En un barco carguero de minerales arribado a Caldera, proveniente de Ecuador, inspectores del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) detectaron la presencia de masas de huevos correspondientes a la llamada polilla ecuatoriana (Thyrinteina arnobia), insecto que provoca graves daños a la agricultura y la actividad forestal, y del cual Chile se encuentra libre.

A raíz del hallazgo, calificado como plaga de importancia económica, el servicio activó los protocolos sanitarios correspondientes, manteniendo la nave en el puerto y ordenando su tratamiento fitosanitario. Además, se instruyó la fumigación del recinto. Posterior a ello, y previo chuequeo al tratamiento, se solicitó a la autoridad marítima otorgar la "libre plática", pudiendo cargar y seguir con rumbo al puerto de Quintero.

Coordinación local

Según informó el director regional del SAG, Juan Carlos Valencia, los huevos fueron encontrados en escaleras y tapas de cubierta de la embarcación por inspectores del servicio, tomándose muestras y confirmándose la presencia de polilla ecuatoriana.

Valencia agregó que es primera vez que se detectaría el insecto en Atacama, aunque recientemente la institución llevó a cabo el mismo procedimiento en el puerto de San Antonio y en Arica, en naves provenientes de Ecuador y Brasil, países en los que está presente la polilla ecuatoriana. A raíz de ello, el organismo señaló que se han extremado las medidas sanitarias para barcos de procedencia ecuatoriana.

"Estas son acciones habituales de nuestro servicio y se realizan en base a protocolos pormenorizados de acción, los que en definitiva buscan prevenir el ingreso desde el extranjero de enfermedades exóticas o plagas cuarentenarias que puedan afectar a los animales o vegetales y dañar gravemente la agricultura nacional", destacó el director regional del Servicio Agrícola Ganadero.

La polilla ecuatoriana es un lepidóptero defoliador (se alimentan de las hojas) que ataca especies forestales, como el eucaliptus, y también cítricos; proviene del mencionado país, pero está presente en varias naciones sudamericanas.

En Chile no se ha detectado su presencia en los campos, según informó el SAG de Atacama.

"Estas son acciones habituales de nuestro servicio y se realizan en base a protocolos pormenorizados de acción, los que (...) buscan prevenir el ingreso desde el extranjero de enfermedades exóticas o plagas cuarentenarias"

Juan Carlos Valencia, dr. regional del SAG

Por el delito de tráfico de droga en pequeñas cantidades la Fiscalía de Atacama formalizó a un químico farmacéutico de Copiapó, quien vendía medicamentos restringidos sin la receta médica que se exige para el expendio de este tipo de sustancias.

Los antecedentes de este caso los entregó el fiscal jefe de la capital regional, Gabriel Meza, quien manifestó que el Ministerio Público manejaba antecedentes respecto de la venta de medicamentos cuya venta es restringida y que requieren de receta médica para poder obtenerlas. Frente a lo cual comenzó una investigación con personal del OS-7 de Carabineros, quienes comprobaron el delito realizando tres comprar en una farmacia ubicada en el sector Punta Negra de la ciudad.

"A partir de este antecedente concreto, respecto de la venta ilegal, y por estar frente a un delito, la Fiscalía, junto a personal policial y de la Seremi de Salud, concurrió al recinto para concretar el procedimiento de rigor, procediendo a la detención del profesional químico del recinto, quien luego fue formalizado por el delito de tráfico de drogas en pequeñas cantidades", dijo el fiscal.

Gabriel Meza aclaró que el delito de tráfico se aplica para los casos en que se detecta el transporte y comercialización de sustancias como la pasta base o la marihuana, pero además la ley establecería un abanico más amplio, como es el caso de precursores químicos y medicamentos que se ubican en la categoría de estupefacientes o sicotrópicos, los que tienen requisitos explícitos para concretar su comercialización al público.

El fiscal agregó que los antecedentes fueron informados también a la Seremi de Salud, entidad que desarrolló el procedimiento administrativo para proceder con la clausura de este recinto comercial.

El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal (TOP) de Copiapó condenó a cinco años de presidio a Filiberta Ricaldez y Mario Montero -ambos de nacionalidad boliviana- por tráfico ilícito de drogas, delito que fue perpetrado en mayo de 2015, en la comuna de Chañaral.

En fallo unánime, el tribunal sustituyó el cumplimiento de la pena privativa de libertad impuesta, por la de expulsión del territorio nacional de ambos condenados, sin que puedan retornar a Chile por 10 años.

El fallo también ordena a los imputados el pago de una multa de 40 UTM (Unidades Tributarias Mensuales) y la inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y para cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena.

El tribunal tuvo por acreditado que los imputados viajaban como pasajeros de un bus que provenía de Iquique en dirección al sur del país. "Ambos trasladaban en el interior de sus cuerpos pasta base de cocaína, Filiberta Ricaldez Antezana 82 ovoides con un peso total del 1.061 gramos con 37 miligramos de cocaína base, y Mario Montero Anduari 63 ovoides con un peso total de 818 gramos con 16 miligramos, de cocaína base, droga que era transportada por los acusados para su comercialización en el sur del país".

La sentencia añade que "a la altura del kilómetro 986 de la ruta 5 norte, en la comuna de Chañaral, los acusados fueron sorprendidos flagrantemente realizando este traslado de droga por la Policía de Investigaciones de Chile".

El total de la droga incautada a los acusados fue, posteriormente, "llevada hasta el Servicio de Salud Atacama, donde se determinó que su peso bruto era de 1.865,53 gramos; tomándose muestras para el análisis químico por parte del Servicio de Salud Atacama y del Instituto de Salud Pública de Chile, donde se confirmó que se trataba de la droga cocaína base con una pureza del 78%".

Un accidente se registró ayer en la ruta 5 norte, cerca del puerto de Caldera. Se informó que los dos ocupantes del vehículo, identificados como Martín Flores (32) y Margarita Villegas (78), fueron trasladados a un centro asistencial ya que registraron lesiones de carácter leves.

De acuerdo a los antecedentes, al pasar el kilómetro 803 el conductor habría perdido el control del móvil. Habría sido auxiliado por trabajadores que se encontraban realizando trabajos en la ruta.

Los ocupantes del móvil se dirigían rumbo a La Serena.