Educación
Al colocar sobre la mesa las tres propuestas del gobierno, fácilmente advertiremos que éstas no tienen por finalidad mejorar la calidad de educación que reciben nuestros niños, sino que tienen por objeto debilitar la educación privada en favor de la que pueda proveer el Estado, pasando a llevar de paso, a todas las familias que en los últimos años han optados por escuelas particulares.
Son muchos los elementos existentes que demuestran lo anterior, por ejemplo mencionemos sólo tres, uno de cada proyecto, como son: la eliminación de la obligación de cierre de colegios municipales, próximamente estatales, que muestren malos resultados, cosa que no ocurrirá con los colegios particular subvencionados, los cuales si se verán en dicha obligación según el proyecto de desmunicipalización. La prohibición del copago en las escuelas particular subvencionadas, medida establecida en la denominada ley de inclusión aprobada en enero pasado, la cual provocará, como ya lo estamos viendo, el cierre de muchos colegios y, finalmente, en el proyecto respectivo, la incidencia que pretende tener el Estado en la educación particular subvencionada mediante la ampliación de la carrera docente a profesores de este sector, pasando así a tener el control sobre los profesores que educan al 92% del alumnado nacional.
A todas luces, para el gobierno, la calidad no es prioritaria.
Dictamen del TC sobre gratuidad
El magistrado dijo que el uso de la glosa presupuestaria para financiar el primer año de gratuidad es apropiado. Lo que es inconstitucional es discriminar entre alumnos al aplicar diferentes requerimientos de acceso a esta política a las universidades del Consejo de Rectores, y a las otras casas de estudio, institutos profesionales y centros de formación técnica.
El gobierno ahora debe presentar una nueva fórmula para aplicar el beneficio en 2016. Pero no puede discriminar entre un grupo y otro. Ya no es plausible considerar sólo a las universidades del Cruch o solo a las estatales.
Hay varias soluciones posibles, por ejemplo, retomar el sistema de becas; o enfocarse en los alumnos más vulnerables que estén matriculados en una institución acreditada (pueden incluso determinar el número de años de acreditación) y cubrir al mayor número de esos alumnos vulnerables que permita el presupuesto disponible.
Para esto el gobierno deberá enfocarse en los alumnos y no en las instituciones, y dejar de lado consideraciones de corte ideológico.
Venezuela
El rechazo tiene, entonces, mayor significado que una simple mayoría en la Asamblea que ahora obtiene, la que podría aumentar si resultan elegidos más diputados entre los 22 pendientes.
Aseguran que ya alcanzan los 112. Si así fuere, se podría modificar el presupuesto, acordar leyes revocatorias y hasta el inicio de una Reforma Constitucional. Un riesgo que el Presidente Maduro difícilmente desea correr. Es por ello que hasta el 5 de enero de 2016, en que asumen, podrían suceder muchas cosas. Se han reconocido los resultados y el proceso, más allá de episodios aislados y las maniobras gubernamentales, que no han logrado invalidar la elección. Ni los observadores internacionales harán cuestionamientos que pudieren comprometer la victoria opositora. Pero las amenazas oficiales prosiguen con las acostumbradas descalificaciones. Ojalá no sea así, porque la verdadera razón del triunfo opositor, esta mucho más basada en la realidad que vive el país que en una disputa ideológica. Para los venezolanos han pesado mucho más, la escasez de alimentos, la inseguridad criminal, la prepotencia chavista, la inflación desbocada, los controles de cambios, las limitaciones a los viajes, el encarcelamiento de opositores, así como los permanentes controles gubernamentales, sumada a la presencia majadera de Maduro para eternizarse. Simplemente la población se hartó. No tanto por posición política, sino por la propaganda desmesurada de un sistema fracasado, que la ciudadanía supo percibir claramente y que ya no convence.
Hace unas semanas la Presidente Bachelet firmó el proyecto de ley de desmunicipalización de la educación, el cual pretende que las escuelas municipales vuelvan a la administración directa del Estado. Aquel es el tercer proyecto para el sector que impulsa el Gobierno, con el cual se viene a terminar la agenda en educación escolar a fin de desmantelar nuestro sistema de provisión mixta y erigir un Estado Docente.
Iván M. Garay Pagliai
Señor director: El dictamen del Tribunal Constitucional con respecto a la gratuidad en la educación superior da al gobierno una nueva gran oportunidad de enmendar su propuesta para beneficio de los estudiantes más vulnerables del país.
Paulina González-Pose, Centro de Investigación en Educación de la Universidad de los Andes
Con participación electoral de casi un 75% y una victoria de 99 escaños contra 46, el Movimiento Unión Democrática, logró imponerse en la nueva Asamblea Nacional de Venezuela. La segunda elección entre 18 previas, que el Chavismo pierde en 17 años. Parecía casi imposible.
Samuel Fernández Illanes