Catalina Peñailillo Monárdez
Tras el debate instalado sobre la entrada en vigencia del sistema de gratuidad que, desde el 2016, permitirá estudiar sin costo ni copago a un porcentaje de alumnos pertenecientes a los cinco quintiles más bajos de la sociedad, dos de los tres Centros de Formación Técnica (CFT) e Institutos Profesionales (IP) de Copiapó, que el próximo año recibirán nuevos alumnos, ya se alistan para enfrentar un escenario que "no les complicará".
Si bien no figuran dentro del listado de centros educativos que, por el momento, contarán con el beneficio económico, desde Iplacex -instituto no acreditado- indicaron que la "estrategia" de potenciar sus productos y carreras permitiría enfrentar el panorama que se aproxima. Ello, mientras en Santo Tomás sostuvieron que las becas internas otorgadas a diversos estudiantes -nuevos y antiguos- se mantendrán debido a que la entidad cuenta con la acreditación respectiva.
"no nos debiera afectar"
Carlos Martin, director de Iplacex Copiapó, comentó que "podemos enfrentar sin mayores inconvenientes lo que viene, entendiendo, además, que la medida afectará a muchas instituciones".
En este contexto, Martin explicó que -al tratarse de una entidad de educación superior orientada a estudiantes que ya se encuentran insertos en el mundo laboral, "no nos debiera afectar mayormente. Somos una institución que no recibe ninguna beca del Estado, crédito, nada; somos capaces de financiarnos con nuestros propios ingresos".
Por lo anterior, el director de Iplacex añadió que la entidad ofrece becas desde segundo año y una rebaja de hasta el 15% en el arancel.
En el mismo sentido, Willie Carvajal, director de Admisión del Centro de Formación Técnica (CFT) Santo Tomás Copiapó, señaló que pese a no estar dentro de los recintos educacionales acogidos al sistema de gratuidad "nuestra sede no tiene carreras de perfil universitario, es un foco distinto. Los beneficios que tienen nuestros alumnos se mantienen en la sede porque está acreditada". Condición que, no obstante, se encuentra sujeta a cambios debido a la ley corta que fue aprobada hace algunos días y que durante el 2017 podría incorporar de forma paulatina a CFT e IP del país que cuenten con los requisitos.
En este contexto, al consultar a Inacap sobre las medidas que ya contemplan para enfrentar el proceso de gratuidad al que no se encuentran adscritos, no se obtuvieron respuestas hasta el cierre de esta edición.
Beneficiados de la udaDesde la Universidad de Atacama, si bien aún no tienen claridad sobre la muestra de alumnos nuevos y antiguos que el 2016 contarán con el beneficio de la gratuidad, sostuvieron que "lo más importante para nosotros como institución es que, al abrirse esta posibilidad, se incentiva a los jóvenes para ingresar a la educación superior".Sin embargo, desde la casa de estudios aún no tendrían certeza y manifestaron que posterior al 8 de enero se comenzará a vislumbrar el panorama."No sabemos la muestra definitiva de estudiantes que van a acceder a la gratuidad. Tenemos claros cuáles son los criterios que definió el ministerio, pero al cerrar el proceso de matrícula sabríamos a ciencia cierta cuántos son los que ingresarían con el beneficio, tomando en cuenta que también es para alumnos antiguos, no solo los que ingresan", finalizó Jorge Valdivia, vicerector de la Universidad de Atacama.
CFT - UDA
A comienzos de diciembre desde el CFT-UDA, ex Benjamín Teplizky, se informó sobre la suspensión de matrícula para alumnos nuevos en 2016 debido a una reestructuración interna tras problemas financieros y de gestión.
27 de diciembre se dieron a conocer los resultados de la PSU junto con los postulantes que fueron beneficiados con el sistema de gratuidad.
1.400 alumnos tiene hoy el CFT-IP Santo Tomás en Atacama. De ellos, 889 tienen beneficios económicos para cursar sus estudios. 6.000
estudiantes tiene actualmente la Universidad de Atacama.