Inauguran el primer cultivo en el mundo de truchas y hortalizas alimentado con agua de niebla
PLAN. El Proyecto FIC Falda Verde es ejecutado por la Universidad de Atacama y financiado con recursos del Fondo de Innovación para la Competitividad.
"Esto es un éxito", señaló Hugo Streeter, presidente de la Agrupación de Atrapanieblas de Chañaral y gestor de una iniciativa que, tras años de aciertos y desaciertos, hoy presenta un notable estado de avance. "Aquí estamos haciendo algo trascendente para Chañaral, porque nosotros tenemos las únicas truchas criadas en estanques con agua de nieblas en el mundo", explicó el dirigente.
Se trata del Proyecto FIC Falda Verde, el primer centro de cultivo acuapónico alimentado con agua de niebla, iniciativa ejecutada por los profesionales del Centro Regional de Investigación y Desarrollo Sustentable de Atacama, CRIDESAT, de la Universidad de Atacama, y financiada con recursos de los Fondos de Innovación para la Competitividad, FIC, del Gobierno Regional de Atacama, y aportes de Minera Mantos Copper.
Según indicó Luis Morales, ingeniero acuicultor y jefe de proyecto, "cumpliendo con los objetivos planteados, a la fecha está en pleno funcionamiento el cultivo piloto de acuaponía con agua de niebla, es decir, un sistema de producción que integra la acuicultura con la hidroponía, todo en un mismo sistema, donde los nutrientes de uno suministran los requerimientos del otro".
El proyecto contempló la construcción de un galpón para acuicultura (cultivo de especies acuáticas, en este caso truchas arcoíris), que cuenta con un sistema de recirculación de agua y un sistema de sedimentadores y biofiltros. Además, se construyó un galpón para el cultivo hidropónico de hortalizas (cultivo de plantas sin sustrato agrícola), cuya red de agua proveniente del cultivo de truchas. Para la cosecha de agua, se recuperaron tres atrapanieblas y se construyeron 13 unidades nuevas, todas instaladas en la cima del Cerro Falda Verde, logrando una captación aproximada de 1.500 litros de agua de niebla al día.
Para, Patricio Segovia, Jefe de Gabinete de la Gobernación Provincial de Chañaral, "la cosecha de agua de niebla es una actividad ancestral entre las comunidades en Atacama, por lo tanto, para nuestro Gobierno es un tremendo orgullo ver los avances de un proyecto innovador, con altas posibilidades de diversificación y desarrollo productivo".
Por su parte, Juan Luis Oyaneder, encargado de Desarrollo Social y Relaciones Comunitarias de Minera Mantos Copper afirmó que el proyecto "viene a plasmar un sentimiento muy profundo respecto a la filosofía de la sustentabilidad en nuestras comunidades. Poder atacar, en forma sistémica la problemática del desarrollo económico y social, es una de nuestras inquietudes principales".
Transferencia tecnológica
Con el objetivo de contar con un equipo humano preparado, ocho beneficiarios pertenecientes a la Agrupación de Atrapanieblas de Chañaral y a la Agrupación Gremial de Buzos Mariscadores y Áreas Libres de Chañaral, AG BUMARO, fueron capacitados en la ciudad de Los Andes por María Isabel Toledo, doctora en acuicultura, docente e investigadora de la PUCV; y por Germán Olivares, ingeniero pesquero, académico de la Escuela de Ciencias del Mar de la PUCV y jefe de la Piscicultura Río Blanco de Los Andes.
"Me pone muy contento que esta iniciativa se haya materializado. Con el apoyo técnico de la Universidad, a través de CRIDESAT, vamos a poder determinar los parámetros productivos que podamos tener a futuro, por lo tanto, este es un programa real de alternativas de desarrollo para las comunidades tanto de Chañaral", dijo Héctor Alfaro, presidente de AG Bumaro, uno de los beneficiarios que asistió a la capacitación en Los Andes.
Uno de los últimos objetivos cumplidos fue la puesta en marcha del cultivo, hito alcanzado con la llegada de más de 1.000 ejemplares juveniles de truchas arcoíris. Este proceso se concretó luego de varios meses de trabajos de construcción, que sortearon las lamentables consecuencias dejadas por el aluvión que afectó a Chañaral el 25 de marzo. Dicho traslado, desde Los Andes hasta Chañaral, estableció nuevos conocimientos, principalmente en cuanto a condiciones de temperatura y oxigenación, alcanzando a la fecha la total sobrevivencia de los peces.
"Los avances son notorios"
Para el Dr. Osvaldo Pavez, director de CRIDESAT-UDA y director del Proyecto FIC Falda Verde, "los avances de este proyecto son notorios. Desde el punto de vista del sistema acuapónico, las truchas ya están en sus estanques, sin mortalidad en el traslado o en su adaptación al medio. Además, el cultivo hidropónico está en pleno desarrollo, con pruebas de distintos tipos de hortalizas. Por último, hemos contado con profesionales e investigadores de primer nivel para capacitar los beneficiarios, por lo tanto, puedo confirmar que es un proyecto que ha logrado cada uno de los objetivos planteados, con muchas dificultades, pero que a pesar de eso hoy está prácticamente en pleno desarrollo", explica.