Aldo Duque todavía llora por la despedida de "Vigilantes"
tv. El abogado vive el duelo por el abrupto final del programa de La Red.
Aldo Duque, ex panelista de "Vigilantes", no tiene claro su futuro en la televisión. El abogado comenta que aún vive el duelo por el abrupto final del programa en que se desempeñaba como panelista. "Fue una sorpresa para todo el equipo lo que sucedió. Nos enteramos el mismo día y en horas de la tarde...estamos golpeados".
El abogado trabajó durante siete meses en el espacio de debate. "Fue doloroso. Todo el equipo nos teníamos un gran cariño. Sentíamos que lo estábamos haciendo bien. Evidentemente no lo estábamos haciendo tan bien. La prueba de eso fue que terminaron sacándonos del aire".
El canal debió realizar un ajuste de su programación y hacer frente a la crisis que se vive en la industria televisiva. "Vigilantes", "Hora 7"y "Hora 20" fueron reemplazados por productos envasados en su horario de emisión. Desde marzo de 2012 Duque se acercó a La Red, aunque nunca ha tenido un contrato como rostro. "Al terminar la emisión del programa. Me quedo en el horizonte, vigilante a ver si hay alguna oportunidad".
Nos juntamos a compartir un vaso de bebida y comer un sándwich todo el equipo. Queríamos estar juntos, fortalecernos y reunirnos en un momento que para todos fue muy duro y sorpresivo. Para recuperarnos de la impresión, pero sólo conversamos de las impresiones que teníamos. No ha habido ninguna conversación formal en ese sentido.
Estoy seguro que donde llegue el formato de "Vigilantes" va a ser un éxito tal como lo fue en La Red. Era un programa que estaba diseñado para funcionar tres meses y llegó a más de 500 capítulos. Cada vez con más presencia en los medios y marcando pauta en lo que era el quehacer nacional.
Son decisiones del canal que uno no puede comentar. Pero creo que "Vigilantes" dejó una impronta en la manera de hacer televisión chilena, que difícilmente va a ser superada por otro producto ya sea extranjera o nacional...
Sobre el cierre de cortinas del área de prensa expresó: "Fue un tsunami literalmente lo que ocurrió. No podíamos creerlo. Estamos estupefactos...el departamento de prensa de La Red se había ganado el prestigio de sus pares por su autonomía, independencia y porque era el único que le daba cabida a la gente para opinar. .. El televidente en todos los espacios podía llamar por teléfono y podía intervenir, dar su voz".