya que es cerrada y por tanto tiene mayor resguardo, sobre todo para los niños, ya que anteriormente era más fácil que se perdieran", expresó Rojas.
Paulo Araya concuerda en los beneficios del nuevo sitio, "pude venir debido a que se extendió un día la feria y la verdad es que más cómodo que esté acá".
"Hemos visto mucha menos gente, todos pasan a la grande y se van, años anteriores no se podía ni pasar, contratábamos mas personas, ahora no fue necesario"
Brisneiths Gutierrez (22)"
"Ha andado mucha gente y al igual que todos los años me ha ido bien, no en extremo, pero bien"
Digna Carvajal (57)"
"Sólo he recuperado la inversión, pero no ha salido ganancia ya que hubo mucha menos gente en comparación al año anterior"
Walter Olarte (47)"
"Tenemos un 30% menos de ganancia en comparación a años anteriores, aunque igual nos vamos conformes por haber venido"
Pedro Castillo (65)"
"Todos los días ha circulado poca gente, como estamos alejados la gente no entra, se devuelven"
Olga Chañilla (53)"
1.116 puestos fueron comerciales hubo en la Feria de la Candela este año.