Como fue de conocimiento público en su minuto, Aguas Chañar durante el año 2016 tuvo un cambio en su estructura organizacional. Esto debido al enfoque necesario para enfrentar con una nueva forma de trabajo a las diversas adversidades que se ha enfrentando en estos 14 años de concesión.

Desde finales del 2016 estas complejidades se han evidenciado en distintas situaciones que han afectado a localidades que atendemos en las cuales hemos estado presentes desde el primer minuto. Es importante que sea de conocimiento público que nunca hemos evadido nuestra responsabilidad, en cada caso nos hemos hecho cargo con acciones concretas y hemos compensado a nuestros clientes cuando ha correspondido. Chañaral - Tierra Amarilla - Freirina y por estos días Copiapó, nos han tenido como compañía en el ojo del huracán, dejando ver lo complejo que es la administración de un servicio de agua potable en el desierto más árido del mundo y que heredamos de los tiempos de SENDOS y EMSSAT, infraestructura que en muchos casos ni siquiera contaba con planos de trazado de las conducciones y redes, lo que dificulta más la tarea aún.

Durante estos 14 años de concesión hemos invertido más de 100.000 millones de pesos, sin embargo, lo realizado parece que ha tomado un rumbo que le ha hecho invisibilizarse a los ojos de nuestros clientes, generando en el inconsciente colectivo que la empresa no ha hecho su trabajo, y no se ha tenido presente que somos la empresa sanitaria que más invierte por cliente en el país.

Pese a todo esto, hoy se nos señala como la empresa que no ha dado cumplimiento a lo que dice su contrato de concesión y se ha dicho con tanta fuerza de que no hemos sido lo suficientemente profesionales, dichos que rechazamos absolutamente y que no implica por nada del mundo que restemos nuestra responsabilidad en los hechos que han ocurrido. Somos conscientes del malestar de la ciudadanía, sin embargo este sentimiento no puede traducirse en el nivel de violencia al que hemos llegado y que se evidenció el día jueves pasado por la mañana en nuestra oficina comercial de Copiapó, amedrentando e intimidando a nuestros trabajadores, razón por la cual analizaremos las medidas que tomaremos.

También manifestamos nuestra sorpresa y desacuerdo con el tenor político que esto ha alcanzado y donde no concordamos en la forma en que la autoridad ha incentivando un rechazo colectivo anteponiendo a esta empresa como un enemigo común.

Hoy día nuestro llamado es a trabajar en conjunto, en buscar soluciones concretas con aportes de todas las partes para que podamos avanzar en este gran desafío que es mejorar, tanto en calidad de agua potable como en infraestructura y servicio. Nosotros no somos un enemigo ya que prestamos un servicio, servicio que tiene que mejorar y haremos lo necesario para que eso ocurra.

Enrique Calcagni gerente general de Aguas Chañar

3 años | 10 de abril de 2014

Ojos del Salado pierde rótulo de Interés Turístico

Sorprendidas se mostraron las autoridades comunales de Copiapó y Caldera por la revocación de del título de Zona de Interés Turístico del Volcán Ojos del Salado y Bahía Cisne, por parte del ministerio de Economía, Fomento y Turismo del gobierno pasado. La Ley de Turismo, la que estipula requisitos más estrictos para postular a ese título.

2 años | 10 de abril de 2015

Voluntario murió por contacto con pesticida

Un joven de 22 años identificado como Kevin Villalobos Dorador, falleció por las graves heridas que la causó la inhalación de un químico mientras se encontraba ayudando en viviendas afectadas en Tierra Amarilla. Según cercanos, el 26 de marzo Kevin se encontraba ayudando en las labores de limpieza cuando por casualidad tomó un bidón que contenía un químico.

1 año | 10 de abril de 2016

Destacan potencial de exportación de granados

Como muestra de la diversificación productiva de la agricultura en Atacama, la cosecha de granados toma fuerza en la región. Esto, ya que para la temporada 2016 se espera exportar 600 mil cajas a distintos mercados internacionales. El granado es un árbol que se cultiva en zonas áridas o templadas.

Chile no es ni de lejos el país más in seguro o el más corrupto de Latinoamérica, los niveles de delincuencia en ciudades como Copiapó está por debajo de la media nacional, a pesar de ello el tema de la seguridad es una constante y ha generado debate por la forma en que se debe enfrentar este problema, incluso buscando soluciones en países pioneros en el tema, como es el caso de las "Safe Cities" inventadas en Inglaterra en la década del 90, o en el otro extremo la "Tolerancia Cero" implantada en los 80 en Nueva York.

La tendencia más popular en la opinión pública es la cero tolerancia a las actividades delictivas, para asegurar la tranquilidad de la población de buenos ciudadanos. Hace algún tiempo se viene destacando el fenómeno de como Singapur venció la delincuencia aplicando la pena de muerte, algo que para la opinión pública occidental no reviste debate alguno aunque tal vez los resultados para la sociedad de ese pequeño y próspero estado asiático dan la razón a esta forma de enfrentar el delito según su postura.

Según un artículo de 2015, hace 12 años en las cárceles había más de 500.000 presos, pero seis meses después, sólo quedaban 50. Se adoptó la pena de muerte y el trabajo forzado para los criminales confesos, narcotraficantes y violadores probados, siendo los más repetitivos condenados a muerte. Misma suerte corrieron políticos y empresarios acusados de corrupción.

Esto parece ser la solución ideal, incluso si se abriera una discusión en los foros es poco probable que alguien no esté de acuerdo, si no fuera porque existe mucha falsedad en ese artículo -la población penal continúa en 10.000-, además, si se trata de explicar que una situación "A", da como consecuencia el estado posterior: pasar por período distópico con una alta represión y una eliminación masiva, a un estado utópico, una nación sin delincuencia y superdesarrollada.

Queda claro que el éxito no se debe a los abusos de las libertades civiles y la implementación implacable de la pena de muerte. Singapur también tiene problemas, particularmente respecto de la falta de libertad de prensa, la legislación que criminaliza la homosexualidad, la falta de límites a la detención, así como la pena de muerte obligatoria para crímenes de drogas. Todas estas son razones por las cuales Singapur debería, ser criticada. Solo bastaría decir que la sola intención de contradecir a este estado férreo -que contiene a una población de cinco millones de personas-, sería fuertemente condenada y esa falta de libertades se contradicen con todos los principios en los que se basa la democracia de nuestras imperfectas naciones occidentales.