El arquero y capitán de la selección chilena, Claudio Bravo, envió un mensaje a sus compañeros luego de la inesperada caída por 1-2 ante Jamaica, en un amistoso jugado el viernes en el Estadio Sausalito de Viña del Mar.

El meta de Barcelona, quien no estuvo presente en el encuentro y que se sumará a la concentración en Estados Unidos, arengó a sus compañeros en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter (@C1audiobravo).

"Para ser grandes hay que aprender de las derrotas. Arriba el ánimo", anotó el portero, en un llamado a continuar con los trabajos que encabeza el cuerpo técnico de Juan Antonio Pizzi en la antesala de la disputa de la Copa América Centenario.

El mensaje fue acompañado de una imagen que contrasta la desazón tras perder la serie de penales ante Brasil, en el recordado juego ante la selección local en el Mundial 2014, y la alegría de coronarse campeones de la Copa América, en la misma instancia desde los 12 pasos ante Argentina, el año pasado en el Estadio Nacional.

El meta del Barcelona se ausentó del amistoso ante los centroamericanos debido al estado salud de su hija recién nacida, Emma, lo que también lo puso en duda para el torneo que comenzará en una semana. En una conferencia de prensa que ofreció en la víspera del juego ante la selección de Jamaica, el técnico de Chile, Juan Antonio Pizzi, aseguró que cuenta con Bravo para la nómina de jugadores que viajarán a Estados Unidos y que trabajarán para el debut en el certamen continental frente a la selección de Argentina, el próximo 6 de junio.

Alarma por messi

Lionel Messi abandonó ayer la concentración de la albiceleste y viajó rumbo a Rosario, su ciudad natal, para recuperarse de un fuerte golpe sufrido en la zona costal izquierda durante un amistoso disputado el viernes ante Honduras. Messi se retiró lesionado del encuentro a los 58 minutos, luego de recibir una fuerte contusión en las costillas. El jugador debe volver a a España para asistir al juicio por presunta evasión fiscal que comenzará el martes en Barcelona.

El serbio Novak Djokovic completó ayer el cuadro de octavos de final del Abierto de tenis de Francia, después de terminar justo al filo de la noche su partido de tercera ronda ante el británico Aljaz Bendene.

El número uno del mundo se impuso por 6-2, 6-3 y 6-3 en poco más de dos horas de juego, en un partido que se cerró con muy poca luz sobre el estadio central de Roland Garros.

El duelo empezó con mucho retraso sobre el horario previsto a causa de una fuerte lluvia caída a media tarde sobre París, que interrumpió el juego por un par de horas y postergó el inicio de algunos partidos.

"Era muy importante para mí terminar este partido esta tarde", confesó el serbio aún sobre la arcilla.

En un primer momento, la organización trasladó incluso el partido a la pista Suzanne Lenglen, la segunda en importancia, con el objeto de poder completar el programa.

Sin embargo, la lesión del francés Jo-Wilfried Tsonga, que abandonó su partido cuando aún no había terminado el primer set, devolvió el duelo del primer favorito a la cancha central.

Djokovic jugará en la próxima ronda con el español Roberto Bautista Agut, que ayer eliminó al croata Borna Coric por 6-2, 6-3 y 6-3.

El serbio busca en París su primer título en Roland Garros, el último de los cuatro grandes que le falta en su palmarés.

Latinoamericanos, fuera

Ningún latinoamericano jugará en la segunda semana del Abierto de Francia tras la eliminación ayer del uruguayo Pablo Cuevas (25 ATP) y de la puertorriqueña Mónica Puig.

Después de que el programa del día se interrumpiera durante dos horas y media por una tormenta, Cuevas no pudo romper su mejor actuación en París al caer ante el checo Tomas Berdych (7 del ranking mundial), en cuatro mangas por 4-6, 6-3, 6-2 y 7-5.

En mujeres, Puig (53 de la WTA) cayó frente a la estadounidense Madison Keys, 15ª favorita, por 7-6 (7/3) y 6-3.

El guión resultó familiar para los espectadores de la final de la Champions League. Tal como ocurrió en Lisboa en la temporada 2013/14, el Real Madrid conquistó ayer la corona del torneo europeo ante el Atlético de Madrid, que tuvo al Estadio San Siro de Milán como escenario.

Sin embargo, no fue un triunfo holgado ni un partido brillante por parte del cuadro "merengue", que ya cuenta 11 trofeos de este certamen a su favor. Tras un apretado segundo tiempo, en el que los "colchoneros" consiguieron en el empate a uno a última hora, los dirigidos por Zinedine Zidane se vieron obligados a continuar la disputa en la prórroga.

Sin variaciones en el tiempo adicional, el duelo quedó zanjado en los penales. El cuarto tiro del Atlético, a cargo de Juanfran Torres, se estrelló contra el poste derecho de Keylor Navas. Bastó la precisión de Cristiano Ronaldo en la quinta tanda para que el Real Madrid se coronara campeón por un 5-3 desde los 12 pasos.

Suspenso en italia

El primer cuarto de hora fue dominado por el Real Madrid. La ofensiva del conjunto de blanco puso a prueba la eficacia del portero Jan Oblak, en especial la intervención de Casemiro, asistido por Gareth Bale.

Pero la lentitud del Atlético en el ataque a la larga le costaría caro. La primera evidencia surgió a los 14 minutos, cuando Sergio Ramos anotó el primer tanto de rebote. Si bien surgieron cuestionamientos por un presunto fuera de juego, el árbitro Mark Clattenburg siguió con el desarrollo del duelo.

El elenco rayado fue mostrando cuotas de ataque gracias al francés Antoine Griezmann, aunque la zaga debió preocuparse del ataque del rival.

El complemento tuvo escenas de suspenso. Dos minutos después de su comienzo, una falta de Pepe sobre Fernando Torres derivó en un penal. Pero la oportunidad de empatar del Atlético en los pies de Griezmann se estrelló en el travesaño.

Pero los pupilos de Diego Simeone estuvieron lejos de rendirse y dejaron la pasividad mostrada en la primera parte. Tuvieron que insistir hasta el minuto 79 para que Yannick Carrasco doblegara la defensa y enviara un zapatazo a las redes de Navas.

El tiempo reglamentario se cumplió y no hubo diferencias, situación que se mantuvo durante la prórroga. Los calambres y el desgaste se tomaron estos minutos adicionales.

Solo los penales decretarían al ganador. El Real Madrid cumplió con la tarea de anotar sus cinco goles de manera impecable, siendo Cristiano Ronaldo el encargado de dar una nueva "Orejona" a los de Chamartín.