La Fiscalía de Atacama formalizó ayer a una banda de seis imputados, en contra de quienes se reunieron antecedentes que daban cuenta de traslados de drogas que realizaban desde esta región al sur del país.

Los antecedentes de este caso los expuso en la audiencia el fiscal jefe de Copiapó, Gabriel Meza, quien mencionó que la Fiscalía trabajaba en este caso desde el año pasado mediante diversas diligencias que ordenó al personal de la Brigada Antinarcóticos de la PDI. Las acciones permitieron conocer información respecto de sus métodos de transporte de droga y de una operación que realizarían el pasado fin de semana en la zona cordillerana de Copiapó.

"Fue así como la Fiscalía ordenó las tareas investigativas que detectaron a los imputados viajando desde la Cuarta Región a la zona interior de Copiapó en dos camionetas. Una vez en el sector de Maricunga cargaron 201 kilos de marihuana que estaban distribuidos en paquetes cubiertos con cinta adhesiva", dijo el fiscal.

Esta acción fue seguida de cerca por el personal policial, quienes procedieron a la fiscalización de los vehículos y la detención de sus seis ocupantes. Agregando el fiscal Meza que la diligencia continuó en un predio ubicado en la comuna de Los Vilos, región de Coquimbo, lugar en que se incautaron 197 plantas de marihuana, además de un arma de fuego y municiones. Deteniendo en este lugar a un séptimo integrante de esta agrupación delictual.

Por estos hechos, el fiscal Gabriel Meza formalizó a los seis imputados detenidos en Copiapó mientras transportaban la droga, dentro de los cuales están dos ciudadanos bolivianos, obteniendo para todos ellos la medida cautelar de prisión preventiva. Mientras que el imputado detenido en la vecina región deberá cumplir la cautelar de arresto domiciliario total durante todo el periodo que se extienda la investigación de este caso que fue fijado en 3 meses.

Alejandro Núñez

A los tradiciones reclamos por robos en los nichos del cementerio de Copiapó hoy se suman las denuncias de que hay personas que duermen en el recinto, se drogan, consumen alcohol, roban, portan armas blancas y hasta tienen sexo en las bóvedas mortuorias.

José (nombre ficticio para proteger su identidad), trabajador del cementerio, comentó que por lo menos hace dos años que entran personas por los muros del recinto en las noches. En total serían cerca de 30 los individuos, entre hombres y mujeres, que cometen esta acción en diferentes días y que al ser enfrentados por los vigilantes reaccionan de forma agresiva.

El hombre describió que "ellos mismos se ponen a pelar con cuchillas arriba de los nichos y nosotros no podemos hacer nada". Además agregó que siempre son las mismas personas y hasta que "la otra vez pillamos a una pareja haciendo el amor acá adentro de una bóveda".

Usuarios

Jaime Guaquín va todas las semanas al cementerio y con preocupación indicó que "hay gente que está viviendo ahí. Hay toallas, shampoo, frazadas y toman ahí porque siempre hay latas de cervezas".

El poblador junto a su esposa hizo la denuncia formal a la administración del recinto municipal por estos hechos y puntualizaron que fueron testigos de una pelea con "cuchillas" entre estas personas que alojan en el recinto.

José Quilodrán, quien caminaba por las calles del recinto reclamó que "siempre hay que andar renovando los santitos y los floreros" por los constantes robos que hay. El vecino solicitó más seguridad a la autoridad por respeto a los deudos.

En tanto María (nombre ficticio), afirmó que desde hace un tiempo evita ir al cementerio con cartera y trata siempre de hacerlo acompañada. "Yo no vengo con nada porque es peligro y esto está terrible", dijo.

Molesta la mujer recordó que en la tumba de su suegro hace unos meses "siempre se venían a tomar" y por eso la familia tuvo que invertir en la instalación de rejas para cerrar la estructura fúnebre.

Administración

Por su parte, el administrador del Cementerio Municipal de Copiapó Heber Ringele explicó que esta situación se origina desde que se eliminó la toma de Tornini a un costado de la ribera del río. El funcionario explicó que "son hechos recurrentes, pero son variables porque hay semana que está tranquilo, pero hay otras que hay problemas todos los días".

El directivo dijo que los guardias le han informado que se ha detectado gente teniendo sexo en las bóvedas, tomando alcohol, peleas y consumiendo drogas. Sobre la intervención, Ringele añadió que "se ha hecho una labor en conjunto con carabineros e incluso con la Policía de Investigaciones (PDI)".

El recinto tiene cinco guardias en total que finalmente hacen los turnos diarios de una o dos personas. Para el encargado del cementerio esta cantidad no da abasto para las cerca de nueve hectáreas que tienen las instalaciones.

Luego de recibir una denuncia en el cuartel policial por el delito de Hurto Simple, que daba cuenta de la sustracción de un celular IPhone 6 avaluado en $650.000 pesos, los detectives se abocaron a realizar las diligencias correspondientes para lograr la ubicación del teléfono móvil.

Los detectives tomaron contacto con la víctima, quien señaló que su celular era ofrecido para la venta a través de internet, por lo que se coordinó la compra del teléfono con el vendedor en la avenida Copayapu en Copiapó, hasta donde llegaron dos menores de edad, quienes fueron controlados por los oficiales señalándoles que la especie había sido sustraída días antes.

Hechos

Los menores de 16 y 17 años de edad, señalaron que habían comprado el celular de manera informal a un sujeto desconocido, razón por la que fueron detenidos por el delito flagrante de receptación.

Los detenidos no registran antecedentes policiales, quedaron en libertad y a la espera de la citación por parte del Ministerio Público por instrucción de la Fiscalía Local de Copiapó.

Dos penas efectivas de cárcel obtuvo la Fiscalía de Atacama luego de la investigación llevada a cabo ante un caso de tenencia de arma de fuego, delito cometido en la comuna de Caldera.

Los hechos, incluidos en la carpeta investigativa, fueron presentados por el fiscal adjunto de la mencionada comuna, Juan Andrés Shertzer, ante los jueces del Tribunal Oral en lo Penal, ocasión en que el persecutor expuso que el caso ocurrió en febrero de este año, cuando personal de Carabineros sorprendió a Jean Cisternas Moroso (19) manipulando un arma de fuego.

En la audiencia el fiscal argumentó que posterior a ello el condenado ingresó a una casa abandonada, lugar en que procedió a esconder el arma, la que fue encontrada por el personal policial, quienes además pudieron comprobar que ésta estaba cargada con un cartucho de escopeta calibre 12.

Todos estos antecedentes, además de otros medios de prueba, fueron presentados por la Fiscalía en el juicio respectivo, consiguiendo demostrar la responsabilidad penal del imputado que fue sentenciado como responsable del delito de tenencia de arma de fabricación artesanal a la pena de tres años y un día cárcel; además de ser culpable por la tenencia de municiones, ilícito por el cual deberá cumplir 541 días de presidio.

Respecto de esta causa el fiscal Juan Shertzer dijo que el condenado deberá cumplir de manera efectiva ambas sentencias, ya que no se hizo acreedor de beneficios alternativos a las penas impuestas por los jueces del mencionado tribunal.